Efecto Ilave en Bolivia: Campesinos matan a golpes a un alcalde

Como sucedió en Perú hace dos meses en la localidad de Ilave, esta vez fueron campesinos bolivianos de Ayo Ayo, a unos 90 kilómetros de La Paz, los que lincharon a su alcalde quien estaba acusado de cometer actos de corrupción.

Como lo hicieron en Ilave, Perú, hace casi dos meses, un grupo de habitantes de un poblado aymara boliviano recurrieron a la "justicia por mano propia" y lincharon a su alcalde, quien estaba acusado de cometer actos de corrupción. Según el diario boliviano Los Tiempos, no existían pruebas que legitimen las acusaciones.

El prefecto del departamento (provincia) de La Paz, Nicolás Quenta, confirmó que el episodio ocurrió en la madrugada de ayer en la localidad de Ayo Ayo, a unos 90 kilómetros al sur de la capital boliviana.

Según afirmaron familiares, el edil Benjamín Altamirano, militante del derechista Nueva Fuerza Republicana (NFR), fue secuestrado por un grupo de desconocidos en un populoso barrio de La Paz, donde se encontraba visitando a algunos familiares.

Los captores de Altamirano lo subieron a un vehículo y lo trasladaron de vuelta a Ayo Ayo, donde lo dejaron a merced de una turba enardecida que lo golpeó con palos y piedras hasta matarlo.

Inmediatamente después ataron su cuerpo a un madero y le prendieron fuego, indicaron versiones de periodistas locales en ese poblado indígena.

Un policía que participó en la recuperación del cadáver afirmó que "el cuerpo estaba incinerado, calcinado, carbonizado; su rostro aún guardaba los gestos de desesperación, pues, los comunarios no tuvieron compasión para cometer el hecho".

El Ministerio Público anunció que investigará el caso para dar con los autores materiales e intelectuales del asesinato por el que una persona ha sido detenida

En tanto, los pobladores aymaras de Ayo Ayo -luego de exigir que apagaran cámaras y grabadoras- persiguieron, armados también de palos y piedras, a los periodistas y a los miembros de la fuerza pública que llegaron al lugar, como narró en medio de sollozos una reportera de la red privada de televisión Unitel.

Ayo Ayo se encuentra a unos 50 kilómetros al oeste de la frontera con Perú, cerca del poblado peruano de Ilave, donde en mayo pobladores aymaras lincharon al alcalde Cirilo Robles.

Altamirano se enfrentaba a un proceso por malos manejos de los recursos económicos del municipio y, en una ocasión anterior, su domicilio fue atacado por sus rivales que le reclamaban su dimisión.

El asesinato del edil de Ayo Ayo coincide con el bloqueo de varios caminos en Bolivia, para apoyar una serie de demandas que dividen al movimiento campesino.

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