"El problema de la contaminación de nuestra miel no es nuevo"

A continuación, un usuario comparte algunas precisiones sobre la actividad apícola en la Argentina.

Sr. Director;

En la actualidad estoy vinculado a la actividad apícola. Nuestra compañía se dedica comercializar fraccionada la miel tanto en el mercado interno como al exterior para obtener de esa manera un mayor valor agregado.

El problema de la contaminación de nuestra miel no es nuevo, desde hace dos años, cuando la miel comenzó a exportarse más por la caída del primer productor China por enfermedad en sus colmenas y Australia por sequía e incendio en sus zonas apícolas, que se comezó a detectar contaminación de antibióticos, fenoles y nitrofuranos. Es probable que el problema sea más antiguop que la coyuntura actual. Como en nuestro país nunca pensamos en forma estatégica los problemas salen en la coyuntura, nadie es culapble y el costo que lo pague el ciudadano con los impuestos.

También gran parte de los productores apícolas ni siquiera tienen las colmenas en la forma correcta y sugerida por SENASA, la SAGP y A y tampoco cumplen los estándares internacionales sobre la actividad. Por otra parte muchas salas de extracción tienen piso de tierra, cosa que no es correcta y no está permitida por el SENASA.

Por lo tanto los productores, que hoy claman por que el gobierno los indemnice y subvencione son culpables por querer producir y vender un producto sin invertir en las medidas sanitarias necesarias, sin contratar a los profesionales que pueden asesorarlos correctamente y por ejercer una actividad en forma amateur y no pensando en mejorar el beneficio a obtener con producto de mejorar calidad.

Muchos fraccionadores son culpables por vender en el mercado mieles de muy bajo precio, sin análisis que detecten las sustancias mencionadas y además ofrecen productos con un rótulo que dice miel y son productos bautizados con glucosa por ejemplo sin decir en el rótulo su verdadera composición, es decir miel con glucosa. En otras palabras engañan a los consumidores.

Los gobiernos son culpables, por politizar entidades que deben ser eminentemente técnicas como el SENASA, SAGP y A y el INTA.

Por lo tanto los empresarios apícolas a trabajar, arriesgando la plata propia y no la de los ciudadanos y el estado a dejar de manosear a las instituciones técnicas.

Los empresarios deben contratar a los profesionales veterinarios que los asesoren, comprar los remedios que son aprobados por el SENASA, que los hay varios y no todos provienen de China. Fundamentalmente los empresario a dejar de llorar y pedir para que el estado los salven de sus propios errores.

Señores vivamos en libertad, seamos artífices de nuestro propio destino, generemos nuestro propio dinero, defendamonos de los saqueadores qu quieren vivir de nuestro dinero y asumamos nuestra responsabilidad por todas las deciciones que tomamos sin qu ee lcosto lo pague otro a quien le hechamos nuestra culpa.

Saludos.

Daniel Varela
Pro-Fits Consulting

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