Muerte sobre muerte

La extraordinaria resistencia israelí a conceder a los palestinos una tierra totalmente libre en Gaza y Cisjordania es acompañada por una militarización permanente de la sociedad que ha provocado un efecto similar en el otro lado. El fundamentalismo sionista tiene una notable sinergia con el fundamentalismo islámico, y la tragedia es irreversible.

La seguridad de Israel fue un tema mencionado en dos oportunidades por George Walker Bush en su debate con John F. Kerry para justificar la invasión a Iraq, y esto no hizo sino confirmar las versiones que existían al respecto.

Sin embargo, ¿es más seguro hoy Israel que cuando Saddam Hussein aún prometía financiación a las familias de los combatientes que cometieran actos suicidas contra Israel?

¿Es más seguro Israel luego de matar casi a diario a guerrilleros de Hamas y de las otras organizaciones militares palestinas?

No. Es inevitable que en breve las fotografías se refieran a israelíes muertos luego de atentados palestinos en Haifa o Tel Aviv o Jerusalén. Hay un error en el enfoque del Likud y de los otros partidos fundamentalistas acerca de cómo ganar la paz, y lamentablemente no se puede ayudar a un ignorante que no asume esa condición.

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