Punto para Botín: La defensa logró suspender el juicio

El juicio por la jubilaciones contra el presidente del grupo Santander, Emilio Botín, se iniciaba esta mañana para quedar suspendido hasta el lunes, al poco tiempo de comenzar. La defensa de Botín presentó nuevas pruebas que, supuestamente, demuestran que los pagos no supusieron perjuicio al banco ni a los accionistas. El tribunal, compuesto por Antonio Díaz Delgado, que ejerce de presidente, Raimunda de Peñafort y Luis Martínez de Salinas, admitió los documentos y dio de plazo hasta el lunes para que las acusaciones lo estudien y soliciten, si lo consideran oportuno, una contraprueba.

La defensa del presidente del SCH Emilio Botín consiguió que el juicio por las indemnizaciones millonarias que pagó el Banco Santander Central Hispano a los que hasta entonces fueron copresidente de la entidad, José María Amusátegui, y ex vicepresidente, Ángel Corcóstegui, se suspenda hasta el próximo lunes.

La sorpresa llegó de mano de las defensas, que presentaron nuevos documentos, incluido un informe pericial elaborado por el catedrático y experto en gobierno corporativo Manuel Olivenza, que, supuestamente, demuestra que estos pagos no supusieron perjuicio al banco ni a los accionistas.

El tribunal, compuesto por Antonio Díaz Delgado, que ejerce de presidente, Raimunda de Peñafort y Luis Martínez de Salinas, admitió los documentos y dio de plazo hasta el lunes para que las acusaciones lo estudien y soliciten, si lo consideran oportuno, una contraprueba.

Sin embargo, el fiscal Fernando Burgos, que en un principio se había opuesto a la suspensión del juicio y apostaba por esta misma opción, cambió de opinión al considerar que esta actuación podría suponer una "escalada de prueba y contraprueba", que condicione el proceso.

Emilio Botín, el hombre más rico de España, llegó a la Audiencia Nacional a las 9.20 horas y antes de entrar en la sede judicial dijo a los periodistas que enfrenta el juicio "con respeto a la justicia".

Por su parte, el ex copresidente del SCH, José María Amusátegui, y el ex consejero delegado, Ángel Corcóstegui, llegaron al tribunal pasadas las 10 de la mañana y declinaron realizar declaraciones.

Emilio Botín se enfrenta a una pena máxima de 12 o de 6 años de cárcel dependiendo de si los hechos son considerados apropiación indebida o administración desleal, ya que las acusaciones particulares plantean ambas peticiones. Para los otros dos acusados se piden 8 o 4 años de cárcel.

El último obstáculo para el arranque del juicio fue que Rafael Pérez Escolar pidió la recusación del magistrado Javier Gómez Bermúdez como presidente del tribunal para juzgar a Botín.

Pérez Escolar argumentó que el magistrado tenía contra él una "enemistad manifiesta" y, además, intervino en la ejecución del caso Banesto, por el que él fue condenado a cuatro años de prisión.

Finalmente, la Audiencia decidió revocar a Gómez Bermúdez y poner en su lugar a Antonio Díaz Delgado. Se da la paradoja de que éste también formó parte del juicio de Banesto, ante lo que Pérez Escolar dijo que "este mal recuerdo que tengo de él no es razón suficiente para pedir su revocación".

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