El gran daño institucional por "fusiones y escisiones" de la política

Interpretar la realidad política hoy es importante para dirimir varios temas entre ellos, si se están dañando las instituciones de la República. El presidente ha invitado a "concertar" ideas con su gobierno para forjar una nueva Argentina sustentada en su progresismo de izquierda, advirtiendo que no puede concertar con los sectores de opinión que específicamente señala.

Mendoza ( Los Andes).- Concertar del latín "concertare" tiene diversos sentidos pero para el tema que interesa es "pactar, ajustar, reunir propósitos diferentes, concordar, poner de acuerdo". En rigor conceptual esto implica ceder algunas ideas y procedimientos propios en aras de lograr ideas y procedimientos comunes.
¿Quiere realmente Kirchner ceder algunas ideas y procedimientos suyos?
Afirmo que de ninguna manera, porque está convencido que las propias son verdaderas, inéditas y por primera vez el país ha comenzado un proceso de grandeza … ¡gracias a él, por supuesto!
El 25 de mayo de 2003 cuando asumió, dijo en su discurso confirmando mi aseveración que "dejaré mis convicciones en las puertas de la Casa Rosada".
Algunos ejemplos, pocos pero emblemáticos, adelantándome a quienes discrepen conmigo y me exijan pruebas:
- El plan económico, sustentado en Keynes, es de él, no de Lavagna, su quizá adversario en 2007, que lo comenzó a operar con Duhalde en 2002.
-Una inflación controlada, mediante la "concertación de precios", neologismo K para evitar la antipática "imposición de precios máximos", hace al crecimiento.
-El Estado debe ser "promotor", otro neologismo K para no mencionar el "intervencionismo estatal" tan fuera del mundo actual y del desarrollo, mediante el gasto público de Keynes.
-La reivindicación de la "memoria" lo es sólo para los muertos y desaparecidos del terrorismo de Estado, inadmisible y execrable, porque los "otros muertos" no merecen la memoria nacional, con castigo para quienes lo hagan si son militares, ni la condena de sus autores.
-El Gobierno tiene derecho a imponer sus criterios dentro del Consejo de la Magistratura, para evitar el desagradable procedimiento de "control del Poder Judicial de la Nación".
-El Congreso no puede imponer un plazo de caducidad a los decretos de necesidad y urgencia, propuesta que hizo Cristina en contra de su proyecto anterior durante la presidencia de Duhalde, decretos con los que se sustituye al Poder Legislativo que ya no es necesario en el sistema.
- Los poderes ilimitados al jefe de Gabinete para movilizar partidas del presupuesto contra la ley del Congreso en cuanto a recursos y gastos, inclina a creer que definitivamente el Congreso debe ser cerrado.
- El Gobierno puede intervenir en las ganancias y costos de los empresarios, que son los "verdaderos generadores de inflación" pero nunca el gobierno.
Es obvio que al no poder concertar sobre éstas y otras muchas ideas, la intención K no es tal sino "adherir", del latín "adhaerere", "pegar una cosa con otra, sumarse a una opinión" a cuantos más políticos y partidos acepten someterse.
Entonces políticamente resultan aplicables analógicamente a la "concertación" dos institutos del derecho societario, en forma parcial y adecuada por mí libremente, a este trabajo: escisión y fusión, normatizados por los Arts. 82, 88 y concordantes de la Ley de Sociedades.
Hay fusión cuando dos o más partidos políticos se disuelven sin liquidarse, para formar uno nuevo; o cuando uno ya existente incorpora a otro u otros que se disuelven.
Hay escisión cuando en un partido parte de sus integrantes se fusionan con otro, o para participar con éste en la creación de uno nuevo.
En la singular interpretación K, su sistema político ya se escindió del PJ para formar el "Frente para la Victoria" (FV). Ha nacido así el "kirchnerismo" al que debe adherirse el PJ para subsistir porque ya no le queda casi nada, salvo la nostalgia de Perón y Evita.
Otros políticos de izquierda y derecha, se están adhiriendo al FV. Pero el premio más codiciado es gran parte del radicalismo, para lo cual el gestor más importante es Julio Cobos quien comanda una especia de liga de gobernadores "R" (¿o debo decir "ex R"?).
En suma, se nota con claridad que el FV intenta integrar sus filas por medio de lo que se podría denominar políticamente "fusiones y escisiones por absorción": el absorbente sería el FV y los absorbidos los fusionados y escindidos de otras expresiones políticas, cuantas más mejor. El premio mayor sería un partido único con pensamiento único.
De ser así, el daño que sufrirá la democracia y sus instituciones es inconmensurable. La Argentina dejará de tener democracia e instituciones republicanas. Juan Perón, a quien admiro por su inteligencia y astucia pero rechacé cuando estableció su hegemonía y su autoritarismo, intentó hacerlo pero no lo logró.
Anular a la oposición significaría demoler las bases mismas de la democracia, porque ésta se concreta y perfecciona en el disenso, en las expresiones políticas distintas como solía decir con acierto Ricardo Balbín. "El que gana gobierna y el que pierde ayuda". La verdad se nutre así de las convicciones propias contrastadas con las convicciones ajenas. La mayoría gobierna y esa es su responsabilidad para la que fue elegida; la minoría ayuda criticando constructivamente y oponiéndose cuando con honestidad debe hacerlo, para bien de la República.
En el "pensamiento único" esto es imposible. No hay contradictorio. Piero Calamandrei, un maestro italiano del Derecho, decía que la Justicia sólo puede realizarse cuando una parte sostiene sus verdades y la otra, las suyas, y por eso los abogados deben ser parciales.
En la medida que el juez cuenta con más argumentos y fundamentos de una y otra parte es cuando mejor puede hacer Justicia. Sin contradictorio no existe Justicia sino mera arbitrariedad, una lacra mayor. Pues un gobierno con "pensamiento único", sin oposición, no solo es arbitrario sino que llega un momento que no es más aceptado porque sus falencias destruyen a la comunidad.
El "pensamiento único" suprime los órganos Legislativo y Judicial o los convierte en meras instituciones decorativas como pantallas de que existe democracia en el país, pero todo está subordinado y adherido al gobierno.
Fidel Castro dice que en su isla rige desde 1958, 48 años, la democracia más importante del mundo porque el pueblo elige a su gobierno, claro que no agrega que lo es mediante el partido único, el comunista, y la lista única que él preside.
Kirchner tiene derecho de presidir su partido y ser presidente con su bagaje de convicciones y es obvio que hoy es mayoría. Pero no debe absorber a las minorías con su mayoría, aunque se opongan al oficialismo.
Y los presuntos o reales absorbidos deben recordar que no es para eso que el pueblo les confirió los más honorables cargos en la Nación o en las provincias.
Cada cual debe cumplir su rol electoral para que la democracia sea cada vez menos imperfecta en la Argentina.
 
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* El autor es doctor en Ciencias Jurídicas y Sociales 
 

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