PROBLEMAS ELECTORALES

Descalabro: Cristina le quitaría a Macri el PRO Misiones

Los acontecimientos que se suceden en el PRO Misiones obligan a cuestionar la ambición nacional del emergente jefe de Gobierno porteño, quien cesará en 2015. Pero... la cantidad de tiempo que lleva acéfala la Dirección Electoral de la Ciudad de Buenos Aires obliga a reflexionar acerca de los tiempos y la responsabilidad en la fuerza proselitista de Mauricio Macri...

 

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Mauricio Macri vive bajo el acecho de Cristina Fernández, quien imitando a Néstor Kirchner no pierde oportunidad de intentar complicar/acotar el horizonte político del jefe de Gobierno porteño.
 
Sin embargo, en forma incomprensible, Macri -y sus colaboradores- también contribuye a introducir riesgos y tropiezos en su propio futuro o el de su fuerza política PRO, alianza de su partido Compromiso para el Cambio + Recrear + Partido Federal + Partido Demócrata Progresista de la capital federal + un sector no oficial del Partido Justicialista.
 
Un ejemplo de las dificultades ocurre en Misiones, donde el PRO se encuentra intervenido porque su conducción -en una maniobra muy audaz y exitosa del gobernador Maurice Fabián Closs- decidió en 2010 negociar con el Frente para la Victoria, y llegar a un entendimiento.
 
No es un tema sencillo porque Misiones es el distrito de Humberto Luis Arturo Schiavoni, quien asumió como presidente nacional del PRO.
 
Macri delegó en Schiavoni, amigo de Ramón Puerta, amigo de Macri, y en el ministro de Gobierno porteño, Emilio Monzó, la construcción de una estructura nacional del PRO, que pueda soportar su propia candidatura presidencial en 2015.
 
Sin embargo, a Monzó no le concedieron recursos (ni siquiera un presupuesto decoroso, origen del enfrentamiento actual de ese ex justicialista con varios de los integrantes del gabinete de Macri, desesperación que ha provocado, además, varios errores del propio Monzó), y a Schiavoni lo están desamparando en el objetivo de controlar su propio territorio electoral, donde la Justicia revocaria en días más la intervencion. 
 
La intervención del PRO Misiones era por 1 año e improrrogable, o sea que se encuentra vencida hace tiempo, lo que configura una situación irregular para la propia Justicia Electoral, que desea quitarse el problema de encima.
 
Los interventores de pasaron por el PRO Misiones no fueron capaces de ordenar la situación, y si cumple el mandato legal de convocar a elección interna de autoridades, todo indica que volverian a controlar el partido los dirigentes que acordaron con Closs/Cristina/Frente para la Victoria. 
 
Para Macri sería un doble bochorno:
 
> le quitan un PRO en días de supuesta expansión territorial de su fuerza política, y
 
> le quitan su PRO territorial al jefe nacional del PRO.
 
Luego, Schiavoni perdería autoridad para cualquier negociación en otros distrito ya que en la política, político con territorio es bien diferente a político sin territorio (que equivale a no ser reconocido como político).
 
¿Cómo destrabar la situación?, se pregunta José Torello, amigo de Macri y quien pareciera que, a diferencia de Nicolás Caputo, el otro amigo, sí comprende las cuestiones más allá de la Ciudad de Buenos Aires.
 
El desenlace no es tan sencillo. La intervencion continúa de hecho, y los dirigentes misioneros relegados por la intervencion se presentaron ante el Juzgado Federal Nº1 de la Ciudad de Buenos Aires, con competencia electoral, a cargo de Maria Servini de Cubria para pedir el final de la intervencion, la nulidad de la decisiones tomadas 'a posteriori' del vencimiento legal de la misma (que debió ser por 1 año), y el urgente llamado a elecciones internas.
 
Curiosamente, en base a acuerdos con el propio Macri que denuncian esos misioneros -y corroboran en los pasillos de Tribunales-, Servini no hizo lugar a los reclamos. Por lo tanto, los mesopotámicos debieron apelar ante la Camara Nacional Electoral.
 
Todo indica que los camaristas estarian revocando el fallo de 1ra. instancia y exigiendo la inmediata convocatoria a elecciones, con lo cual el PRO perdería el distrito a manos del kirchnerismo.
 
Asi, Macri no solo no suma estructura para 2015 sino que pierde algo de lo que ya tenía, y se prepara para recibir un pase de facturas de todos los sectores internos que, en su momento, criticaron la designacion de Schiavoni al frente del partido nacional, quien no pudo controlar siquiera, su propio distrito.
 
Pero las cuestiones electorales parecieran costarle mucho esfuerzo de comprensión a Macri y su equipo. Vale la pena recordar los meses que lleva acéfala la Dirección Electoral de la Ciudad, con toda la reforma electoral pendiente en el distrito porteño...

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