ESPAÑA

Rescate exitoso con rescatador no tanto

Si el mercado ha de ser el juez, y mientras se espera la letra chica, el rescate de la banca española parece dar sus primeros pasos en positivo: la prima de riesgo ha abierto con una fuerte bajada al marcar los 471 puntos cuando el viernes (8/06) cerró en 489 puntos y se acercaba hasta los 463 puntos básicos mientras el Ibex sube un 5.37%. Pero para la política, Mariano Rajoy es poco menos que un mentiroso y un vendepatria.

 

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Una de cal y una de arena para el rescate español. Si el mercado ha de ser el juez, el rescate de la banca española parece dar sus primeros pasos en positivo: la prima de riesgo ha abierto con una fuerte bajada al marcar los 471 puntos cuando el viernes (8/06) cerró en 489 puntos y se acercaba hasta los 463 puntos básicos. Lo política no puede decir lo mismo. 
 
La rentabilidad del bono español a 10 años, el de referencia para los mercados, está en 6,1% cuando el viernes pre-rescate superaba el 6,2%.
 
Pero donde parecía desatarse la euforia era en el Ibex-35. El selectivo español experimentaba un fuerte rebote en su apertura: a las 09:10 crecía un 5,37% y se acercaba con fuerza a la barrera de los 7.000 puntos.
 
Los bancos eran los responsables de la fortísima subida de la Bolsa española, con Bankinter a la cabeza (14,56%), seguido de Caixabank (10,64%), Popular (7,95%), BBVA (8,50%), Santander (7,16%) y Sabadell (5,62%). Únicamente Bankia eludía el rebote y cotizaba plano.
 
Un tanto más modestos, pero igualmente importantes, eran los avances de los grandes valores del mercado: Endesa ganaba el 2,74%; Inditex, el 3,74%; Repsol, el 4,97%; Iberdrola, el 4,79%, y Telefónica, el 5,47%. Al igual que el mercado de renta variable, la deuda soberana española recibía con beneplácito el salvataje europeo al sector financiero.
 
La semana pasada bastaron los rumores de un rescate para apaciguar a los inversores: el Ibex-35 vivió su mejor semana en 6 meses al subir el 8,03% y la prima de riesgo bajó de los 500 puntos. 
 
Y continúan las señales positivas: los futuros de las principales bolsas europeas anticipan subidas próximas o superiores incluso al 2%; el euro se dispara por encima de los US$ 1,26.
 
Estos datos pueden interpretarse como un refrendo a las palabras de Olli Rehn, el comisario europeo de Asuntos Económicos: el rescate sería "una señal clara a los mercados de que la eurozona está decidida a emprender acciones decisivas para calmar los mercados". Parece que este lunes (11/06) las primeras señales van efectivamente en ese sentido. 
 
El rescate europeo de España se sintió en Tokio donde los inversores han acogido con entusiasmo el rescate bancario español: ha abierto con alzas de 11,81% tras cerrar con pérdidas el viernes (8/06) pasado.
 
Lo mismo se replicó en la mayoría de las bolsas europeas tras la decisión del Eurogrupo de poner a disposición un crédito de hasta 100.000 millones de euros para la recapitalización de la banca española.
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la Bolsa de Fráncfort era la que más subía: su índice DAX 30 ascendía en los primeros compases de la negociación un 2,42% , hasta 6.278 unidades.
 
El índice general de la Bolsa de París registró una subida del 1,77% y se situó en 3.105,78 puntos.
 
La Bolsa de Milán abrió al alza y su índice selectivo, el FTSE-MIB, subía un 1,70%, para situarse en los 13.674,33 puntos.
 
El índice general FTSE Italia All Share subía un 1,67%, hasta los 14.645,44 puntos.
 
El FTSE-100 de la Bolsa de Londres ascendía 96,74 puntos, un 1,78%, y se situaba en 5.531,82 enteros.
 
"El rescate ha sido muy bien interpretado por el mercado" porque afronta el problema bancario y porque "supera con mucho las necesidades estimadas", afirma el director de Estrategia y Macroeconomía de Inverseguros. No obstante, Alberto Matellán advierte de que las tensiones no se limitan a España. "Europa en su conjunto tiene dificultades que todavía están por afrontar y que, si no lo hace en las próximas semanas y o meses, el rechazo del mercado volverá".
 
Por ejemplo, Grecia está aún pendiente de unas elecciones que se celebrarán este fin de semana y que podrían dar al traste definitivamente con las medidas para sacar al país del agujero. De ocurrir ganar los radicales "podría tener un efecto demoledor en las bolsas, deshaciendo la euforia del día de hoy", señala Daniel Pingarrón, estratega de Mercados de IG Markets. Un claro ejemplo de el componente político es parte de la letra chica del rescate. 
 
"Podemos respirar porque hasta hace prácticamente una semana estábamos ahogados, pero todavía no se puede hablar de tranquilidad porque quedan muchas noticias importantes por descontar en las dos próximas semanas", advierte Alberto Roldán, director de Análisis de Renta Variable de Inverseguros.
 
Y es que, aún falta concretar la letra pequeña del rescate, como el precio a pagar por el préstamo, plazos y cuantía. Se está a la espera de lo que señale la auditoría de las dos firmas independientes contratadas por el Gobierno. De momento, el informe del FMI cuantifica la ayuda en un horquilla de entre 37.000 y 80.000 millones.
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El adelanto de la publicación de este documento, previsto para este lunes (11/06), provocó una reunión urgente del Eurogrupo para el sábado en la que se dio luz verde a un crédito de hasta 100.000 millones de euros para la banca española, sin condiciones de política económica para el país. No así para el sector financiero, que verá tocado a la baja la remuneración de los directivos y los dividendos, además del despido de los cargos políticos en las entidades. Si bien, aún falta por concretar los detalles y la cuantía definitiva, a la espera de la auditoría de las 2 consultoras independientes contratadas por el Gobierno.
 
En un nota, el Ministerio de Economía afirma que la inyección aprobada este fin de semana por el Eurogrupo no sólo "no socava las condiciones actuales de la deuda pública, sino que refuerza su solvencia".
 
El rescate no modificará el calendario previsto de emisiones de deuda del Tesoro, ni tampoco el programa de consolidación fiscal y las reformas estructurales, señala el Gobierno.
 
Y así y todo, Mariano Rajoy, el “gran rescatador” no logra sumarse cucarda alguna. 
 
La oposición no tiene pensado darle un respiro a Rajoy. El mismo sábado, cuando el Gobierno reconocía que había capitulado, que había pedido ayuda a Europa, partidos y sindicatos adelantaron que el presidente del Gobierno debía de dar la cara en el Congreso para explicar el préstamo a España, una decisión que a buen seguro cambiará la vida del país y de los ciudadanos. Y ellos, a diferencia del Ejecutivo, que ha señalado el rescate como palabra maldita, tabú, sí utilizan el término sin complejos. 
 
La conferencia de prensa de Rajoy hoy en la Moncloa, con toda la formalidad y el boato que desprende el Salón de Tapices de la Moncloa, no sirvió de bálsamo para la oposición. Ni como sustituto de una comparecencia en el pleno de la Cámara baja. Ni para disipar dudas de las consecuencias de esa línea de crédito de hasta 100.000 millones de euros abierta desde Europa. 
 
Sin embargo el presidente ya anunció que no tiene previsto acudir a la Cámara hasta después del Consejo Europeo de finales de mes, momento en el que además se concretarán las condiciones de la asistencia financiera a España.
 
Sin embargo, rendir cuentas en el Parlamento no es una opción sino un mandato. 
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Para el PSOE, el rescate es una mala noticia, porque "deteriora" la imagen del país y no "una lotería", no un ”regalazo de los Reyes Magos", dijo el secretario general de los socialistas. Alfredo Pérez Rubalcaba quien desconfía de que la manguera de 100.000 millones de euros no suponga ninguna imposición de más ajustes macroeconómicos como se les ha prometido a los españoles. El principal partido de la oposición volvió a reclamar una comisión de investigación que analice, vigile y proponga medidas mientras dure todo el proceso de recapitalización. 
 
Por Izquierda Unida. Cayo Lara, pidió a Rajoy que "deje de mentir". "No hay duda de que vamos a tener que pagar una deuda que no es nuestra y sus intereses antes que tener un Estado del bienestar, por mucho que digan que sólo afecta al sistema financiero", ya que a fin de cuentas el Gobierno es el "garante" último de que los préstamos se devolverán. El coordinador federal hizo una simple cuenta: el Estado "aumenta su deuda y su déficit y, de media, cada español va a tener una deuda individual de más de 2.000 euros que pagará a través de los Presupuestos Generales del Estado". Estamos, subrayó, ante "un rescate y una intervención", como bien ilustra el comunicado del Eurogrupo. Su compañero en la federación Gaspar Llamazares incidió desde Oviedo en la misma idea: no es "un crédito blando", sino una "intervención" pura y dura, que "se da a cambio de recortes sociales que supondrán un retroceso en los derechos de ciudadanos y trabajadores". "Todos sabemos que no se dan euros a 40 céntimos", explicó.  
 
Iniciativa per Catalunya Verds (ICV) ya había señalado el sábado que claro que se trataba de un rescate que se cargaría en las espaldas de los ciudadanos. "Los préstamos son al Frob [el Fondo de Restructuración Ordenada Bancaria], que es un organismo público, con lo que responden los Presupuestos y por tanto los ciudadanos", sostuvo su portavoz en la Cámara baja, Joan Coscubiela. Este domingo, siguió condenando las "mentiras" del Ejecutivo, esta vez por boca de su presidente. "Las mentiras de Rajoy y la desconfianza que provocan es tal que un día de estos, si nos dice que se llama Mariano, la ciudadanía no le creerá", ironizó en Twitter. 
 
No es un rescate, sentenció Francisco Jorquera, diputado del BNG, en un comunicado es un "saqueo" al pueblo, y traerá "más recortes de derechos económicos y sociales". Como las otras formaciones de izquierda, los nacionalistas gallegos censuraron la estrategia fraudulenta del PP: "El Gobierno está intentando engañar a la gente sobre las consecuencias" de la asistencia europea, cuando en realidad es "el conjunto de la sociedad la que va a tener la factura de este préstamo multimillonario a la banca". 
 
La reclamación de explicaciones al presidente no se limitó a la izquierda parlamentaria. También UPyD señaló con dedo acusador al jefe del Ejecutivo y le exigió que vaya ya al Congreso. Para la portavoz del partido, Rosa Díez, la comparecencia de Rajoy de esta mañana estuvo "plagada de mentiras encadenadas", porque el préstamo europeo engrosará la deuda y el déficit y es "falso" que vaya directamente a los bancos. Va al FROB, recordó, y es al Ejecutivo al que corresponde su rembolso. Díez se dijo irritada por la promesa del presidente de que llamará al pan, pan, y al vino, vino, y de que dirá "la verdad" contra viento y marea: "Debe ser que el presidente Rajoy tiene un concepto muy relajado de lo que es la verdad", remachó. 
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Fuera de los partidos, las críticas siguieron arreciando por parte de los sindicatos. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha subrayado que la consecuencia de la petición de ayuda es el endeudamiento de la sociedad, mientras que desde Comfia-CCOO exigen garantías de empleo en los procesos de restructuración y transparencia para explicar las consecuencias del proceso.
 
Y es que algo de mentirillas si que hubo. Al final de cuentas, tras negarlo sistemáticamente, los “hombres de negro" sí terminarán yendo a España a supervisar el rescate de la banca. Así fue como llamó el ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, a la 'troika', formada por representantes de la Unión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional. Y tanto el ministro alemán de Finanzas como el comisario de Competencia de la UE han confirmado que esta terna controlará de cerca el proceso de reformas de la banca española, que será financiado con ayudas de hasta 100.000 millones de euros.
 
"Va a haber una troika al igual que la ha habido en otros casos. Y así de igual se supervisará para que el programa sea cumplido", sostiene Wolfgang Schäuble en declaraciones a la radioemisora 'Deutschlandfunk'. Sin embargo, el control se limitará a la restructuración del sector financiero, ha dicho.
 
"Quien da dinero nunca lo da gratis, quiere saber qué se hace con él. Otra cosa es ver como actúan. Yo espero que actúen bien, de forma honesta, que no se crean que vienen a un país bananero. Y estoy seguro de que lo van a entender así. Vienen aquí a comprobar que se utiliza bien un dinero que han puesto ciudadanos tan europeos como los españoles", ha señalado por su parte el vicepresidente de la Comisión Europea y comisario de Competencia, Joaquín Almunia.
 
En declaraciones a la 'Cadena Ser', el comisario ha comentado que el FMI no participará en este caso como cofinanciador del préstamo, sino sólo actuará en tareas de seguimiento.
 
El comisario ha recordado además que Bruselas negociará "hasta el último detalle" cado uno de los planes de restructuración de las entidades financieras que reciban apoyo público, como ya ha hecho con unas 60 entidades, algunas de ellas españolas.
 
O sea, España ha perdido más soberanía. 
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Para Stigliitz, el rescate no funcionará
 
El Premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz cree que el rescate financiero a España no funcionará. Según argumenta el Nobel, si los bancos son los principales compradores de deuda soberana, el Gobierno podría verse obligado a pedir ayuda a los mismos bancos a los que ahora inyecta dinero para sanearlos con los fondos de rescate europeos.
 
"Si el Gobierno español rescata a los bancos y la banca rescata al Gobierno, el sistema se convierte en una economía vudú. No está funcionando y no funcionará", señaló con rotundidad el economista en una entrevista realizada el viernes (8/06) por Reuters, un día antes que el Eurogrupo hiciera efectivo el rescate a la banca española por un montante de hasta 100.000 millones de euros.
 
Stiglitz es de la opinión de que la prioridad de Bruselas debería ser la de crear una autoridad bancaria común para toda la zona euro. Si no, no se podrán impulsar políticas que impulsen de nuevo el crecimiento económico, asegura el economista, que fue asesor económico del Gobierno de Bill Clinton, y conocido por sus críticas a las medidas de austeridad impulsadas por Angela Merkel.
 
El rescate podría engordar en un 10% la deuda pública, lo que podría complicar al Gobierno colocar bonos a un precio razonable en los mercados financieros y como consecuencia, podría verse obligado a pedir ayuda a las mismas entidades financieras a las que ahora está ayudando, una situación en la que el país, además, está sometido a las duras condiciones de ajuste del déficit impuestas por el pacto fiscal.
 
De esta manera, el rescate bancario supondrá "abrir cortafuegos al mismo tiempo que estás alimentando el fuego con queroseno", en palabras de Stiglitz. "Lo que hay que hacer es encarar el problema subyacente, esto es, promover el crecimiento", afirma.

 

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