AMAMANTAMIENTO OBLIGATORIO

Maduro ordena: "Teta o prisión" (SanCor es una "trasnacional mala")

La Asamblea Nacional venezolana votará el martes 18/06 un proyecto del oficialismo que castiga la publicidad de fórmulas lácteas y biberones y prohíbe la prescripción de suero a recién nacidos. La idea es obligar a las madres a amamantar. Ley de Protección, Promoción y Apoyo de la Lactancia Materna, proyecto que empezará a discutir el próximo martes en el pleno.

Según la diputada Odalys Monzón, representante del Estado de Vargas (al norte del país) por el oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), el lazo que se establece entre la madre y el recién nacido en el acto de amamantar está en riesgo por culpa de las “trasnacionales que venden esas fórmulas [lácteas]”. (?)

Muy injusto el planteo considerando que SanCor, por ejemplo, la cooperativa láctea santafecina, tanto ha aportado y aporta a la provisión láctea bolivariana.

Es más: cuando SanCor estaba casi en quiebra, fue Hugo Chávez Frías quien la rescató del naufragio económico-financiero con un contrato importante de importación láctea.

Por lo tanto, cuando Odalys Monzón habla es obvia o su ignorancia o su hipocresía. Más bien ella está justificando la carencia de divisas que tiene Venezuela, y la imposibilidad de imponer el pago del comercio exterior en moneda local, otra ambición chavista.

Odalys es la vicepresidente de la Comisión de Familia de la Asamblea Nacional, y redactó un instrumento que garantice “que todo niño tenga derecho a la lactancia” hasta el extremo de prohibir el uso de “teteros y biberones”, según dijo en entrevista con el principal canal del Gobierno.

Los anuncios de la diputada fueron criticados por las feministas, quienes han percibido como una caricaturización de sentidas reivindicaciones de la igualdad de género. Pero tal parece que no había que tomárselo tan a pecho. Según trascendió, el proyecto de reforma, que modifica al menos 18 de los 33 artículos de la ley actual e incluye severas sanciones, no contempla –al menos, no antes de su próxima discusión en el hemiciclo, luego de quedar listo en la Comisión respectiva— el veto al biberón.

No obstante, algunos de sus artículos declaran la guerra a las fórmulas lácteas y al biberón, como si del cigarrillo se tratara. Se castiga la promoción publicitaria de esos complementos y su administración, en centros de salud públicos y privados, a niños menores de seis meses, “salvo indicación médica”. También se prohíbe la prescripción de suero glucosado a neonatos.

“Lo más importante es el amor, que a veces se pierde porque no le dan ese calor que implica amamantar al bebé”, continuó Monzón. Pero el tema detrás de este proyecto de ley, aseguró la diputada, no es solo la protección del nexo entre madres e hijos. Se trataría, además, de una cuestión de “soberanía alimentaria”, un lema propio de la revolución bolivariana que por estos días se encuentra muy en entredicho, ante el desabastecimiento de productos de primera necesidad en abastos y supermercados, la carestía, y las importaciones masivas que el Gobierno venezolano está obligado a hacer para paliar la situación.

Monzón es una de las diputadas más chavistas de la fracción oficialista en la Asamblea Nacional, acusasa de ser la agresora de la diputada opositora María Corina Machado, quien sufrió de fractura en el tabique nasal y debió someterse a una intervención quirúrgica.

Desde la Comisión de Familia de la ANV, su presidenta, la también oficialista María León —ex ministra del gabinete de Hugo Chávez— precisó que la ley busca “concienciar al pueblo, a las madres venezolanas y al mundo, para que conozcan la importancia que tiene el suministro de leche materna a niños y niñas, desde su nacimiento, hasta los dos años de edad”.

Impresentable la tal León, pero lo cierto es que el texto que será sometido desde el martes a la consideración de la Asamblea Nacional, con amplia mayoría del partido de gobierno, prevé también que empresas e instituciones incluyan en sus horarios de trabajo turnos para que las madres den de mamar a sus bebés, y acondicionen espacios para tal fin. Además, forzará la creación de bancos de leche materna.

Para los hospitales y médicos que desatiendan sus estipulaciones, la reforma impondrá multas que llegan hasta a US$ 50.000 (al cambio oficial) y la suspensión del ejercicio profesional por 120 días.

Dejá tu comentario