MARINA SILVA PODRÍA GANAR EN 2DA. VUELTA A DILMA

Muchos brasileros creen que el analista despedido tenía razón

Hay que aclarar que la revista The Economist lo afirmó muchos antes que el resto: a comienzos de 2012 afirmó que si Dilma Rousseff mantenía en el gabinete a Guido Mantega y sus políticas económicas, Brasil dejaría de atraer las inversiones directas globales. Dilma se enojó con The Economist pero como en el semanario nadie firma las notas, no se individualizó al autor. The Economist se mantuvo en su posición... y tuvo razón. Tanto es así que, más recientemente, un analista del Santander reiteró que si Dilma (y sus políticas) continúan otro mandato presidencial en Brasil, el riesgo de decrecer es importante. En este caso, el analista fue despedido y el Santander solicitó disculpas. Pero muchos brasileros creen que el ex analista del banco español tenía razón. De lo contrario las encuestas no estarían exhibiendo una eventual derrota electoral de Dilma Rousseff si va a 2da. vuelta contra la ambientalista Marina Silva. La sociedad brasilera se encuentra harta de la corrupción del gobernante PT. Dilma no es una PT "ortodoxa" pero tampoco pudo desprenderse del PT a causa de Luiz Inácio Lula da Silva, su protector. Y encima no la acompañan las políticas económicas que apaña el PT...

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). El ingreso de la ex ministra (de Luiz Inácio Lula da Silva aunque enfrentado a él), Marina Silva, en la disputa presidencial, tras la muerte en un accidente de avioneta del candidato Eduardo Campos, ha revolucionado el escenario electoral brasileño. 
 
Una encuesta muestra que la nueva candidata del Partido Socialista Brasileño (PSB) suma 29% de las intenciones de voto
 
Aécio Neves, el candidato del Partido de Social Democracia Brasileña (PSDB) y, hasta ahora, principal rival de Dilma Rousseff, queda 10 puntos detrás de Silva. 
 
La presidenta Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), mantiene el liderazgo con el 34%.
 
La encuesta contempla el resultado posible en una hipotética 2da. vuelta: Silva ganaría a Rousseff  con el 45% de los votos, contra 36% de la Presidenta. 
 
Los datos forman parte de una encuesta que el diario Estado de S. Paulo y la cadena TV Globo encargaron al instituto Ibope, la mayor empresa de investigación de mercados en Latinoamérica. 
 
El margen de error es de 2 puntos porcentuales, con un intervalo de confianza del 95%. 
 
1 semana antes, una encuesta del instituto Datafolha ya había mostrado que la socialista tenía posibilidades de ganar a Rousseff, pero en aquel momento las candidatas estarían en un empate técnico.
 
Ibope también midió el rechazo a los candidatos. Marina cuenta con el menor rechazo de los votantes, el 10% de los electores afirmó que no la votaría de ninguna manera. Rousseff es rechazada por el 36% y Aécio por el 18%. La encuesta fue realizada con 2.506 electores entre el lunes y el martes en 175 ciudades de las 5 regiones brasileñas (Sudeste, Nordeste, Norte, Centro-Oeste y Sur).
 
El debate
 
Más allá de las encuestas, Brasil se da algunos lujos que no consigue la Argentina. Por ejemplo, los debates presidenciales. Acaba de ocurrir el N°1 de 4 previstos antes de la 1ra. vuelta electoral, el 05/10.
 
Los principales candidatos a la presidencia de Brasil debatieron en el canal de TV Bandeirantes durante casi 3 horas entre la noche del martes 26/08 y la madrugada del miércoles 27/08, respondiendo algunas preguntas de periodistas y otras que se cruzaron entre ellos mismos.
 
La presidenta Dilma Rousseff y candidata a la reelección por el Partido de los Trabajadores (PT) fue el blanco preferido de todos sus adversarios presentes, aunque el candidato socialdemócrata Aécio Neves también buscó confrontar con la ambientalista Marina Silva, quien le arrebató el 2do. lugar en los sondeos de intención de voto.
 
En la ronda, Rousseff insistió en defender su gestión ante las críticas por el descenso de la economía y las acusaciones de corrupción en la petrolera estatal Petrobras lanzadas por el candidato Aécio Neves. Pero no le respondió a Marina Silva, quien acusó a la mandataria de que "no reconoce los problemas del país, por lo que no los puede resolver".
 
Y agregó: "Una de las cosas más importantes es reconocer los errores. Ese Brasil que la presidente Dilma acaba de mostrar, colorido, no existe".
 
Marina también acusó a Dilma de no tener "visión estratégica", diferenciándola de sus antecesores Luiz Inácio Lula da Silva y Fernando Henrique Cardoso
 
Una de las pocas críticas directas que sufrió Marina Silva llegó de Neves, quien afirmó que no veía coherencia en su discurso sobre "la nueva política", un lema al que la candidata alude en numerosas ocasiones como la manera de acabar con el bipartidismo actual. 
 
Neves cuestionó que la ecologista se diferencia del gobernador de São Paulo, Geraldo Alckmin (PSDB), con quien mantiene importantes diferencias políticas, pero a la vez quiera gobernar al lado de José Serra (PSDB), a quien no apoyó en la 2da. vuelta de las elecciones de 2010. La ecologista se defendió que su objetivo es combatir “la vieja polarización [entre PT y PSDB] que desde hace 20 años supone un retraso" para el país y gobernar al lado de los buenos políticos sean del partido que sean.
 
Durante el debate, Neves defendió el final de la reelección y un mandato de 5 años para cualquier cargo electivo. 
 
Él anunció, además, que si es elegido presidente, nombrará al economista Armínio Fraga, expresidente del Banco Central, como ministro de Hacienda. La estrategia busca agradar al mercado financiero, ya que Fraga fue uno de los creadores del famoso Plan Real, que estabilizó la economía brasilera, amenazada por una gran inflación.
 
En las consideraciones finales tras el debate, Marina recordó las dificultades que tuvo para registrar su candidatura con su partido Rede Solidaridad, cuyo fracaso le llevó a aliarse con el PSB, y el trauma de perder a su compañero Eduardo Campos. 
 
Rousseff afirmó que quiere mantenerse en el poder para continuar el trabajo de Lula, mientras que Neves dijo que le resultaba difícil diferenciar las candidaturas de sus dos principales adversarias. 

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