CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24).- Argentina estuvo en serio peligro de descender a la zona americana de la Copa Davis 2014 tras 12 años en la máxima categoría a raíz del retiro del cordobés, David Nalbandian, como jugador ‘símbolo’ del conjunto argentino y de la ausencia de Juan Martín Del Potro por su pésima relación con el saliente capitán, Martín Jaite y con la Asociación Argentina de Tenis.
COPA DAVIS
La hora de Del Potro: Sin Jaite ni figuras, la AAT le entrega la llave del equipo
Ya es sabido que Argentina logró este fin de semana mantenerse en el Grupo Mundial de la Copa Davis tras ganarle en la serie de repechaje a Israel por 3-2 y de que Martín Jaite dejará su cargo al frente del conjunto argentino. Con este escenario, la Asociación Argentina de Tenis (AAT) encabezada por su presidente, Arturo Grimaldi, volvió a pedir por el retorno de Juan Martín Del Potro. Prometió “retomar las conversaciones” con el tandilense, que lleva 2 años sin formar parte del elenco albiceleste. Grimaldi y la AAT están dispuestos ahora a permitir que Del Potro opine sobre el nuevo capitán del equipo, uno de los reclamos del tenista, a pesar de que la dirigencia había advertido meses atrás que no consultarían con él la elección del nuevo entrenador.
El peligro de la permanencia en el Grupo Mundial por la Ensaladera de Plata había comenzado cuando Argentina había perdido la serie de primera rueda ante Italia en Mar del Plata, ciudad que le trae muy malos recuerdos luego de haber perdido en 2008 la final de la máxima competencia tenística a nivel de equipos, hasta la por entonces imbatible España que descendió de categoría este fin de semana tras 19 años.
Ahora superado el repechaje ante Israel, las próximas metas de la máxima entidad que rige al tenis argentino serán designar al capitán que reemplazará a Martín Jaite y, especialmente, lograr un acercamiento con Juan Martín del Potro para conseguir que el tandilense regrese al equipo de Copa Davis.
La última serie que jugó Del Potro fue en la semifinales de 2012 en Buenos Aires cuando perdió con República Checa por 3-2.
La mala relación entre Martín Jaite y Juan Martín Del Potro (que tuvo uno de sus puntos más altos a raíz de la eliminación de Argentina en las semifinales de la Copa Davis a manos de República Checa en Praga), sumado al retiro de Nalbandian al frente del conjunto nacional hicieron coincidir a varias voces reclamando por el regreso de Del Potro a la alta competencia en su condición de número uno del ranking nacional y mejor posicionado a nivel mundial.
Del Potro, a diferencia de los actuales integrantes del equipo de Copa Davis es el único genera preocupación en cualquier rival, y por su rendimiento, ha demostrado ser una figura preponderante para las aspiraciones de ganar la Copa Davis, sin mencionar que además es quien atrae público y garantiza venta de entradas, ingresos que no vienen mal a la AAT.
Después de su salida en 2012, con acciones y declaraciones desafortunadas que parecieron dinamitar los puentes de comunicación la necesidad es obvia, ya se terminó La Legión, no hubo recambio de jugadores en alto nivel y nadie garantiza hoy las ventas que puede generar el tandilense a pesar del encono que los hinchas mostraron en Mar del Plata.
Tras varios intentos de la AAT para intentar el regreso del tandilense al equipo argentino, Del Potro había manifestado en una carta que le había mandado a los directivos de la entidad madre que rige al tenis argentino que no fue "consultado en la elección del capitán, superficies, sedes" y contaba que está cansado de que se lo invite "por mail" y al mismo tiempo se lo presione "a través de cierta prensa", intentando dejarlo "mal parado frente a la opinión pública", algo que la Torre de Tandil consideraba "un doble discurso hipócrita".
En sus tres años como capitán de la Argentina, y casi sin poder contar con Juan Martín del Potro, Jaite alcanzó dos series de semifinales, en 2012 y 2013, que perdió ante República Checa.
Consumada la victoria de Argentina ante Israel este fin de semana, el presidente de la AAT manifestó en declaraciones al diario La Nación que “anímicamente, mantener la categoría es un golpe a favor muy grande. La Argentina está muy acostumbrada a jugar en el Grupo Mundial. Lo han padecido muchos equipos, incluso grandes clubes de fútbol, no sería nada nuevo. Pero estamos contentos, muy contentos”.
Ante los rumores que empezaron a circular acerca de un posible alejamiento de su cargo como máximo dirigente del tenis argentino, Arturo Grimaldi dejó en claro que “me gustaría aclarar que voy a seguir en el cargo de la presidencia de la AAT, firmemente. Y que en la Asociación hay una sola línea de objetivos a cumplir, en la cual se conversa mucho, se analiza, se discute. Tenemos muy claro lo que queremos y yo me voy a abocar a ello. El nuevo capitán se anunciará a fines de octubre o a principios de noviembre. Queremos analizarlo tranquilamente, ver, conversar con los jugadores. Queremos hacer lo mejor posible” y agregó que “hablar con Del Potro es una función institucional que me corresponde a mí, y en los cuatro años que me quedan como presidente siempre voy a estar en la búsqueda del diálogo, del consenso y tener objetivos en común con todos los jugadores, mucho más aun con el jugador número 1 de la Argentina. Así que ése será un objetivo institucional de la Asociación y que lo voy a llevar yo personalmente, y nadie más que yo”.
Además, Del Potro no sólo busca un cambio de capitán, sino mejoras desde lo estructural. Más amplias que sólo una designación. Y Grimaldi lo sabe al reconocer que “yo creo que sí hay cosas, muchas cosas. Hay errores que ha cometido la Asociación Argentina de Tenis, que estamos dispuestos a corregir. Yo creo que esos errores son menores, que se han ido sumando y han producido un distanciamiento que no es lo que la Asociación quiere; se va a estar en la búsqueda, desde el principio, de tener objetivos en común (con Del Potro). Pero en estos momentos prefiero no hablar más del tema y darle aire a la situación. Todos la necesitamos”.
Finalmente, el presidente de la AAT mencionó lo que hubiera sucedido, en términos económicos, al descender a la Zona Americana al afirmar que “ahora venimos diciendo menos que somos Copa Davis dependientes. Hoy tenemos un sponsoreo que no alcanza a cubrir todo el déficit, pero que es importante. Hemos disminuido esa dependencia de la Copa Davis. Hemos mejorado mucho nuestro presupuesto, que sigue siendo deficitario, pero con una cifra manejable”.