FRENO DE SORIA Y CRISIS EN RÍO NEGRO

Peligra la candidatura de Pichetto, por arrodillarse ante La Cámpora

El Frente para la Victoria rionegrino navega en la incertidumbre. No hay fórmula ni acuerdo por la integración de las listas legislativas. Y tras el fuerte cruce entre el senador Miguel Pichetto y el intendente de Roca, Martín Soria, por su rendición ante La Cámpora, el PJ decidió castigarlo, y suspendió el lanzamiento del sábado del candidato a gobernador. "Tengo presiones de Wado y Kolina", le habría confesado Pichetto al hijo del exgobernador Carlos Soria. "A Martín no le sirve de nada meter un legislador en esa Legislatura que va a estar llena de cachivaches si nos meten a La Cámpora, Kolina y el Movimiento Evita", sostienen en el peronismo provincial.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) El lanzamiento del candidato a gobernador del Frente para la Victoria, el senador Miguel Pichetto, fue suspendido, luego de que Martín Soria, el influyente intendente de General Roca que lidera la liga de intendentes de la provincia, rompiera la alianza furioso después de que Pichetto se "arrodillara" ante la Rosada y La Cámpora y les entregara las listas provinciales.
 
Previsto para el sábado, según informa el diario 'Río Negro', Soria estaba a cargo de la organización de esa actividad y anoche envió la orden a sus allegados para que suspendan todo, a pesar de que desde la mañana habían comenzando a enviarse las invitaciones.
 
El peronismo rionegrino esperaba una resistencia similar a la de Francisco 'Paco' Pérez y Carlos Ciurca en Mendoza.
 
Según el sitio 'La Política Online', Pichetto le habría confesado a Soria tener "presiones de Wado y Kolina".
 
Con el hijo del ex gobernador Carlos Soria, tenía un acuerdo por el cual elegiría al vicegobernador, colocaría un diputado nacional y varios legisladores provinciales.
 
Luego de que María Emilia Soria, hermana de Martín, fuera impugnada por inconstitucional para ser candidata a vice (no cumple el requisito de tener 30 años cumplidos), el intendente de Roca iba a optar por Anahí Tappatá, una dirigente histórica del peronismo rionegrino.
 
Pero Soria se topó con que no sólo los camporistas tenían resquemores con Tappatá por su pasado cercano a Domingo Cavallo, sino que debió soportar que Pichetto viniera con nuevas órdenes de la Rosada para marginar al peronismo de las listas.
 
El senador le pidió a Soria que hiciera renunciar a su hermana de la lista de diputados nacionales para llevarla como cabeza de la lista sábana a legisladores provinciales. No sólo eso, en Río Negro se eligen 46 bancas provinciales y Pichetto le ofreció esa sola a Soria, pese a que en el peronismo estiman que si el senador gana las elecciones meterán no menos de 22 legisladores.
 
En este marco, Soria enfureció, rompió la alianza y ya ni le atiende el teléfono a Pichetto, quien según el matutino provincial, evaluaba por estas horas otras alternativas como la de la senadora Silvina García Larraburu (repitiendo el esquema que en el 2013 ganó las elecciones legislativas nacionales en la provincia). No obstante esta última opción no parecía viable.
 
"A Martín no le sirve de nada meter un legislador en esa Legislatura que va a estar llena de cachivaches si nos meten a La Cámpora, Kolina y el Movimiento Evita", señalaron al sitio antes mencionado  desde el peronismo rionegrino.
 
"No sólo es un acto de cobardía, Pichetto perdió la brújula, ya no estamos en 2007, estos se van en unos meses", agregaron las fuentes.
 
En Río Negro extrañan el coraje de Soria padre –el ex gobernador asesinado por su esposa- y lamentan estar conducidos por el tibio Pichetto, que sin la alianza con Soria tiene serios riesgos de perder la gobernación.
 
 
 

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