VOTO A VOTO EN EL LITORAL

Preparando el debate con Del Sel, Lisfchitz se declara más plural

Final del escrutinio en Santa Fe: el PRO puede seguir argumentando que le ganó a los 2 precandidatos juntos del oficialista Frente Progresista. Sin embargo, Miguel Lifschitz puede exhibir un acortamiento de distancia: la diferencia que le sacó Miguel Del Sel se redujo de algo más de 5.000 a 3.393 votos, y bien puede considerarse un empate técnico, tal como ha repetido el ministro Rubén Galassi. El FpV Omar Perotti, en tanto, también aumentó en relación al conteo provisorio, ubicándose por encima del piso que el PJ viene registrando en la provincia, colmando su aspiración de mínima para dar batalla en la final. En ese contexto, interesante considerar lo que tiene para decir el candidato Lifschitz, entrevistado por Raúl Acosta, por LT8:

-Ingeniero, tengo varias preguntas. La primera: su mirada sobre esto, que es el escrutinio definitivo. Acá ya no hay ninguna presunción, lo que está es lo que es.
 
-Sí, totalmente. Los datos que surgen del escrutinio definitivo han sido avalados por todos los apoderados de todos los partidos, se han revisado mesa por mesa, urna por urna, todo avalado por el presidente de la Corte, el doctor Falistocco, que ha sido el responsable del escrutinio. Así que no hay ninguna duda, ningún cuestionamiento al resultado final. Que, por otra parte, es similar, apenas pequeñas diferencias, respecto del provisorio, lo cual está demostrando que tanto el primero como este último se han hecho con absoluta corrección y transparencia.
 
-¿Le merece alguna reflexión la serie de adjetivaciones que hubo sobre el escrutinio provisorio y antes de que apareciesen las cifras de este, el definitivo?
 
-Obviamente hubo un error técnico o en la manera de plantear la información inicial. Esto fue reconocido y motivo, incluso, la renuncia de un funcionario. Ahora, de allí a suponer o intentar un fraude hay una distancia enorme. Y creo que ha quedado demostrado que siempre el gobierno del Frente progresista ha actuado con transparencia, también en esta oportunidad. Y ahora me parece que empieza otra carrera, otra etapa en la cual cada candidato y cada fuerza tendrá que mostrar, realmente, sus ideas, sus propuestas, sus proyectos para el futuro de Santa Fe, porque ahora ya no estamos en una interna de los partidos o los frentes sino que ya estamos eligiendo a quien va a conducir el barco en el que estamos todos por los próximos cuatro años. Y esto me parece que ya es importante. Y yo estoy seguro que los santafesinos vana meditar mucho esta decisión y lo van a hacer con el corazón y con la cabeza, con los sentimientos, con las cosas que cada uno percibe a través de su mirada, de su visión, de sus sensaciones, pero también pensando muy bien porque está en juego el futuro de nuestros hijos en la escuela pública, el futuro de los hospitales, de los trabajadores públicos, de los docentes, de la policía, de la justicia, de la seguridad. Todo esto está en juego, y yo digo siempre que un gobierno puede hacer las cosas un poco mejor o tal vez le falte un poquito, pero los malos gobiernos no solamente hay que aguantarlos cuatro años sino que después las consecuencias las pagamos durante mucho tiempo. Entonces apelamos a la sensibilidad, al corazón y también a la inteligencia de todos los santafesinos.
 
-Ingeniero, sobre esto tengo información que me parece que es real, aun cuando no es oficial. Hay una diferencia mínima entre el PRO y el Frente Progresista Cívico y Social, lo cual lo pone a esto en algo que usted ya había dicho una vez, una especie de opción A y opción B, muy polarizado todo. ¿Lo está viendo así ahora?
 
-Sí, totalmente. La elección lo ha demostrado. Fue lo mismo que ocurrió en el 2011. Usted recuerda que en aquella oportunidad hubo una elección que terminó definiéndose por tres puntos a favor de Antonio Bonfatti. O sea que el escenario no ha cambiado demasiado. Me parece sí que hoy hay un reconocimiento importante a la tarea del gobierno, del gobernador, en toda la provincia, en el interior, en el norte santafesino. Hemos hecho una elección mucho más pareja que en años anteriores, mucho más repartida en toda la provincia de Santa Fe. Y por eso tenemos expectativas en que no solamente vamos a crecer en cantidad de votos en toda la provincia, sino que también vamos a recuperar muchos votos de la ciudad de Rosario. Yo creo que el rosarino quiere más, quiere un mejor gobierno, quiere que se resuelvan temas como la inseguridad. Y yo estoy preparado para resolver el tema de la inseguridad, para terminar con la impunidad, para afrontar el tema que más preocupa, que más angustia, que más siente cada rosarino y cada rosarina. Muchos porque han sido víctimas de hechos de violencia e inseguridad, y yo eso lo siento como si me hubieran ocurrido a mí, porque además tengo amigos íntimos a los cuales les han ocurrido hechos muy graves. Pero también sé que esas cosas tienen solución y salida. Y yo he recorrido muchas ciudades del mundo que han tenido éxito en la lucha contra la violencia y he visto estas experiencias. Y creo que lo podemos hacer en Rosario y lo podemos hacer en Santa Fe. Y yo estoy dispuesto a ponerle el cuerpo y a ponerle toda mi experiencia y la fuerza que le puse a la gestión de Rosario para resolver este problema ahora en toda la provincia.
 
-Hay una apuesta que están haciendo ustedes, que es colocar el 3er. gobernador socialista. Cuando recorre la provincia ante esta pregunta que le hago, ¿están viendo el 3er. gobernador socialista? ¿Cómo es su diálogo con, precisamente, presidentes comunales, intendentes, con todo un territorio que es mucho más vasto que la región Rosario, donde usted va y viene como si fuera su casa?
 
-Yo creo que hay en general un apoyo al Frente Progresista. Si bien los gobernadores han sido socialistas, pero también es cierto que este gobierno ha sido cada vez más frentista. Y el próximo va a ser todavía más plural. Yo tengo el objetivo de formar un equipo de gobierno con mucha gente nueva, con gente joven, con gente independiente, y por supuesto con referentes importantes de los partidos del Frente. Y tenemos que darle un cariz mucho más plural a nuestro gobierno. Yo sé que alguna crítica de alguna gente dice que el Socialismo es cerrado. Yo creo que, de a poco, hemos ido abriéndonos y vamos a abrirnos más en la próxima gestión, porque los rosarinos saben que yo siempre he buscado el apoyo de la gente independiente, de los que más saben en cada tema, que siempre he sido una persona de diálogo, y lo vamos a ser en el próximo gobierno. Por eso estoy convencido que más allá del descontento general que existe en la sociedad, de la preocupación de la gente por los problemas económicos, por la inseguridad, porque la verdad que la política muchas veces no se ha prestigiado en conjunto, pero finalmente me parece que hay que buscar alternativas y yo me propongo buscar una alternativa, una salida, porque tenemos que salir para adelante, no podemos salir para atrás, no podemos echar por la borda las cosas buenas que se han hecho, tenemos que ir para adelante y buscar soluciones, y hacerlo en conjunto, entre todos, porque esto no lo va a resolver una sola persona.
 
-Están quedando 6 sábados libres antes de las próximas elecciones. Dijo usted una frase que yo marqué: “el rosarino quiere más”. Tengo para mí que en donde usted debe pasearse, y donde me parece que se está paseando, es en el sur de la provincia. ¿Hay allí posibilidades ciertas de recuperar muchos votos ?
 
-Sí, claro que sí. Yo estoy convencido. El rosarino me conoce y sabe todo lo que yo puse cuando fui intendente. Fueron 8 años intensos, de obras, de proyectos, de parques, de avenidas, de obras de infraestructura, de cultura, de desarrollo económico. La ciudad se dio vuelta.  Fue la ciudad de Rosario de la que todos nos sentíamos orgullosos, de la que todo el mundo hablaba en Argentina y decía qué linda Rosario, qué bien que está Rosario. Eso no pasó hace 50 años, eso pasó hace tres o cuatro años. yo sé que ahora ha habido otros problemas, como una tormenta que oscurece el cielo, pero esa ciudad sigue estando allí, tenemos que recuperarla, ponerla nuevamente en valor, y yo sé cómo hacerlo y lo vamos a hacer, vamos a impulsar nuevos proyectos, nuevas obras, y vamos a afrontar el tema de la violencia y la impunidad. Porque yo estoy convencido que tenemos que terminar con la impunidad, en lo grande y en lo pequeño, en la corrupción de la policía pero también en el inspector de tránsito o el funcionario corrupto, o también en la sociedad civil que muchas veces tolera la corrupción.
 
-Ingeniero, esta es una pregunta no con trampa pero sí con anhelo. A mí me gustaría mucho que haya debate entre los dos posibles gobernadores. ¿Usted se anima a debatir con Torres del Sel?
 
-Sí, claro. Y también, por supuesto, con el resto de los candidatos. Yo creo que es importante que haya debates, que cada uno pueda poner claramente sus posiciones, sus posturas. Incluso más, hasta sería interesante que hubiera debate entre los equipos. Porque yo escucho hablar mucho: “que tengo equipo, tengo equipo”, todos tienen equipo. Sería interesante que hubiera algún debate entre los referentes, por ejemplo, en Educación, en Salud Pública, en Economía, en Seguridad, de cada fuerza. Pero desde luego el debate entre los candidatos es muy importante. Yo sé que ya hay varios medios de comunicación que lo están organizando, así que realmente espero que podamos tener buenos debates y que eso ayude a que le santafesino, el rosarino, tome la mejor de las decisiones el próximo 14 de junio.
 
-La próxima pregunta es referida al plano nacional y la provincia de Santa Fe. La provincia, en el caso lde que usted triunfe, va a quedar plantado de un modo, que es el modo en que está ahora, para con un gobierno nacional peronista o un posible gobierno de un partido popular, el PRO es eso, y la volvería a plantar como una bandera diferente a la de la provincia de Santa Fe. ¿Advierte eso usted?
 
-A nosotros, en general, no nos ha ido mal con gobiernos de otro color político, salvo en estos últimos tiempos, donde no solamente a nosotros nos ha ido mal sino a buena parte de la sociedad argentina en esa relación con el gobierno nacional. Pero fuera de eso, yo fui intendente de Rosario con Néstor Kirchner como Presidente y con Jorge Obeid como gobernador y la verdad que tuvimos una excelente relación y pudimos concretar muchas cosas en la ciudad. Yo creo que esto tiene que ver con que haya funcionarios o presidentes, o gobernadores, que tengan vocación de diálogo, tengan inteligencia para buscar acuerdos y para resolver los problemas. Yo por mi parte, en eso, no tengo ningún prurito, ningún problema. Con el que sea presidente vamos a establecer la mejor relación posible. Además, a todos los conozco de la historia política de todos estos años, así que a cualquiera que pueda ser presidente vamos a poder, con ellos, establecer una muy buena relación de trabajo.
 
-La pregunta que le hago ahora es medio loca, pero me parece necesaria. Desde que se estableció la democracia en 1983 la ciudad de Rosario estuvo blindada. Primero por el radicalismo ante una provincia que era absolutamente peronista con (José María) Vernet, y después súper peronista con (Carlos) Menem, la Nación y la provincia, y la ciudad siguió blindada, porque (Horacio) Usandizaga pasó a (Héctor) Cavallero, a (Hermes) Binner, a Lifschitz, al Socialismo. Ahora, lo que advierto, es que no está usted, está la señora Mónica Fein, pero los votos indican que ya no está blindada la ciudad. El Pro puede ser gobierno solo con mantener resultados individuales.
 
-Bueno, creo que hay una mayor diversidad de expresiones políticas que no existían antes en la ciudad. Se ha abierto un poco el escenario y hay distintas preferencias. De todas formas, el Frente Progresista en Rosario claramente se ubicó en primer lugar, con dos opciones, la de Mónica y la de Pablo Javkin. Creo que son dos opciones personales, pero dentro de un mismo proyecto, de una misma idea de ciudad y de gestión, y no tengo ninguna duda que esa expresión del Frente Progresista, unificada ahora después de las internas, también va a seguir siendo gobierno en la ciudad de Rosario. No para hacer lo mismo, sino para buscar justamente la renovación. Yo he hablado mucho con Pablo Javkin en estos días, yo sé que Mónica ha estado conversando con María Eugenia Schmuck, con todos los referentes del frente que han tenido y demostrado su peso electoral en esta elección. Y creo que hay que replantear una gestión a futuro, que también, como le decía a nivel provincial, tiene que ser mucho más plural, tenemos que incorporar nuevas referencias, incluso del mundo académico, de la sociedad civil, necesitamos fortalecer y refrescar un poco nuestro proyecto para los próximos años. pero yo estoy seguro que sigue siendo el proyecto más seguro para Santa Fe, más confiable, el que garantiza continuidad de todo lo bueno que se sigue haciendo en la ciudad, que no ha desaparecido porque son muchísimas cosas, porque yo cuando veo la salud pública en Rosario, que sigue siendo la mejor de Argentina a pesar del paso de los años, o veo las políticas sociales o el plan Abre, o veo el funcionamiento de la ciudad y los parques y la cultura, yo digo que todo eso es un enorme valor, y así como hoy se sostiene y se sigue alimentando, también se puede destruir rápidamente, y hay que apostar a consolidar los bueno y a avanzar hacia adelante con humildad, con escucha, con diálogo  pero también capitalizando la experiencia para poder hacer un mejor gobierno.
 
-¿Usted cree que de verdad habrá debate entre usted y Miguel Del Sel?
 
-Yo creo que sí. Creo que hay varios medios que lo están organizando y no creo que haya ninguna reticencia a participar. Además, por nuestra parte, lo vamos a hacer con la mejor de las intenciones, tratando de dejar claro nuestra idea, nuestra propuesta, nuestra mirada sobre la realidad, nuestros proyectos más concretos. En eso yo tengo una gran experiencia. Hace muchos años que estoy en esto. He dedicado mi vida a la gestión pública, he recorrido la ciudad de Rosario quizás como nadie, y la sigo recorriendo, y conozco sus problemas y su gente, y las necesidades, las expectativas, y la bronca de muchos que están esperando soluciones que no han llegado todavía. Bueno, con eso vamos a tratar de hacer la mejor propuesta, que no son ideas locas ni que se nos ocurren a nosotros, sino que son esas cosas que van surgiendo de ese contacto directo que tengo con la gente. De ahí sale la fuerza y salen las ideas, y sale la convicción de que podemos resolver los problemas y salir adelante. 

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