ESCÁNDALO EN LA FIFA

USA espera que en la investigación aparezcan denuncias contra Blatter

Son 2 investigaciones diferentes: una, en Suiza y que inició la propia FIFA, por las elecciones de Catar y Rusia como sedes de los próximos Mundiales de fútbol (fueron denuncias con las que Joseph Blatter se quitó de encima a competidores domésticos); la otra, en USA, es por lavado de dinero y sobornos pagados en bancos estadounidenses, y en esa investigación se cree que el nombre de Blatter puede aparecer en breve.

 
"(...) El Sr. Blatter ha esquivado escándalos casi desde el momento en que fue elegido presidente del órgano de gobierno mundial de fútbol en 1998 -ya en su campaña de ese año fue acusado de sobornar a los delegados africanos para asegurar su victoria. Pero él negó estar involucrado en las acusaciones.
 
El Departamento de Justicia espera que algunos de los ejecutivos de la FIFA imputados en la acusación implicará al Sr. Blatter en presuntos delitos, tal como los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley a menudo escalan entre los anillos del crimen organizado. También es posible que las detenciones fueran cronometrados, en parte, para crear presión sobre el Sr. Blatter a los efectos de que él, voluntariamente, se retire de las elecciones del viernes 29/05 a la Presidencia, cuando espera que ganar un 5to. mandato. (...)".
 
Esto quiere decir que el tema Blatter no está concluído.
 
Es importante tener presente que se han abierto 2 causas, que no están relacionadas entre sí. 
 
Todas las informaciones que han surgido sobre el proceso penal que se ha abierto en Suiza por la elección de la sede de los Mundiales de 2018 y de 2022, no tiene nada que ver con la trama iniciada en USA. 
 
Es más, la de Suiza, en la que se investigan los votos que le permitieron a Rusia y Catar ser sedes de los próximos mundiales, nació de la propia FIFA, que entiende que existen sospechas de irregularidades. Por ello, el organismo del fútbol mundial presentó una demanda penal contra desconocidos, en el marco del intento de Blatter de quitarse de encima competidores para la elección de autoridades en curso.
 
En la investigación abierta por USA, hay una organización delictiva que funciona dentro de la FIFA desde hace más de 20 años. Desde entonces, recuerdan los memoriosos, varios escándalos se han conocido. Los más recientes fueron la supuesta elección paga del Mundial de Catar 2022, el sospechoso cierre de la investigación de ese evento en el marco del 'Informe García' y los supuestos pagos del exdirectivo de la FIFA, Mohammed Bin Hamman, a presidentes de 30 asociaciones africanas para que votaran según sus instrucciones.
 
De acuerdo a la investigación de la Fiscalía estadounidense, la FIFA ha venido efectuando desde principios de los años '90, de manera sistemática y reiterada, pagos de comisiones a los representantes de medios de comunicación y de firmas de promoción de eventos deportivos como parte de 'acuerdos' que permitían conceder ventajas a la hora de conseguir derechos de retransmisión y de publicidad en torneos.
 
Además de los altos directivos de la FIFA, se encuentran implicados los responsables de empresas relacionadas con el marketing deportivo y los derechos televisivos. En esta cuestión aparecen Alejandro Burzaco, de la argentina Torneos y Competencias; Aaron Davidson, de Traffic Sports USA; y Hugo y Mariano Jinkis, de Full Play Group, de Argentina.
 
Al tratarse de un caso que llevaría produciéndose de manera sistemática desde hace mucho tiempo, la Justicia estadounidense estima que el importante total de los sobornos que han tenido lugar en esta década estarían por encima de los US$150 millones. Se trataría de un caso de corrupción "profundamente enraizada", en palabras de la fiscal general Loretta Lynch, quien considera que existía una trama impuesta a lo largo de los años para conseguir perpetuar el abuso de poder de algunos mandatarios, que conseguían sobresueldos a base de mordidas y sobornos.
 
El 'Informe García'
 
En los pasillos del centro de convenciones, en Zurich, se habla de la venganza de Michael Garcia, el ex presidente del Comité Ético de la FIFA, cuyo informe de 350 páginas, 75 testigos y 200.000 documentos sobre los Mundiales de 2018 y 2022 nunca fue hecho público.
 
Pero antes hay que recordar otro dato. Chuck Blazer es el nombre propio de esta investigación por parte de Estados Unidos. Él fue secretario general de la CONCACAF (Confederación de Fútbol de Norte, Centroamérica y el Caribe) y también miembro del comité ejecutivo de la FIFA hasta mayo de 2013, cuando fue suspendido durante 90 días por la organización por haber recibido de forma fraudulenta más de US$20 millones de la CONCACAF. En noviembre 2014 se supo que Blazer trabajaba en una investigación estadounidense del FBI contra la FIFA y ha estado grabando a miembros del comité en secreto.
 
Acerca de Michael Garcia, él es quien pasó 1 año elaborando el mencionado informe sobre Catar y Rusia, pero dejó su cargo en diciembre 2014 y volvió a su casa en Nueva York, junto a su mujer, una agente del FBI. No es un dato menor: Michael Garcia está casado con una agente del FBI, cuyo director, James Comey, fue quien detalló, junto a la fiscal general de USA, Loretta Lynch, los 47 cargos que el Departamento de Justicia tiene contra 9 directivos de la FIFA -entre ellos, los detenidos en Zúrich- y 5 empresarios deportivos.
 
Cuando renunció, Michael J. García acusó a la FIFA de realizar una investigación muy tibia sobre la polémica definición de las candidaturas de Rusia y Qatar para organizar los Mundiales de fútbol de 2018 y 2022También de falta de transparencia, ética y liderazgo. Fueron procesos empañados por los sobornos y la compra de votos de forma descarada. En diciembre de 2012, dimitió Mohammed Hammam, expresidente de la Confederación Asiática de la FIFA, por pagar US$4 millones a representantes del fútbol africano por asegurar las designaciones de Rusia y Qatar. 
 
Es un golpe colosal al prestigio de la FIFA, que se ve envuelta en un escándalo masivo de sobornos, blanqueo de dinero y corrupción. Pero la presión no es por ahora tan grande como para que su presidente desde 1998, el suizo Joseph Blatter, se replantee abandonar su intento de renovar su  5to. mandato consecutivo. A los 79 años, su único rival, el príncipe jordano Ali bin al Husein, dificilmente podría tener alguna posibilidad de superar la 1ra. ronda de votaciones. Los otros 2 candidatos ya se retiraron: el exjugador Luis Figo y el holandés Michael van Praag, quienes cedieron sus votos a Al Husein, mientras que la UEFA (Unión Europea de Fútbol Asociado) pidió a última hora del miércoles posponer la votación.
 
“Por supuesto que Blatter no está bailando en su despacho, pero este proceso es bueno para la FIFA. No beneficia a nuestra reputación, pero confirma que estamos en el camino correcto”, aseguró en una rueda de prensa improvisada el vocero de la FIFA, Walter de Gregorio
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Entre los detenidos en Zúrich se encuentran colaboradores tan cercanos de Blatter como el vicepresidente Jeffrey Webb. También está otro vicepresidente, Eugenio Figueredo. Solo uno de ellos ha aceptado un acuerdo de extradición inmediata a USA. Para los otros 6, las autoridades estadounidenses disponen ahora de un periodo de 40 días para solicitar un procedimiento formal de extradición. En total, la Justicia estadounidense ha presentado cargos contra 14 altos directivos de la FIFA.
 
Interesante un fragmento del texto de John Carlin, quien mucho investigó la FIFA en ocasión del Mundial Sudáfrica 2010. Ahora, él entrevistó a Harold Mayne-Nicholls, quien fue el jefe del equipo de inspectores de la FIFA para las sedes candidatas a los Mundiales de 2018 y 2022, cuyos polémicos ganadores, elegidos por voto secreto en contra de las recomendaciones de los propios inspectores, fueron Rusia y Qatar:
  
"(...) “Si sigue Blatter vendrán años terribles para la FIFA”, dijo Mayne-Nicholls, que trabajó para el organismo desde 1993 hasta su dimisión en 2012. Entrevistado el miércoles Mayne-Nicholls, quien también fue presidente de la Federación de Fútbol de Chile, agregó que Blatter debería irse “por el bien del fútbol”.
 
¿Habrás más detenciones? “Creo que sí. La forma en que la policía suiza detuvo a los 7 en el medio de la noche demuestra que no van a dejar pasar ni una”. ¿Ni Blatter estará a salvo? “Ya es rico y eso me hace dudar. Su sueldo no se ha hecho público, pero en la FIFA se ha hablado de que como presidente gana unos US$2 millones al mes”.
 
Sea culpable de corrupción o no, o de permitir que otros lo fueran, Blatter no puede seguir en su cargo. “El daño que se ha hecho a la FIFA durante sus 17 años de presidencia ha sido demasiado grande”, según Mayne-Nicholls. “Lo que tiene que ocurrir ahora es no solo que dimita él sino que se hagan cambios profundos a la constitución de la FIFA a favor de la transparencia, que hoy es inexistente”.
 
En cuanto a la posibilidad de que se anulen las decisiones de celebrar los Mundiales de 2018 y 2022 en Rusia y Qatar, Mayne Nicholls dice: “Pero si las investigaciones demuestran que aquí hubieron hechos claros de corrupción, no le quedará otra a la FIFA que buscar nuevas sedes”. (...)".
 
Blatter, siempre Blatter
 
 
"(...) No es casualidad que el dueño del fútbol mundial, la FIFA, tenga su sede en la cuarta ciudad más cara del mundo, un lugar donde un café son 4 euros y un bocadillo vegetal, 15. Un trocito de tierra en el que el 25% de sus habitantes trabajan en bancos o fondos de inversión, un sitio con hoteles como el Baur au Lac, 'el number one', dice Sebastien, el taxista, en un afanoso inglés, un edificio del siglo pasado en la orilla norte del lago donde se puede dormir a partir de 1.200 euros. Inaccesible, por supuesto.
 
Inaccesible para los medios e inaccesible, acaso más, para los 7 miembros de la FIFA que ayer por la mañana fueron sacados de sus habitaciones -algunos estaban todavía en pijama- por agentes de la Policía Cantonal de Zúrich. Los agentes cumplían órdenes de la Fiscalía de EEUU, cuya investigación, iniciada hace años, tuvo sus primeros frutos. Las detenciones, que pusieron patas arriba al fútbol mundial, se produjeron apenas 24 horas antes de que comience, hoy, el 65 Congreso de la FIFA, donde Joseph Blatter, si un nuevo escándalo no lo impide, será reelegido presidente por quinta vez.
 
Nada se lo impedirá. Ni siquiera la petición de la UEFA ayer. Michel Platini, contrario a Blatter, reunió de urgencia a su Comité Ejecutivo en Varsovia -donde asistieron a la final de la Europa League- y de esa reunión salió la petición de aplazar seis meses la votación para la elección de presidente, e incluso algunas fuentes insinuaban la posibilidad de boicotear el sufragio. La FIFA, como siempre, no se dio por enterada. Lo único que hizo durante el día -lleno de intrigas, rumores, insinuaciones...- fue, mediante su director de comunicación, decir que colaborarían con las autoridades y que era un día «triste» para el fútbol. (...)".
 
Jérome Champagne, uno de los principales rivales y críticos de Blatter, cree que la corrupción comenzó allá por 1996, 2 años antes de la llegada de Blatter a la conducción del organismo deportivo (aunque él ya había sido director de Nuevos Negocios, y luego secretario ejecutivo de la FIFA), cuando aumentaron de forma considerable los presupuestos de los derechos de televisión, razón por la cual la FIFA cedió la explotación de estos activos a la compañía de marketing ISL, creada por el ya fallecido Horst Dassler, fundador de Adidas
 
El brasilero Joao Havelange incorporó a Blatter a la FIFA porque precisaba de un especialista en cuestiones de marketing deportivo. 
 
ISL creó una ingente red de tráfico de influencias alimentada por una política de sobornos sistemática. Fue la BBC, a través de uno de sus brillantes periodistas, Andrew Jennings, quien destapó el escándalo en 2006. 
 
Consecuencia de aquel trabajo periodístico, dimitieron 3 miembros del Comité Ejecutivo, los 3 sudamericanos: Joao Havelange (ex presidente), su ex yerno Ricardo Teixeira y Nicolás Leoz
 
Pero ISL quebró y durante todo el proceso de liquidación emergieron todo tipo de datos sobre sobornos y 'mordidas' a cuenta de los contratos televisivos. Durante la investigación, Blatter fue absuelto, pero abundaron las dudas sobre si el máximo dirigente del organismo era conocedor de esos pagos. 
 
Entre tanto, Blatter ya había recibido otras acusaciones graves. En el año 2002, Michel Zen-Ruffinen, por entonces secretario general de la FIFA, acusó a Blatter de malas prácticas financieras y llegó a escribir que dirigía la FIFA “como un dictador”. Blatter siempre desecho estas acusaciones y jamás admitió la comisión de ningún delito. 
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En 2004, la justicia estadounidense tomó cartas en otra querella mercantil significativa. Un juez de la Corte Federal de Nueva York sentenció que la FIFA había quebrantado la ley al incumplir el contrato de sponsor con MasterCard en favor de su rival Visa. La sentencia criticaba con dureza las tácticas y la naturaleza de los negocios de la organización deportiva. Finalmente, MasterCard y FIFA alcanzaron un acuerdo de resarcimiento por US$90 millones. 
 
El hombre de Paraguay
 
Un extenso documento de 162 páginas dado a conocer por el Departamento de Justicia revela las causas de las imputaciones. Es interesante, entre todos los acusados, el de Nicolás Leoz.
 
El expresidente de la Conmebol, fue imputado por el Distrito Este de la Fiscalía de Nueva York por lavado de dinero, fraude y obstrucción de la justicia. Se expone a 20 años de prisión.
 
De acuerdo a este documento, Nicolás Leoz pidió coimas por los derechos de televisación en cada Copa América desde 1993 hasta la última, el 2011. La empresa afectada fue la brasileña Traffic, cuyos directivos fueron quienes realizaron la denuncia en USA.
 
“(Nicolás) Leoz usaba su poder e influencia para enriquecerse de manera ilegal”, afirma parte del texto.
 
“Durante la presidencia de Nicolás Leoz (1986-2013) la Conmebol desarrolló una lucrativa relación comercial con Traffic (…). Desde principios de los años '90, los directivos de Conmebol, incluido Nicolás Leoz, empezaron a solicitar coimas a cambio de tomar varias medidas, incluida la renovación de los contratos (televisivos) por la Copa América”, agrega otra parte del texto.
 
La Justicia estadounidense realizó la investigación porque estos pagos se realizaban a través de un banco, el Delta National Bank, del estado de Florida. La Conmebol recibía el dinero a través del Banco do Brasil, en Asunción del Paraguay. La acusación detalla cada una de las transferencias que se recibieron en Asunción.
 
De acuerdo al documento de acusación y al testimonio de los denunciantes de la empresa Traffic, Leoz se negaba a firmar los contratos sin antes recibir un pago, porque decía que “él tenía que tener alguna ganancia en la transacción”.
 
Específicamente, la denuncia se centra en las Copas América de 1993 (Ecuador), 1995 (Uruguay) y 1997 (Bolivia), en donde Traffic acordó pagar US$ 2,2 millones por cada Copa América, por los derechos de televisación. Leoz incluso habría pedido más dinero como soborno cuando se incluyó a México y USA como participantes.
 
“Nicolás Leoz solicitó y recibió sobornos de Traffic en conexión con cada Copa América desde esa fecha hasta el 2011. Los pagos fueron incrementándose a través del tiempo, hasta el punto de alcanzar los 7 dígitos en dólares”, afirma el texto.
 
Lo que viene
 
Al negarse a la extradición simple, el costarricense Eduardo Li podría permanecer en Suiza un mínimo de 45 días y un máximo de 1 año, si fuese que el proceso se complica, explicó el abogado también costarricense Edwald Acuña.
 
El caso de Li es interesante porque es similar al que espera a los otros 5 que, al igual que él, se han negado a la extradición voluntaria a USA, lo que sólo aceptó 1.
 
De esta forma, Li afrontará la extradición por la vía ordinaria, la cual tiene varios pasos a cumplir.
 
Según Acuña, en primera instancia el gobierno de Estados Unidos tiene un plazo de entre 18 y 40 días para presentar todos los documentos legalizados que acrediten la existencia del proceso, indicar quién es la persona acusada, cuáles son las causas que se investigan y cumplir con que no se trate de delitos relacionados a la pena de muerte o que vayan a ser sancionados de manera contraria a la Convención Europea de Derechos Humanos. Un requisito fundamental es que el delito del que se le acusa también esté tipificado en la legislación suiza.
 
Con esa solicitud, el Consejo Federal de Suiza examinará si se cumplen con los requisitos que ordena la extradición y después los acusados tienen 5 días para presentar una apelación ante el Tribunal Federal de Apelaciones, el cual examina y después confirma o revoca la extradición.
 
Cuando ya el acusado se encuentre en USA, será presentado ante la Corte Federal de Brooklyn, donde se lleva el caso, y se hace una 1ra. audiencia para fijar medidas cautelares.
 
"Al no ser personas estadounidenses lo esperable es que se vaya a fijar una prisión preventiva en la primera audiencia, mientras tarda el proceso", apuntó Acuña.
 
Después se hará una 2da. audiencia, donde la Fiscalia estadounidense expondrá las pruebas con las que se pretende ir a juicio y la defensa también dará a conocer las suyas.
 
Sin embargo, el involucrado puede buscar una salida alterna, o sea un acuerdo entre el Departamento de Justicia de Estados Unidos y los abogados defensores.
 
Esa "negociación" podría incluir aceptación de cargos, convertirse en testigo colaborador, o pagar multas, entre otros.
 
Esto es posible porque el estatuto RICO (Investigación y persecusión de delito de crimen organizado), marco legal de la acusación, es una ley particular que permite negociaciones.
 
De no darse un acuerdo, se pasará a juicio, donde se determinará si el acusado es o no culpable. 

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