MARTINIANO MOLINA

Mientras Cambiemos se relanza en San Telmo, explota en Quilmes

Una sorpresiva crisis política ocurrió en la Municipalidad de Quilmes, donde la UCR entró en "rebelión"; y en el Concejo Deliberante se rompió el bloque Cambiemos, con la salida de los ediles radicales. En el Ejecutivo, se marchó el secretario de Gobierno, Fernando Pérez, con un "pedido de licencia" pero según la web Infocielo "no piensa volver" y asumirá como diputado provincial, que el que estaba de licencia hasta ahora.

La elección de autoridades de la UCR, el domingo 23/10 tuvo como resultado la renuncia del secretario de Servicios Públicos, Oscar García, rival del espacio del secretario de Gobierno, Fernando Pérez.

En su lugar, asumió Sergio Chomyzsyn, quién fue el encargado de firmar el despido del subsecretario de Servicios Públicos, César Martucci, lo que desembocó en un escándalo de gritos y empujones dentro de la oficina municipal.

Resultado: no hay más Cambiemos en el municipio bonaerense Quilmes.

Antes de la ruptura ocurrió una sesión caliente del Concejo Deliberante, donde se envió a comisión el expediente que veta la ordenanza sobre la regulación para los Centros Culturales.

Ocurrieron fuertes cruces entre oficialistas y opositores, insultos y agresiones. Lo mismo ocurrió para la concesión de tenencia precaria del edificio al Centro Cultural Pampero (Vieytes y Otamendi, en Bernal) y con el pedido de clausura del emprendimiento deportivo de Esquel y Mitre en Ezpeleta.

Esta situación había provocado reacciones y se dijo que el secretario de Gobierno, Fernando Pérez, había presentado su renuncia tras, aparentemente, fuertes discusiones con otros funcionarios de alto rango, trascendiendo incluso que hasta con el propio intendente Martiniano Molina.

Más tarde, la versión sobre el alejamiento de Pérez del cargo fue desmentida, aunque sí se confirmó que funcionarios de la UCR se encontraban en "rebelión", para que el PRO no avanzara sobre cargos municipales en manos de radicales, entre ellos el del subsecretario de Servicios Públicos, César Martucci.

Tras renunciar, Pérez se dirigió al Concejo Deliberante y exigió a los radicales romper con el bloque.

El capítulo siguiente sucedió en el Concejo Deliberante de Quilmes: los ediles del PRO por un lado (Raquel Coldani, José María Salustio, Juan Bernasconi y Rocío Escobar), y los de la UCR por el otro (Christian Álvarez, Raquel Vallejos, Susana Maderal y el ganador de la interna de la UCR, Mariano Camaño).

Más tarde ingresó al despacho del presidente del Concejo Deliberante local, Juan Bernasconi, la nota en que la que Fernando Pérez presentó la conformación de un monobloque.

Entonces se habló de la renuncia del secretario de Cultura, Educación y Turismo, Ariel Domene, para volver a ocupar su cargo como concejal.

El bloque oficialista del Concejo Deliberante quedará integrado por 4 concejales: el presidente, Juan Bernasconi; José Salustio; Rocío Escobar y Raquel Coldani.

El bloque UCR quedará a cargo de Mariano Camaño, Raquel Vallejos (ex presidenta del bloque cambiemos); Susana Maderal y Christian Álvarez, en caso de que Domene decida continuar a cargo de la secretaría que ocupa.

Queda por conocer cómo jugará el bloque UCR en el Concejo: ¿oposición, en alianza con el Frente para la Victoria, u oficialismo? De concretarse la primera opción, el gobierno de Martiniano Molina sufrirá una erosión importante.

Si bien desde el propio radicalismo se encargaron de aclarar que no es una ruptura del frente electoral ni una pelea con Martiniano, la web Infocielo afirmó que todo comenzó en el entorno familiar del jefe comunal: el secretario general Tomás Esteban Molina, hermano de Martiniano; y la presidenta del bloque de Cambiemos en el Concejo Deliberante, Raquel Coldani, actual pareja del padre del intendente, son los referentes del radicalismo,.

Se dice que el hermano del alcalde macrista es quien “maneja” los acuerdos de gestión, instancia en la que la UCR salió desfavorecido, igual que en numerosos distritos bonaerenses.

Asimismo, la falta de experiencia legislativa de la presidenta de la bancada oficialista, Coldani, arrastró a Cambiemos a pagar el costo político por el veto a la ordenanza de centros culturales: la concejala se ausentó, en una clara maniobra para no perjudicarse con el resultado.

Ahora, con la ruptura del bloque Cambiemos y el alejamiento de Pérez, habrá que esperar para conocer cómo se resuelve la historia.

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