20/03

En tiempos oscuros, la Felicidad tiene al menos 1 día obligatorio

A partir de la Resolución 66/281, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 20/3 como el Día Internacional de la Felicidad, celebrado por 1ra vez en el 2013. La ONU busca reconocer la importancia de la felicidad y el bienestar como aspiraciones universales de los seres humanos, y la importancia de su inclusión en las políticas de gobierno.

A partir de la Resolución 66/281, el 28/6/2012 la Asamblea General de las Naciones Unidas decretó el 20/3 como el Día Internacional de la Felicidad. Fue celebrado por 1ra vez en 2013.

El objetivo de esta celebración es reconocer la importancia de la felicidad y el bienestar como aspiraciones universales de los seres humanos y la importancia de su inclusión en las políticas de gobierno.

La resolución invita a todos los Estados Miembros, a los organizaciones nacionales, regionales e internacionales, a la sociedad civil y a las personas a celebrar este día. Por este motivo, se busca promover actividades concretas, sobre todo, en el ámbito de la educación.

Este lunes 20/3 la ONU convoca a todas las personas a usar el hashtag #SmallSmurfsBigGoals para celebrarlo.

Este día es también una oportunidad para destacar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, un plan mundial de acción con 17 objetivos, aprobados por los 193 Estados Miembros de las Naciones Unidas.

La declaración del Día Internacional de la Felicidad fue gracias a una iniciativa del Reino de Bután que considera la Felicidad Nacional Bruta más importante que el Producto Bruto Interno (PBI). 

Jigme Singye Wangchuck, el 4to rey de Bután fue el creador, en 1972, del indicador de Felicidad Nacional Bruta (FNB). Con sólo 17 años, decidió que la filosofía de su gobierno se debía basar en hacer felices a sus súbditos.

El FNB es un indicador de nivel de vida que se utiliza internacionalmente como complemento al PBI. Se calcula midiendo 9 puntos: el bienestar psicológico, el uso del tiempo, la vitalidad de la comunidad, la cultura, la salud, la educación, la diversidad medioambiental, el nivel de vida y el Gobierno.

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La felicidad es una emoción que se produce en la persona cuando cree haber alcanzado una meta deseada.

Los especialistas definieron a la felicidad como una medida de bienestar subjetivo (autopercibido) que influye en las actitudes y el comportamiento de los individuos. Las personas que tienen un alto grado de felicidad muestran una actitud positiva y se sienten motivadas por conquistar nuevas metas.

En el marco de esta celebración, se publicó el Reporte Mundial de Felicidad 2017 patrocinado por la ONU. Argentina ocupa el puesto 24 en la larga lista de 155 países.

"Los aspectos humanos son los que importan. Si la riqueza hace más difícil tener relaciones frecuentes y de confianza con otras personas, ¿merece la pena?", preguntó John Helliwell, el principal autor del reporte y economista en la University of British Columbia de Canadá (en el 7mo puesto). "Lo material puede interponerse en el camino de lo humano".

Los 10 países más felices del mundo son:

1. Noruega
2. Dinamarca
3. Islandia
4. Suiza
5. Finlandia
6. Holanda
7. Canadá
8. Nueva Zelandia
9. Australia
10. Suecia

Y de los 50 países más felices del mundo, 13 están en América Central y Sudamérica:

12. Costa Rica
20. Chile
22. Brasil
24. Argentina
25. México
28. Uruguay
29. Guatemala
30. Panamá
36. Colombia
43. Nicaragua
44. Ecuador
45. El Salvador
50. Belice

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¿Cómo aumentar la felicidad?

-Cambiar la actitud: Una investigación de la Universidad de Harvard afirmó que las personas optimistas son 50% menos propensos a tener una enfermedad cardíaca, un ataque al corazón o un derrame cerebral.

En cambio, las personas pesimistas tienen niveles más bajos de felicidad en comparación con los optimistas y tienen 3 veces más probabilidades de desarrollar problemas de salud a medida que envejecen, según investigadores.

-Enfocarse en las experiencias: Según diversas investigaciones, las personas que se centran en las experiencias tienen mayores niveles de satisfacción que permanecen mucho tiempo después de que el momento ya pasó.

-Relajarse: Tener tiempo para poder relajarse, ser más flexible e improvisar.

-Perdonarse: Perdonar los errores pasados y quedarse con lo que a uno le sirve. Tomar la lección aprendida y avanzar. Dejar de pensar en porqué pasó y avanzar sabiendo para qué ocurrió.

-Trabajar menos: En Dinamarca, uno de los países más felices, hay un gran balance entre la vida personal y el trabajo, lo que aumenta sus niveles de felicidad. No trabajan de más y la semana de trabajo promedio en Dinamarca es de 33 horas: solo el 2% de los daneses trabaja más de 40 horas a la semana.

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