El kiwi, originario de China y después introducido en Nueva Zelanda, tiene grandes propiedades entre las que se destacan su poder contra el envejecimiento y su propiedad laxante. Recibió ese nombre por su parecido con el pájaro homónimo, muy popular en Oceanía.
GRANDES PROPIEDADES
Kiwi, la fruta laxante que combate el envejecimiento
El kiwi es una fruta con un gran poder laxante, recomendado a las personas que sufren de problemas intestinales y estreñimiento. Además, refuerza el sistema inmunológico, disminuye la hipertensión, y evita las alergias y resfriados. Un solo kiwi cubre las necesidades diarias de esta vitamina tanto para un adulto como para un niño.
Es muy recomendado a las personas que sufren de problemas intestinales y estreñimiento. Posee 2 gramos de fibra, sobre todo fibra insoluble, y ayuda aún más si se consume en el desayuno. Se puede comer con otras frutas, yogur o cereales a la mañana. Se trata de una fruta digestiva, que permite disgregar las proteínas de los alimentos, y evitar la indigestión, la gastritis y los gases.
La vitamina C y sus propiedades antioxidantes son uno de sus beneficios más destacados. El kiwi tiene 59 mg de vitamina C, más que los limones que tienen 53 mg o las naranjas que tienen 48mg. La cantidad de esta vitamina le otorga al kiwi un gran poder antioxidante. El kiwi refuerza el sistema inmunológico, disminuye la hipertensión, y evita las alergias y resfriados. Un solo kiwi cubre las necesidades diarias de esta vitamina tanto para un adulto como para un niño.
Además, gracias a su vitamina C es capaz de neutralizar los radicales libres. Esto le permite contrarrestar los daños corporales, sobre todo los vinculados con el envejecimiento. Al comer kiwi, se mantienen las células más jóvenes y se conserva la salud del cuerpo.
Pero éstos no son los únicos beneficios de la vitamina C. Ayuda a evitar los nervios, la ansiedad y el estrés. Por eso, es recomendable consumir kiwi para reducir la tensión.
Su gran contenido de potasio es bueno y necesario para la transmisión y generación del impulso nervioso, y para la actividad muscular normal. Además interviene en el equilibrio de agua dentro y fuera de la célula.
El kiwi permite bajar de peso y sentirse más saciado, gracias a su gran porcentaje de agua y un nivel calórico intermedio, ya que tiene 63 Kcal cada 100 gramos. También es una buena opción para las dietas y para perder agua, dado que no tiene demasiado sodio. Es un buen diurético y una alternativa para aquellos que sufren de obesidad o sobrepeso.
Esta fruta mejora el estado de las arterias por su vitamina E y ácidos grasos Omega 3 y 6, lo cual evita la formación de trombos o coágulos en los vasos sanguíneos. Es una fruta que puede proteger contra trombosis, angina de pecho, derrames cerebrales e infartos. La fibra del kiwi ayuda a disminuir los niveles de colesterol en sangre.
El kiwi ayuda a proteger el sistema inmunológico, gracias a su gran cantidad de ácido fólico, además de la vitamina C. Los 2 nutrientes permiten producir más glóbulos rojos y blancos, y anticuerpos, que son una barrera de las enfermedades producidas por virus. El kiwi previene de posibles infecciones como resfriados y gripes, y favorece la absorción del hierro, por su vitamina C.
Es una fruta rica en minerales como el potasio, el magnesio y el cobre. Un solo kiwi cubre el 10% de las necesidades diarias de magnesio, que se vincula con el funcionamiento de intestino, nervios y músculos.