Alternativa para Alemania (AfD) ha emergido del comicio como la única oposición real a los partidos líderes tradicionales y miembros de la Gran Coalición: Unión Cristiana Demócrata (CDU) + Unión Social Cristiana (CSU) y Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD).
MERKEL SIGUE SIENDO 1RA. MINISTRA
La ultraderecha llegó al Bundestang: 3ra. fuerza de Alemania
Los resultados de las elecciones federales en Alemania confirmaron que el partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) ingresa al Parlamento alemán, con un nada despreciable 12,8% de los votos: 8,1 puntos más que en los comicios de 2013, según los sondeos a pie de urna. El logro de la extrema derecha, que alcanza su objetivo para este comicio, supone una ruptura con el consenso político de más de 70 años que impedía el éxito de cualquier formación política que apelara a la identidad nacional y a la xenofobia para sumar en las urnas. Con la entrada del AfD en el hemiciclo alemán, ingresará la oratoria antiinmigración e islamofóbica sobre la que ha basado su campaña, un discurso que no se ha escuchado en la política alemana desde hace al menos 3 generaciones pero que hoy día está escuchándose en casi toda Europa.
Uno de sus líderes y candidatos, Alexander Gauland, advirtió a Ángela Merkel: “Este Gobierno que se abrigue, porque iremos por él. Recuperaremos nuestro país y nuestro pueblo, cambiaremos este país”.
La otra líder de la AfD, Alice Weidel, dijo: “Millones de votantes nos han confiado la tarea de una obra de oposición constructiva en el parlamento”. “Preocupaos de que desde la oposición en este país la ley y el orden vuelvan a tener una opción”,y anunció que lo primero que hará su partido es impulsar una comisión de investigación contra Merkel por su política de refugiados.
Alexander Gauland (nacido en 1941) y Alice Weidel (nacida en 1979) lideraron la lista de la AfD.
Gauland militó hasta 2013 en la CDU, pero la abandonó para fundar un partido euroescéptico. Del no a los rescates en la Unión Europea pasó al discurso xenófobo ante la crisis migratoria. Representa el ala tradicional nacionalista de AdF.
Weidel, economista y lesbiana, en pareja con una suiza originaria de Sri Lanka, quiere ser su contrapunto modernizador.
"Somos claramente la 3RA. fuerza política en el Bundestag”, se congratuló el copresidente de la AfD, Jörg Meuthen, quien agregó que su partido se encuentra “donde estaba antes la CDU” de la canciller Merkel.
Tal como anticiparon las elecciones regionales 2016 –en las que la AfD logró ingresar a 13 de 16 parlamentos– , los ultraderechistas subieron casi el mismo porcentaje que bajaron los conservadores de Merkel respecto a los últimos comicios federales: casi 8,5 puntos (1 millón de votos), lo que evidencia la migración del electorado de CDU/CSU hacia los populistas.
"Esperábamos un resultado mejor", reconoció Merkel, quien también recordó: "Somos el partido más fuerte y no puede haber coalición de Gobierno sin nosotros".
Las cifras económicas de Alemania son la envidia del resto del mundo. No solo por su fortaleza económica y por su situación, prácticamente de pleno empleo, sino también porque, mientras el resto de países europeos pelea con sus presupuestos, Alemania recibe críticas de organismos como el fondo Monetario Internacional por su elevado superávit, unas críticas que en Berlín son leídas más bien como una ratificación de alabanza a sus políticas económicas.
El nuevo gobierno, sin embargo, deberá leer más atentamente esos informes del FMI y comenzar un programa de inversiones públicas en infraestructuras, obsoletas en el ámbito del transporte y la circulación, de forma que no corresponden a un país puntero en desarrollo económico y tecnológico, y todavía por hacer en el ámbito digital.
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Bundeskanzlerin #Merkel zum Ergebnis der #Bundestagswahl17: "Wir wollen Wähler der AfD zurückgewinnen" pic.twitter.com/zTtxpmn5qk
— DW (Deutsch) (@dw_deutsch) 24 de septiembre de 2017
#Bundestagswahl17: Hier noch einmal aktuelle Zahlen. pic.twitter.com/4qe1sgGEHM
— DW (Deutsch) (@dw_deutsch) 24 de septiembre de 2017
Kommentar von DW-Chefredakteurin @inespohl zur #btw17: Deutschland will sich wieder streiten. https://t.co/6a65p4qPDb pic.twitter.com/KpJiFV7Fz5
— DW (Deutsch) (@dw_deutsch) 24 de septiembre de 2017
#Bundestagswahl17: In Berlin und anderen Städten kam es zu Protesten gegen das starke Abschneiden der AfD. pic.twitter.com/dyCr9ZmQqU
— DW (Deutsch) (@dw_deutsch) 24 de septiembre de 2017
AfD-Spitzenkandidatin @Alice_Weidel wirft Merkels Partei vor, "ihre eigenen Werte verraten zu haben." #DeutschlandWaehlt pic.twitter.com/VbFvQNWxOp
— DW (Deutsch) (@dw_deutsch) 24 de septiembre de 2017
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Merkel, más debilitada, lleva 12 años en el poder, gana las elecciones federales con un 33 % de los votos, según los resultados de las primeras proyecciones difundidos por la televisión pública ADF; mientras que los socialistas de Martin Schulz obtienen el 20,6 %, su peor resultado, y descartan una 4ta. alianza con la canciller, que buscará a los liberales, el peor escenario para la Unión Europea que quiere relanzarse.
Detrás de AfD, y en este orden, aparecerían los liberales del Partido Demócrata Libre (FDP), con un 10,6%; los izquierdistas poscomunistas de La Izquierda, con el 9,1%; yen último lugar, los ecologistas de Alianza 90/los Verdes, con un 8,9%.
El electorado alemán ha castigado la gestión de la Gran Coalición (formada por los socialistas y los democristianos) que ha liderado el país durante 3 mandatos seguidos. Merkel, aunque más debilitada y sin los socialistas.
La actual canciller alemana y candidata de los democristianos, que lleva doce años en el poder, gana las elecciones federales con un 33 % de los votos, según los resultados de las primeras proyecciones difundidos por la televisión pública ADF; mientras que los socialistas de Martin Schulz obtienen el 20,6 %, su peor resultado, y descartan una cuarta alianza con la canciller. Detrás de AfD, y en este orden, aparecerían los liberales del Partido Demócrata Libre (FDP), con un 10,6 %; los izquierdistas poscomunistas de La Izquierda, con el 9,1 %; y en último lugar, los ecologistas de Alianza 90/los Verdes, con un 8,9%.
El electorado alemán ha castigado la gestión de la Gran Coalición (formada por los socialistas y los democristianos) que ha liderado el país durante tres mandatos seguidos. Respecto a los comicios de 2013, los dos partidos principales registran pérdidas históricas.
La Unión Cristiana Demócrata (CDU) de Merkel, junto a su formación hermana de Baviera, la Unión Social Cristiana (CSU), pierden 8,5 puntos, mientras que el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) de Schulz bajó 5,1 puntos.
El líder del grupo parlamentario del SPD, Thomas Operan, ha declarado que el partido se irá a la oposición, lo que significa que la gran coalición no se reeditará. Esto fue confirmado después por el candidato del SPD, Martin Schulz, quien declaró ante sus seguidores que es una día "difícil y amargo" para la formación, que habría cosechado los peores resultados de su historia, y confirmó que el deseo de los socialdemócratas es ir a la oposición.
Esto significa que la canciller Merkel sólo podrá gobernar en mayoría si se alía con el FPD y Los Verdes, la llamada coalición Jamaica, que con 347 diputados conformaría mayoría absoluta en el Bundestag.
La empresa Infratet Dimap afirmó que la AfD agregó votantes, en 1er. lugar, de aquellos que antes se abstenían a acudir a las urnas, como forma de protesta o porapatía, que representan 1.280.000 votos; después, los 1.070.000 de votos que proceden de la Union de Merkel; y en tercer lugar 500.000 votos, migrados del SPD.
"Hemos recibido el encargo de los ciudadanos de crear un Gobierno", dijo Merkel ante los aplausos de sus seguidores. También ha prometido que escuchará las preocupaciones de los votantes de la AfD y que su entrada en el Parlamento "es un importante desafío".
De tener más de 2/3 de los votos en el pasado parlamento los dos grandes partidos han pasado a poco más de la mitad. Con lo que prosigue el fraccionamiento del parlamento que ahora pasa a tener dos partidos más con el regreso de los liberales del FDP con un sólido 10,6%, y la sorpresa mayúscula de la fuerza del AfD que supera también al izquierdismo de Die Linke (9%) y a los Verdes que, con un 8,9%, sacan un resultado mejor de lo esperado. Las negociaciones para el tripartido comenzarán pronto al no haber alternativa a esa coalición.
Los Verdes ya se han mostrado conscientes de las dificultades con una canciller que tendrá que defender posiciones conservadoras para combatir al AfD. Y especialmente en este próximo año para respetar los intereses de su socio bávaro, la CSU, que ha cedido aún más que la propia CDU al partido derechista. Y tiene elecciones del estado de Baviera en 2018.
A pesar de su prosperidad, Alemania ha visto en las últimas legislaturas cómo se abría una mayor brecha entre ricos y pobres, además de la gran disparidad de salarios entre hombres y mujeres en el mercado de trabajo. En plena crisis del euro no había tiempo para ocuparse de esto, pero en la próxima legislatura el gobierno deberá ponerse manos a la obra.
En uno de los países más prósperos de la Unión Europea, las mujeres ganan un 22% menos que los hombres, un porcentaje que es solo peor en República Checa y Estonia. Jutta Allmendinger, presidenta del Centro de Ciencia Social Berlín WZB, piensa que, a pesar de las cuotas para alcanzar la igualdad de género queda por hacer y que es hora de pasar a la accion. "Más mujeres en puestos altos tienen mucha influencia en otras mujeres, que intentan y se atreven a optar a los cargos medios y altos. Son modelos a seguir y eso es lo que necesitamos", asegura.