Otro logro de la Era K: un país dividido en dos, pero por su hora oficial

Por Claudio M. Chiaruttini (*) -La movida para poder crear Enarsa, es decir, dejar que se precipite la crisis energética, está teniendo efectos secundarios no esperados por el gobierno. Desde hoy, la Argentina tendrá una hora oficial y una o dos horas extra-oficiales. De esta forma, se tira por la borda una política, un esfuerzo de 120 años para lograr unificar la hora en todo el territorio nacional.

A la Historia Argentina no le faltan divisiones. Desde el nacimiento como Nación hemos estado enfrentados por los intereses de uno u otro grupo. Además de las diferencias políticas, no han faltado las económicas, las culturales, las religiosas, las deportivas. Desde hoy, el país va a comenzar a dividirse nuevamente, pero por una causa más vanal: la hora oficial.

La falta de una política de energía seria ha tenido consecuencias nunca esperadas por el equipo que acompaña a Néstor Kirchner y al propio presidente: por primera vez en 30 años, ocurrió por última vez en la década del ´70, la Argentina tendrá dos horas oficiales. Y, como suele ocurrir cuando falta el verdadero ejercicio del Poder, cada administración provincial ha decidido su cambio, casi a voluntad.

Antes del 25 de noviembre de 1894, la hora era difundida a través de medios locales. Por lo general, eran Iglesias u oficinas públicas (como el Banco Nación o las sedes municipales) que disponían de campanarios o relojes en sus frentes, con los problemas que debían enfrentar ante daños técnicos o retrasos momentáneos.

Con el tiempo, comenzaron a notarse algunas diferencias, en algunos casos de minutos, en otros de una o dos horas. En especial, estos problemas se acentuaban ante la llegada del invierno en el sur del país (se extiende la noche y se acorta en día) y en el centro-norte de la Argentina, donde las horas solares son mayores que las lunares.

Estas diferencias comenzaron a dañar los horarios de los ferrocarriles, por aquellos años, en su mayoría en manos inglesas. Eran maquinistas y guardas los que más notaban las diferencias horarias y debían ajustar los recorridos de los convoyes para que no llegaran con demasiadas diferencias horarias.

Ante la demanda de los ferrocarriles ingleses, el gobierno argentino resuelve aplicar el sistema de Hora Oficial tomando como eje el meridiano que pasaba por el Observatorio de Córdoba, ubicado 4 horas, 16 minutos y 48,2 segundo al Oeste del Meridiano de Greenwich, es decir, comenzamos con un pequeños desajuste con respecto a los husos horarios, pero no se notaba, dado que no existía un sistema mundial de hora oficial.

Recién en 1911, el foro científico mundial, decidió encarar la creación de una Oficina Internacional de Tiempo (Bureau International de l`Heure) que fue establecido en París (Francia) que tenía como objetivo unificar la medición de la hora a nivel mundial. Esa falta de medición coordinada de la hora permitió que Julio Verne escribiera "La Vuelta al Mundo en 80 Días" e hiciera notar la diferencia que existía en un recorrido contra los husos horarios.

La Argentina, recién el 1 de Mayo de 1920, se adhirió al Sistema Internacional de la Hora y resolvió ubicarse en el Huso Horario de las 4 horas, al Oeste del Meridiano de Greenwich. Sin embargo, habrá que esperar tres años, hasta el 12 de noviembre de 1923, para que un organismo oficial se hiciera cargo de mantener la Hora Oficial, ese rol se le destina al Observatorio Naval de la Armada Argentina.

Los sistemas de medición han cambiado con el tiempo, pero desde 1945, se dejó el sistema de definición astronómica de Tiempo, basada en la rotación de la tierra y para 1967 se fijó una definición física basada en la frecuencia de radiación del átomo de cesio, así el segundo es la duración de 9.192.631.770 períodos de la radiación correspondiente a la transición entre dos niveles hiperfinos del átomo de cesio 133.

A lo largo del tiempo, a través de Leyes o Decretos, el Huso Horario adoptado fue cambiado según las necesidades. Por Ley 25.155 de 1999 se estableció la utilización como referencia del Huso Horario de 4 horas al Oeste de Greenwich, pero con cambio hacia el Huso Horario 3 de Greenwich desde octubre hasta marzo del año siguiente. La decisión fue tomada luego de un largo estudio que llevaron a cabo las autoridades de la Secretaría de Energía.

Sin embargo, el lobby de las empresas del sector generación de electricidad, que por esos momentos veía bajar el costo del kilowatt/hora a su menor nivel en casi 50 años, forzaron la firma del Decreto 186 del 2000 (gobierno de Fernando de la Rúa) quedando en vigencia el Huso Horario 3 del Oeste de Greenwich.

De esta forma, para conformar a unas empresas, el gobierno adoptó un Huso Horario ficticio para la realidad geográfica de la Argentina y para sus antecedentes históricos. Por eso, las provincias coordilleranas se encuentran casi 2 horas separadas de lo que debería ser su Huso Horario natural.

¿Qué es lo que recomiendan los expertos? Los relacionados con el sector eléctrico sostienen la idea de mantener las horas actuales, los que se relacionan con la geografía piden volver al Huso Horario 4 del Oeste de Greenwich. Ambos coinciden que se podría adelantar una hora durante el verano, con el fin de aprovechar mejor los lapsos de luz solar y lunar. Sin embargo, como suele ocurrir con la Argentina, cada uno hará lo que quiera y tendremos, algunos prevén, hasta tres Husos Horarios, dado que algunas provincias podría adelantar o atrasar sus relojes 30 minutos. ¡Otro éxito de Mr. K.!
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(*) Claudio M. Chiaruttini es periodista, ex Director de la Agencia de Noticias Infosic y ex Secretario de Redacción del diaro BAE.

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