Coca-Cola gana una batalla legal contra segundas marcas

Coca-Cola ganó una disputa legal con la marca chilena Point Cola Club, a la que demandó por la similitud de su etiquetado. Un juez de la ciudad de Concepción, en Chile, ordenó la confiscación de la totalidad de la producción de Point Cola, tal como había solicitado la multinacional estadounidense en una querella por infracción de la ley de propiedad industrial.

"Nunca se había visto de manera tan grosera una imitación y tan flagrante contra la ley, por eso que aquí se tomaron medidas bastante drásticas", dijo el gerente corporativo de The Coca Cola Company en Chile, Eduardo Romo.

La bebida de cola Point, fabricada por la embotelladora Llacolén, apareció hace más de un año en el mercado local con una etiqueta blanca y roja, de características parecidas a la de la multinacional con sede en Atlanta.

Coca-Cola por su parte reclamó ante el departamento de propiedad industrial del Ministerio de Economía de ese país, ante un tribunal arbitral de marcas y ante la justicia ordinaria.

Las 2 1ras. instancias pidieron a Point que modificara su etiqueta, pero no lo hizo. Finalmente, el tribunal de Concepción ordenó retirar los productos locales de las estanterías y cerrar las plantas de Llacolén.

La firma afectada, que ha invertido US$ 10 millones en Chile y posee 3 plantas, advirtió que con esta acción legal "Coca-Cola está logrando de hecho una ventaja que en el mercado no ha podido conseguir", dijo su abogado, José Pablo Monsalve.

"Así por la fuerza y abusando del derecho se elimina a un legítimo competidor cuyo negocio se basa simplemente en entregar un producto de calidad a un precio mucho más conveniente", agregó.

La marca Point se hizo conocida en Chile después de que se adjudicara la publicidad en las camisetas de los equipos de fútbol Universidad de Chile y Universidad de Concepción.

Por su parte, Eduardo Romo, gerente de Asuntos Coorporativos de Coca-Cola para Chile dijo al diario El Mercurio que " (la acusación) reafirma lo que antes había decidido el Tribunal Arbitral de Marcas y el Departamento de Propiedad Industrial (DPI) del ministerio de Economía, que rechazaron la etiqueta de Point por inducir a confusión".

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