Kirchner: Entre el apocalipsis y la salvación

Pareciera ser una costumbre del presidente Néstor Kirchner la de criticar a los Gobiernos anteriores para justificar, en cierta forma, los errores que a diario comete con su "política". Al respecto, U24 reprodujo una nota publicada en la sección editorial del diario platense Hoy.

El presidente Néstor Kirchner aseguró que su gobierno está "abierto de par en par" para escuchar sugerencias de "todos", pero advirtió que "ningún sector tiene la verdad absoluta".

Cuando algunos dicen "todo esto no funciona, es porque no saben qué es lo que hay que hacer. No importa, tenemos la misma caridad cristiana con todos ellos", manifestó el primer mandatario.

Además, cuestionó a la oposición, al afirmar que algunos "todos los días anuncian el apocalipsis". Parte de razón tiene en observar cierta actitud destructiva en algunos referentes de la oposición.

Pero no es el punto central. Porque así como se ve el vaso medio vacío, también debería prestarse atención a la mitad llena.

Kirchner cuenta, aunque cada vez menos, con el apoyo mayoritario de la gente, con una CGT con la que se puede dialogar, y con referentes políticos lúcidos que pueden arrimarle alguna propuesta.

Es cierto que algunos se ocupan de señalar todo lo malo y preanunciar lo peor. Flaco favor le hacen al país. Pero no se debe subestimar el inmenso apoyo con el que cuenta, y que le da la fuerza suficiente como para encarar la transformación que hace falta.

No hay excusas para dejarse vencer por algunos que ponen piedras en el camino. En cambio, es de esperar que la convocatoria al diálogo persiga el interés de construir un frente común para combatir las presiones más espurias.

Pero tampoco es bueno anclarse en el paso y marcar una permanente división de aguas. La diferencia con el menemismo es necesaria para transmitir que debe hacerse lo contrario de lo realizado en los ’90. Pero no puede mirarse permanentemente para atrás.

Ahora resulta que Kirchner criticó a los dirigentes que acompañaron a Fernando De la Rúa en la Presidencia, cuando afirmó que "los mismos que se escaparon en helicóptero, nos vienen a decir qué hay que hacer". ¿Qué sentido tiene machacar contra los que participaron en un Gobierno que fracasó rotundamente?

La gente tiene plena conciencia de quién es quién, y pretende que este Presidente los saque adelante, antes que marcar errores del pasado.

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