Petrobras expansiva: Amplía su red de gas natural en Brasil

Luego de idas y vueltas, la petrolera estatal brasileña Petrobras confirmó que comenzará el mes próximo un gigantesco proyecto para expandir la red de transporte de gas natural. De acuerdo a informaciones de la agencia Reuters, "el gasoducto Campinas-Rio ya tiene la autorización y vamos a comenzarlo el próximo mes, así que debe estar listo en el 2006 o 2007", confirmó Richard Olm, gerente general para desarrollo de tecnología y negocios de gas natural.

El gasoducto, de 442 kilómetros tendrá un costo de US$ 285 millones, conectará Campinas, en el estado de Sao Paulo, con Río de Janeiro, y podrá transportar cerca de 9 millones de metros cúbicos de gas diarios.

El proyecto original debía estar finalizado para 2005, pero fue demorado por problemas en las licencias ambientales.

Rio-Campinas es la pieza central del plan de expansión de la red de gas en el sureste de Brasil, que forma parte de un Proyecto Redes mayor, de US$ 1.000 millones, que también ampliará la red del noreste.

De esta manera, Brasil espera duplicar al menos su consumo de gas desde 32 mcpd para el año 2010.

Los analistas y algunos ejecutivos de la industria dicen que la débil demanda doméstica de gas en Brasil no crecería tanto como espera el gobierno, especialmente sin un firme impulso para construir nuevas plantas de producción de electricidad con gas.

* Vaivenes -con Ecuador- por una reserva ecológica de la Amazonia

En tanto, el Ministerio de Medio Ambiente de Ecuador salió a garantizar las actividades de la empresa brasileña Petrobrás al señalar que éstas no causarán daños en la reserva ecológica de la Amazonia ecuatoriana.

Según el ministro de Medio Ambiente, Fabián Valdivieso, se han tomado "todas la precauciones posibles" para que la explotación en busca de crudo que realizará Petrobrás en al parque nacional de Yasuní "no afecte a la biodiversidad de la zona".

Tras otorgar el Gobierno la licencia para comenzar la explotación la semana pasada a Petrobrás, las organizaciones indígenas y ecologistas presentaron un recurso de amparo ante un Tribunal ecuatoriano, con el fin de evitar las operaciones dentro del parque, situado en la provincia de Orellana (en la frontera con Perú).

Este parque es la región protegida más grande de la Amazonia ecuatoriana, declarada reserva natural desde 1979 por la Unesco.

Su extensión alcanza el millón de hectáreas, de las cuales se utilizarán para las operaciones petrolíferas unas 100 hectáreas.

Ante esta medida de la ONG, la Administración ecuatoriana declaró que la actividad petrolera estaba "semiparalizada" en el país por los "reparos ambientales".

Por su parte el Ministerio de Medio Ambiente explicó en un comunicado que este tipo de actividades son necesarias para el desarrollo del país, que exporta al día 345.000 barriles de crudo.

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