Historia de dos Fernández

Durante la última reunión que celebró el PJ, bochornosa y en Parque Norte, hace ya demasiado tiempo, Cristina Elizabeth Fernández de Kirchner se quejó: "Confieso que yo estaba propuesta para un cargo en el Consejo, pero pienso que mi partido debe dejar de dar el lugar a las mujeres con portación de marido". Esto provocó un duro intercambio con Hilda Beatriz González de Duhalde. Las diferencias se han actualizado.

Ocurre que el presidente Néstor Kirchner aceptó liderar el PJ, como parte de una estrategia para fortalecerse en el Congreso Nacional, y que incluye a su mujer, Cristina Fernández, como candidata a senadora nacional en la Provincia de Buenos Aires. El mandato de ella concluye en diciembre de 2005 y el objetivo es que no renueve por Santa Cruz sino por el mayor distrito electoral argentino porque para permanecer en el poder más allá de 2007, Kirchner necesita de la Provincia de Buenos Aires.

Cristina Fernández nació en La Plata, capital bonaerense. La inserción de su familia en la ciudad es tal que su madre, Ofelia Wilhelm de Fernández, a los 75 años será candidata a una de las tres vicepresidencias o la secretaría general del Club Atlético Gimnasia y Esgrima La Plata en la lista que lidera el empresario Juan José Muñoz.

Pero Hilda González no se encuentra satisfecha con el arribo de Cristina al territorio electoral bonaerense: "Es otra operación mediática, no hay nada de eso, no hay ningún elemento que haga pensar eso. (...) Cuando ella diga: "Quiero ser candidata, en ese momento volvemos a hablar, pero hoy es sólo una operación".

En verdad, el análisis más correcto es el que hizo el diputado nacional Carlos Brown (PJ-Buenos Aires): "Me parece un poco apresurado hablar de candidaturas; estamos hablando de octubre del año próximo. Antes se están discutiendo las elecciones partidarias del PJ bonaerense, que serán en noviembre".

Lo que revela que Néstor y Cristina desconocen la agenda PJ bonaerense. Mal comienzo.

Hubo una legisladora bonaerense famosa, de apellido Fernández. Patricia Mónica Fernández, ex diputada provincial PJ-San Martín, promovida por Julio Libonatti, amiga de Eduardo Bustos, y conocida de Isidoro Lazo, Juan Garibotto y Florencio Randazzo. Ella llegó a los medios de comunicación no por su liderazgo ni capacitación sino porque fue detenida por orden del juez de Garantías, Guillermo Atencio.

Nadie va preso en la política argentina y menos por $ 85.000, pero... Patricia Mónica Fernández rompió el estándar. Fue la primera vez que España extraditó a una política argentina acusada de corrupción.

Al declarar en el juicio de extradición, ella "alegó no haber cometido ningún delito sino haber percibido, en su condición de parlamentaria, una forma de retribución encubierta para evitar el control fiscal, lo que es una práctica habitual en su país". Esto es equivalente a los sobresueldos denunciados por María Julia Alsogaray, que se seguirían pagando en casi todas las categorías políticas de Nación y provincias.

Su abogado fue el penalista José Manuel Ubeira, hoy más conocido como el defensor de Juan José Ribelli, quien dijo atribuyó la extradición al enfrentamiento entre Carlos Menem y Eduardo Duhalde (lo reiteró al explicar la prisión de Ribelli).

La causa Fernández trascendió en enero del año 2000, cuando una colaboradora de la legisladora (Silvia Di Donato) denunció siete pagos indebidos de subsidios para carenciados, y los fiscales Carlos Agüero y Esteban Lombardo acusaron a la ex diputada, su hermano (Juan Pablo Fernández), su madre (Amalia Brovarone), y tres ex empleados de la legisladora (Guillermo Bertoldi Pizarro, Mabel Díaz y María Cristina Fiore).

En un hecho inédito para un ex ñoqui, Di Donato aseguró que Fernández la hizo nombrar en la Legislatura, pero se quejó que nunca le asignó tareas.

Fernández figuraba como presidenta de una entidad que recibía subsidios, llamada Red Bonaerense de Usuarios y Consumidores, y su madre presidía un inexistente Centro para el Desarrollo Comunitario.

Osvaldo Mércuri, presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, nunca profundizó aquella denuncia.

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