Un intruso ingresó a la Quinta Presidencial de Olivos saltando uno de los paredones perimetrales y permaneció en el predio durante unas tres horas, sin que fuera detenido, según señalaron esta mañana funcionarios del Gobierno nacional.
De acuerdo con informaciones periodísticas que trascendieron esta mañana y que posteriormente fueron ratificadas por funcionarios del Ejecutivo, el hecho ocurrió el domingo pasado a la madrugada, entre las 3:45 y las 6:45, en momentos en que el presidente Néstor Kirchner se encontraba en la residencia de Olivos.
Por la falla en la seguridad presidencial, tres efectivos a cargo de los controles en la Quinta de Olivos fueron pasados a disponibilidad de inmediato, según se indicó.
Se trata del oficial de guardia de la Residencia de Olivos, un teniente de apellido Iglesias; el suboficial mayor del Ejército Antonio Urregola y quien se desempeñaba como jefe de Seguridad, teniente coronel Guillermo Abrahim.
De acuerdo con la información que se conoció esta mañana, el hombre que ingresó a la Residencia logró llegar hasta el mismo chalet presidencial, y según el relato de los acontecimientos, el desconocido llegó hasta el extremo de "golpear la puerta del chalet presidencial", donde descansaba en ese momento el Presidente junto a su esposa, la senadora Cristina Fernández de Kirchner.
Precisamente, una asistente de la primera dama, que descansaba en la casa de huéspedes, escuchó que alguien golpeaba su ventana y le pedía un vaso de agua, reclamo que atendió pensando que era una de las personas que trabajan habitualmente en la Residencia de Olivos.
Kirchner fue puesto al tanto de la situación el domingo al mediodía y de ahí en más -tras convocar al secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli- se puso en marcha hasta la medianoche un operativo para "investigar" el hecho en cada rincón de la Residencia, que incluyó un rastrillaje con perros especialmente adiestrados.
A partir de esa investigación "no se encontró nada sospechoso" ni "huellas" que pudieran remitir al intruso.
De acuerdo con las imágenes captadas por las cámaras, se trató de "un hombre joven de mediana edad", quien a pesar de que "el sistema de alarma funcionó bien", se fue de la Residencia tal como había llegado, según admitieron los funcionarios del Ejecutivo consultados esta mañana.
Tras permanecer unas tres horas dentro de la Quinta, el intruso se retiró sin que fuera detenido.
De acuerdo con lo señalado, los sistemas de alarma de la Quinta de Olivos funcionaron, detectando al intruso e incluso filmándolo con las cámaras de seguridad, pero de todos modos no se lo detuvo.
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