Faltan diez días para el 25 de febrero, fecha que el gobierno argentino fijó para dar por culminado el proceso del canje de los bonos en default de la mayor deuda pública de la historia mundial. El gobierno ha decido el silencio y no aporta datos precisos sobre el estado del canje desde hace una semana.
Los medios internacionales nunca han cesado de criticar la oferta del gobierno argentino y el modo en el que se llevaron a cabo las negociaciones. El diario inglés Financial Times publicó severas editoriales que acusan al gobierno argentino de "patotear" y de negociar con mala fe con los acreedores. La revista Forbes, por su parte, publicó días atrás con respecto al canje que el mismo "es ilegalidad, pura y simple. El Gobierno calcula que puede hacerles trampa a estos acreedores y salirse con la suya".
El diario Financial Times sostiene que detrás del optimismo del gobierno argentino, quien planea alcanzar un 50% del canje para llamar "exitoso" al proceso, se encuentra sin lugar a dudas el factor suerte.
Además, a pesar de que el último informe emanado del ministro de Economía, Roberto Lavagna, revelaba que se había alcanzado el 37% de adhesión, habrá a última hora un gran movimiento por parte de los acreedores que aceptarán finalmente el canje.
Si la Argentina logra el canje no se deberá al hecho a que haya presentado una oferta jugosa, sino que los acreedores temen no poder ver jamás ni un solo centavo de sus inversiones. Otro grupo de inversores, fundamentalmente agrupados en el Comité Global de Bonistas de la Argentina (GCAB, por sus siglas en inglés), se niegan a adherir al canje y confirmaron que llevarán su causa a la corte arbitral del Banco Mundial, Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI).
Continuando en el plano judicial internacional, los acreedores encontraron documentos sobre transacciones de reservas efectuadas desde los Estados Unidos hacia el Banco Internacional de Pagos en Suiza, meses antes y durante el default (cesación de pago) que el Banco Central consideró potenciales de "embargo" por inversores. Esta denuncia, se refiere a aproximadamente US$ 6.100 millones.
Los medios de todo el mundo no logran ponerse de acuerdo con los nacionales. A pesar de que los primeros ahora consideran la posibilidad de que la Argentina culmine con el canje de manera favorable, las consecuencias de este proceso, repudiado en el exterior no pueden ser buenas a pesar que la Bolsa local esté registrando en los últimas días niveles record.
"Ya se está desacelerando el crecimiento. No se están haciendo las necesarias inversiones y la situación tiene perspectivas de empeorar. La inflación vuelve a aparecer y el presidente de la Argentina ahora insinúa que si los precios suben, se impondrán controles", publica contundente la revista Forbes.
Una de estas consecuencias ya se pueden advertir, por ejemplo, en la decisión de la italiana Banca Nazionale del Lavoro (BNL), quien ha decidido ceder sus actividades en el país al grupo Banco Hipotecario por una suma total de US$ 232 millones.
Enviá tu comentario
IMPORTANTE: Este es un espacio de participación de usuarios.
Las opiniones aquí expresadas pertenecen exclusivamente a los usuarios y no reflejan la opinión de Urgente24
El equipo de redacción revisará las opiniones para evitar la difusion de comentarios no apropiados o insultos. Enviar un comentario implica la aceptación del Reglamento