Geopolítica de Argentina para Sudamérica

Por Emilio Nazar Kasbo (*) A continuación reproducimos la siguiente investigación sobre la situación geopolítica de la Argentina en Latinoamérica.

Geopolíticamente es necesario reconocer el liderazgo intelectual de la Argentina en Latinoamérica. El mundo globalizado tiende a la unificación de las naciones por bloques, y estas circunstancias nos deben llevar al planteamiento de una "Tesis del Centro Sudamericano" en el cual nuestro país debe cumplir un rol dirigencial en la región.

# Liderazgo nacional

Argentina tiene dos centros primarios: Córdoba (centro continental) y Tierra del Fuego (desde donde se domina la Antártida e Islas del Atlántico Sur). Y aun falta el desarrollo de la zona austral e incluso toda la zona del norte. En este trabajo centraremos este interés geopolítico y estratégico en pos del liderazgo regional argentino. Desde el punto de vista cultural, toca a la Argentina fortalecer la identidad desde la Religión, el idioma y las sanas tradiciones locales, logrando la originalidad desde estos puntos fuertes para la expansión continental.

El liderazgo argentino en inteligencia económica, técnica y cultural no tiene competencia de Chile ni de Brasil, y se encuentra en franca competencia con México, ambos con gran poder de influencia cultural en el resto del Continente. Es desde allí que debe encararse una estrategia geopolítica actual, y no desde la imposición de planes ajenos a la identidad local. Es necesario tener en claro la finalidad a largo plazo, y los objetivos de corto y mediano plazo, algo a lo cual los gobiernos de turno desde hace años no prestan atención.

# Gobernar el mundo

Afmirmó Mackinder en 1919: "quien gobierna Europa Oriental domina el Centro. Quien gobierna el Centro domina el mundo isleño. Quien gobierna el Mundo Isleño domina el mundo". La versión sudamericana fue elaborada por Tambs, poniendo la mirada en la región de Santa Cruz (Bolivia), como centro estratégico sudamericano.

La popularidad de la geopolítica en Latino América ha estado basada en la historia política de los Estados y sus relaciones internacionales. El surgimiento de Estados independientes, provenientes de los imperios Español y Portugués, dejaron un legado de disputas y reclamos de fronteras. Como los Estados independientes se desarrollaron, tales disputas de fronteras sobre poblados, recursos e identidad nacional han estallado a veces en verdaderas guerras tales como la Guerra del Pacífico de 1879 (cuando Bolivia perdió su salida al mar por Chile), la guerra de Chaco de los años 30 entre Paraguay y Bolivia y repetidas tensiones entre Argentina y Chile en el extremo sur. Es más, se destaca la expansión hacia el oeste del Brasil, tomando largos tramos que fueron parte del imperio Español, dejando antagonismos entre Brasil y sus vecinos (Pittman 1981; Tambs 1974).

# Expansión argentina

En la Geopolítica latinoamericana, es necesario otorgar un papel central a la dimensión geográfica, a la dinámica espacial, y así podremos comprender los movimientos que se realizan en este contexto, desde una visión superadora a la constitucional-jurisprudencial o diplomático-ministerial.

Resulta clara, por ejemplo la "marcha al oeste" de Brasil como una constante geopolítica. Chile tiene una política expansiva hacia el norte y hacia el Este. De la misma manera, Argentina debe adoptar medidas similares, trazar un destino geopolítico en el contexto latinoamericano que permita la expansión cultural y económica. Y no hablamos sólo en términos militares o de posible anexión territorial, sino del control estratégico de la Región.

Bolivia y Paraguay ocupan regiones interiores en Sudamérica, sin salida al mar, y se encuentran rodeados por el centro económico más importante de la zona constituido por Brasil, Argentina y Chile. Para Bolivia y Paraguay esto es una amenaza. Bolivia perdió su costa del Pacífico a manos de Chile en la "Guerra del Pacífico" de 1979, por ejemplo. Ambos países se convirtieron en "estados tapones" entre sus vecinos, previniendo crisis y conflictos directos entre aquéllos. Pero la actual globalización multipolar genera presiones para "absorber" (económica y políticamente) tales regiones.

# Objetivo: Bolivia

Hacia 1930 el geopolítico brasileño Mario Travassos indicó el papel clave de lo que denominó el "triángulo mágico" determinado por las ciudades bolivianas de Cochabamba, Sucre y Santa Cruz para la marcha hacia el oeste de Brasil. Bolivia se encuentra en el corazón de Sudamérica.

En 1904 Mackinder escribió un artículo sobre "el pivote geográfico de la historia", enfocado en el potencial creciente del poder de tierra y el papel emergente de la "región pivote" de Eurasia occidental. Su interpretación posteriormente desarrollada, fue dirigida al despertar de Gran Bretaña y Francia hacia el equilibrio de fuerzas y a los riesgos potenciales de una alianza entre Alemania y Rusia que domine la región pivote, y desde allí Eurasia. Gran Bretaña puso énfasis en el poder marítimo, pero fue insuficiente en este nuevo enfoque, ya que Mackinder consignó en 1904: "El desarrollo de las enormes potencialidades de Sudamérica podría tener una influencia decisiva sobre el sistema. Ellas (las naciones de la región) podrían reforzar a los Estados Unidos, o, por otra parte, si Alemania fuera a desafiar la doctrina de Monroe con éxito, ellas podrían separar Berlín de lo que puedo describir quizás como una política de pivote".

# Geografía del poder

La visión sudamericana se volcó a la geopolítica en términos de límites, desarrollo estatal y competencia. América Latina tiene dos importantes zonas estratégicas: la cuenca del Caribe y el triángulo boliviano, teniendo en cuenta que Venezuela, Colombia y Guayana se convierten en una zona bisagra entre Sudamérica y el Caribe.

Los Andes aislan a las naciones del Pacífico de la cuenca del Amazonas, lo cual permitió a Brasil adentrarse en la selva penetrando corriente arriba desde Belén, explotando el caucho de la región de Acre reclamada por Bolivia y cedida a Brasil por tratados en 1867 y 1903. Hídricamente, desde los Andes nacen los grandes ríos del subcontinente, que convierten al Amazonas el área continental principal o el centro sudamericano.

El centro de Charcas es inmune de ataques marítimos, y es dominante de las cabeceras de los dos principales sistemas de río del Continente: el Amazonas y el Río de la Plata, y es una zona de control de las rutas directas y diagonales transcontinentales, cumpliendo todas las exigencias geopolíticas clásicas para un área de pivote. Aquí está la clave del dominio continental. Históricamente, los los Imperios precolombinos Aimaras e incaicos, y más tarde bajo el Imperio español, el altiplano y Charcas fueron centros de poder.

# Alianza con Bolivia

Argentina debe reasumir el concepto geopolítico de la naturaleza orgánica del Estado desde la concepción de espacio, elemento que es muy tenido en cuenta y llevado a la práctica por Chile y Brasil. Si la Argentina no toma un rol protagónico en la alianza con Bolivia y en el control de dicho centro, Chile en razón de motivos históricos tendrá vedado el acceso, y el área quedará libre para favorecer a Brasil, país que conseguiría el dominio continental.

Actualmente existen factores económicos y tecnológicos que impedirían considerar esta zona como de importancia. Sin embargo, se trata de un claro centro territorial que de avanzar la unión regional en Sudamérica acabará desempeñando un rol de influencia en la zona.

Geopolíticamente, los Estdos que han crecido son Brasil, Argentina y Chile, y el que lograra dominar el centro de Charcas alcanzaría el símbolo de la primacía continental de uno de estos tres países. El control de este eje recaerá en el Estado dominante. Es necesario, desde la visión geopolítica, preocuparse por los poderes externos que ganan el control del centro y el pivote, consolidando el dominio.

Esclarecido esto, se debe elaborar una estrategia acorde.

# De Sudamérica al mundo

Sudamérica ha tenido tradicionalmente una geopolítica intracontinental.

Sin embargo, y a la vista de la política actual, Argentina necesita enlazar Sudamérica y su centro dentro de una maniobra de poder geopolítico global multipolar contemplando a Sudamérica y América Central como zonas para un desempeño de un papel más central.

Afectan a esta visión: la tendencia izquierdista actual de algunos gobiernos, la falta de una construcción geopolítica interna, y las alianzas estratégicas y geopolíticas de Argentina con el Mercosur y el Pacto Andino, así como con Estados Unidos, la Unión Europea y China.

Los autores marxistas como Londoño (1948) concibieron la extensión potencial geográfica de sus ideas desde las bases en: Argentina, Uruguay y Brasil meridional, además de los trabajadores mineros de Chile septentrional y Bolivia para extenderlo hacia los Estados del Norte, todo ello mediante actividades de subversión interna. Durante la Guerra Fría, muchos vieron una alianza estratégica de Brasil con EEUU como central, y su geopolítica como un componente dentro de una resistencia más amplia conducida por EEUU contra el comunismo y la subversión.

Es necesario desarrollar la región del Norte de Argentina, sobre todo en las fronteras. Así se tendrá un punto de apoyo para la conexión e integración dentro de la economía espacial nacional de la zona de Charcas. Es decir: no se propone la "invasión" militar, sino la integración económica, cultural y tecnológica, desde la común historia, identidad, idioma y religión, elementos fundamentales para tal integración. Esto proporcionará seguridad, requisito que a su vez es indispensable para la integración, y el aspecto militar ocupa un papel clave en estos aspectos de sociedad y economía.

# Importancia de Charcas

Así, desde Cuba se puede controlar el Caribe y Centroamérica, y tras la victoria de Fidel Castro en Cuba era predecible que el siguiente paso iba a producirse en la región del centro sudamericano: Bolivia. El Che Guevara eligió Charcas como lugar para su foco, evaluando su ubicación remota y cercana a las fronteras de varios países, que facilitaba movimientos y escapes a través de las fronteras internacionales, elementos relevantes para él porque estaban fuera del control del Estado. Actualmente debemos considerar por tales motivos a la región de Charcas como un centro de importancia para el desarrollo económico e impulso regional, objetivo de importancia para el control de Sudamérica en el cual la Argentina debe pasar a ocupar un rol protagónico.

En el "Ajedrez geopolítico" estamos contemplando la aparición de una posible Tercera Guerra Mundial iniciada por el combate al terrorismo internacional, dado el peso de las potencias en conflicto: Estados Unidos y su colapso económico, China y su expansión económica, la Unión Europea y su colapso demográfico y de identidad, y finalmente la influencia actual del marxismo "progresista" en los gobiernos de Latinoamérica y África. Y en todo este esquema, corresponde a Latinoamérica un papel preponderante, en el cual la Argentina debe ir asumiendo con velocidad un rol protagónico.

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(*) Especialista en Derechos Humanos UNLZ

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