Se renueva la disputa: Tomada afirmó que "los planes sociales continuarán vigentes"

El ministro de Trabajo aseguró que los planes sociales "seguirán siendo necesarios" hasta que se implemente un seguro de desempleo para casos de desocupación transitoria. Las declaraciones del ministro Tomada renuevan la discusión en torno a la política social del Gobierno y al mantenimiento de los subsidios para desocupados. Es que a fines del mes pasado el ministro de Economía, Roberto Lavagna, había comentado que el plan Jefes y Jefas de Hogar sería reconvertido en un seguro de desempleo de duración limitada, que se completaría con un subsidio para las madres desocupadas con hijos menores de edad, ayuda que hoy es contemplada en el plan Familias. En ese entonces, Lavagna había logrado despertar la ira de Alicia Kirchner, quien ha basado toda su estrategia como funcionaria en el manejo personal de los casi dos millones de esos planes con los que el gobierno reina en el mundillo de piqueteros y punteros políticos bonaerense.

El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, aseguró hoy que el gobierno aspira a implementar "un verdadero seguro de desempleo" para casos de desocupación transitoria, aunque ratificó la continuidad de los planes sociales.

"Mientras esta situación se mantenga los planes seguirán siendo útiles y necesarios, pero un país normal debe tener funcionando un seguro de desempleo para casos de desocupación transitoria", explicó Tomada durante una conferencia de prensa ofrecida en la Casa de Gobierno.

Las declaraciones del ministro Tomada renuevan la discusión en torno a la política social del Gobierno y al mantenimiento de los subsidios para desocupados.

A fines del mes pasado el ministro de Economía, Roberto Lavagna, había comentado, en una entrevista con el Miami Herald, que el plan Jefes y Jefas de Hogar sería reconvertido en un seguro de desempleo de duración limitada, que se completaría con un subsidio para las madres desocupadas con hijos menores de edad, ayuda que hoy es contemplada en el plan Familias.

Los dichos del ministro provocaron en su momento molestia en la Casa Rosada, sobre todo porque Lavagna se había referido al proyecto de reemplazo de los planes sociales como una iniciativa ya aceptada por el presidente Néstor Kirchner. Sin embargo, no hubo ninguna desmentida oficial de los dichos del titular del Palacio de Hacienda.

Lavagna también provocó entonces la ira de Alicia Kirchner, quien ha basado toda su estrategia como funcionaria en el manejo personal de los casi dos millones de esos planes con los que el gobierno reina en el mundillo de piqueteros y punteros políticos bonaerense.

Tanto atesora la ministra esos planes y esos fondos que hace poco tiempo atrás quedó encantada con los resultados de una encuesta que mandó confeccionar en el Gran Buenos Aires para medir su imagen. El dato exaltó a tal punto algunos ánimos en la Casa Rosada que hasta se pensó en lanzar su candidatura en la provincia de Buenos Aires para el caso de que Cristina Fernández declinase la postulación a senadora, que ahora parece un hecho absolutamente consumado.

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