"Dicción e inteligibilidad"

A continuación, las apreciaciones de un usuario de casi 80 años el deterioro del idioma.

Señor Director:

Dicción: Modo de hablar
Inteligibilidad: Calidad de inteligible
Inteligible: Que se puede comprender
Que se oye clara e indistintamente

Con 79 años recién cumplidos me siento algo acomplejado porque no puedo captar, en porcentajes variables, lo que expresan las generaciones más jóvenes, y no tan jóvenes, incluidos comunicadores sociales, actores, actrices, cantores, y hasta mi nieta mayor con la que el citado porcentaje, en ocasiones, alcanza, el 100%. Complejo nacido de la idea de que con la edad, además de la capacidad auditiva, también he perdido la de comprender es decir, oigo pero no entiendo.

Sin embargo, he llegado a la conclusión que no es una falencia propia no captar cabalmente a los que se expresan en modo tal que, a mi entender, vulneran formas o principios básicos de la dicción y la inteligibilidad porque, según de quien se trate, no tengo problema alguno. Mi aparente deficiencia no se limita a compatriotas, porque he llegado al conclusión que tanto los filmes argentinos como los españoles deberían estar subtitulados. En oportunidad de ver El hijo de la novia, al protagonista principal no le entendí el 60% de sus parlamentos.

Pertenezco a la generación, en estado de alistamiento para partir, que fue educada en ciertas formas de dicción e inteligibilidad que hoy parecen perimidas e incluso en otros tiempos actores y actrices se expresaban, tanto aquí como en el exterior, de manera impecable según se puede apreciar en antiguos filmes.

Como consecuencia de un encontronazo que tuve hace tiempo con un "experto" en educación que entendía que la escuela debe descender al estilo coloquial de los educandos y no al contrario, aparentemente el modo de expresarse está y estará en constante deterioro (*), cosa que no parece darse en otros ambientes, incluidos los españoles, a pesar su películas, y otros países hispano parlantes. Creo que estamos ante otra contribución a nuestra decadencia que no se limita, y eso es lo grave, a lo puramente económico. Las autoridades responsables en la materia: ¡bien gracias!, ocupadas en la próxima elección.

(*) Tal tendencia al deterioro del idioma no es patrimonio exclusivo nuestro y de la lengua española. En Inglaterra, en tiempos más o menos recientes, los que yo incluyo entre los elementos disolventes de una sociedad, han propiciado y con éxito, que se tienda a la adopción del Blue collar English, el inglés de las clases bajas, en lugar de tender al White collar English, el correspondiente a las clases medias y altas. Es decir que en lugar de elevar el nivel cultural de los menos cultos se ha propiciado exactamente lo contrario. De ahí que los extranjeros educados en lo que una época se denominaba King’s o Queen’s English o Given English o más popularmente el Inglés de la BBC, en ocasiones tengan dificultades para entender a un interlocutor o incluso a locutores de la citada corporación, otrora referencia del idioma.

Eugenio Luis Bezzola

Dejá tu comentario