"Es muy fácil administrar una farmacia dedicándose a atender solamente genéricos"

A continuación, la opinión de una usuaria en relación al artículo referido a las farmacias Dr. Simi y la situación actual en la Ciudad y Provincia de Buenos Aires.

Señor Director,

Habiendo tomado conocimiento del artículo referido a las farmacias Dr. Simi en EDICION I quisiera aclarar algunos puntos en mi calidad de boticaria de farmacia independiente.

1) Es muy fácil administrar una farmacia dedicándose a atender solamente genéricos, al contado, e ignorando la seguridad social. No hay que financiar el porcentaje que cubren las prepagas u obras sociales.

En los países europeos civilizados la seguridad social abona el 80 % del descuento otorgado al paciente, a los 10 días de presentada la facturación mensual y el resto luego de auditar las recetas a los 30 días como máximo. Allí no se realizan descuentos de hasta el 25% del valor teórico de reintegro.

¿Que pasa en la Argentina?

Ese porcentaje que se descuenta, es un beneficio de la prepaga u obra social o de distintas mandatarias que se ocupan de tramitar los cobros y no tienen nada que ver con la farmacia. Va en desmedro del beneficio de la farmacia, que cobra su reintegro, nunca o sólo excepcionalmente, antes de los 45 días de presentada la factura. En el caso del PAMI frecuentemente en forma fraccionada o con bonos de descuento para las droguerías proveedoras.

La farmacia que sólo vende genéricos puede comprar y vender al contado. No tiene que cumplir con el amplio trabajo que representa llenar las boletas de reintegro, pegar troqueles, cuidar que estén todos los datos del paciente, llenar todo con la misma tinta, completar planillas para la presentación de las mismas o presentar todo ya resumido en un disquete.

En la Provincia de Bs. As se paga un porcentaje sobre la venta total (a diferencia de Capital que paga sobre la diferencia entre el valor de compra y de venta) en calidad de ingresos brutos, importe que generalmente ya es retenido por la droguería al adquirir el producto y que en el caso de venta a la seguridad social se abona muchísimo antes de que dicho valor sea reintegrado por la misma. El Dr. Simi al invadir con medicamentos a la Provincia vía delivery, no abona los Ingresos Brutos que tributan las farmacias establecidas en la Provincia.

Con el tiempo los valores que una farmacia financia llegan a representar un porcentaje importante del valor total del negocio que está prácticamente congelado y además corre riesgos inflacionarios al demorarse los reintegros. Si el Dr. Simi quiere exportar medicamentos argentinos por su calidad, no nos olvidemos que la situación cambiaria en este momento lo favorece ampliamente. No los consigue a igual precio en otra parte. Que exporte, pero que respete las reglas de juego del país.

2) Las cadenas de farmacias, tienen un volumen de compras muy importante que les permite obtener precios muy distintos a los que puede obtener una farmacia independiente y ello les permite comprar directamente al Laboratorio.

Pero la Cadena se establece dónde está el gran público. No está en los barrios, ni en los pueblos porque eso no es rentable. Las cadenas tienen farmacias con horarios de apertura de 24 horas, que si bien cumplen una función importante, quitan rentabilidad a la farmacia de barrio que cumple con sacrificio un turno que es ignorado por la población.

La farmacia de barrio debe cumplir con los mismos requisitos que la farmacia de la cadena para ser habilitada. A diferencia de la cadena es atendida generalmente por su dueño que en muchos casos es el profesional. En la Cadena son todos empleados y sobre todo los auxiliares de farmacia no son capacitados debidamente y rotan permanentemente. El profesional generalmente no atiende directamente al público en la cadena, a no ser que se lo solicite expresamente para evacuar dudas.

En el campo farmacéutico es de desear que se logre superar muchas incongruencias que existen entre Capital y Provincia, como si se tratara de países distintos. Y sería deseable que la farmacia vuelva a ocupar la jerarquía que ha perdido en los últimos años haciendo respetar el lema: Medicamentos sólo en la farmacia.

Sin otro particular saludo muy Atte.

Cristina Hilbing

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