Exclusivo: Para reforzar su campaña, Kirchner anunciará que se identificaron los restos de la monja francesa Duquet

Las monjas francesas Léonie Renée Duquet y Alice Domon fueron torturadas y arrojadas vivas al mar por el grupo de tareas de la ESMA. Pero ahora se han identificado los restos de Duquet, lo que sería anunciado en días más por el Gobierno argentino que prepara una nueva entrevista entre Néstor Kirchner y Jacques Chirac por el tema de Aguas Argentinas. Kirchner, además, espera un rédito electoral del tema, de parte de los organismos de derechos humanos. Antes de la desaparición de las monjas, se las fotografió delante de una bandera de Montoneros, con un ejemplar del diario La Nación del 14 de diciembre de 1977, para responsabilizar a esa organización de lo que le ocurriría a las francesas. La imagen que acompaña a esta nota es una de esas fotografías.

Fuentes seguras con acceso a la Cámara Federal de la Ciudad de Buenos Aires confirmaron a U24 que la Justicia ha encontrado los restos de la monja francesa Léonie Renée Duquet, detenida-desaparecida el 10 de diciembre de 1977, durante el llamado 'Proceso de Reorganización Nacional' . Duquet fue detenida a las 12:30 en la Capilla de San Pablo, y llevada en un Ford Falcon a la ESMA.

La Cámara comunicaría la noticia, en las próximas horas, a Horacio Méndez, director de Derechos Humanos de la Cancillería, sucesor de Alicia Oliveira en ese cargo, y quien fue defensor de las monjas francesas 'desaparecidas' y por este trabajo fue condecorado con la Legión de Honor por el entonces presidente francés François Mitterrand.

La informaron fue brindada, a su vez, por el Equipo Argentino de Antropología Forense a la Cámara Federal en lo Criminal y Correccional, y se refiere a la monja de nacionalidad francesa secuestrada el 10 de diciembre de 1977 en la Capilla San Pablo, ubicada en Ramos Mejía, partido de La Matanza, Provincia de Buenos Aires.

Léonie Renée Duquet fue interrogada y torturada en las dependencias de la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA) utilizada por el Grupo de Tareas 3.3.2, que actuaba en la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires.

En la ESMA, Duquet se encontró con Alice Domon, otra monja francesa, y otras personas secuestradas 2 días antes en la Iglesia Santa Cruz.

En los operativos realizados entre el 8 y 10 de diciembre de 1977 por el 3.3.2 se secuestró a 12 personas, que nunca más aparecieron con vida.

El 8 de diciembre, Día de la Inmaculada Concepción, 'Gustavo Niño' (Alfredo Astriz) 'marcó' con un beso en la mejilla a Nélida Chidichimo, pero ella logró escaparse, aunque fue testigo de los secuestros de Esther de Careaga, de María Ponce de Bianco, y de la monja francesa Domon, arrastrándola con sus manos maniatadas. El sábado 10, en la avenida Mitre, Sarandí, Avellaneda, a metros de su domicilio particular, fue secuestrada la primera presidenta de las Madres, Azucena Villaflor de De Vincenti. Aquel sábado 10, fue secuestrada Léonie Renée Duquet. En esas horas también fueron secuestrados: Patricia Oviedo, Eduardo G. Horano, Raquel Bulit, Ángela Auad, Remo Berardo, Julio Fondovila y Horacio Elbert.

En el caso de Alice Domon vivía en la Argentina desde 1967. Ella pertenecía a la congregación Hermanas de las Misiones Extranjeras, y la causa por estas desapariciones ha sido reabierta en París por el juez R. Le Loire. Resultó muy ilustrativo el documental 'Yo soy Alice', dirigido por Alberto Marquardt.

De acuerdo al testimonio del sobreviviente de la ESMA, Horacio Domingo Maggio, Legajo Nº 4450, las hermanas Alice y Renée fueron llevadas al 3er. piso del Casino de Oficiales del complejo de los marinos, entre el 11 y 12 de diciembre.

"(...) las hermanas estaban muy golpeadas y débiles, ya que para llevar al baño a la hermana Alice tenían que sostenerla dos guardias. Le pregunté si la habían torturado y me contestó afirmativamente: la habían atado a una cama totalmente desnuda y le habían aplicado la picana por todo el cuerpo; además dijo que después la habían obligado a escribir una carta a la Superiora de su Congregación, la escribió en francés bajo constante tortura, y posteriormente le sacaron una foto a ambas, sentadas junto a una mesa. Las fotos les fueron sacadas en el mismo lugar donde las torturaron: el subsuelo de Casino del Oficiales. Las hermanas estuvieron en ESMA unos 10 días, torturadas e interrogadas. Luego fueron 'trasladadas' junto con las 11 personas restantes", fue el relato.

En el caso de Léonie Renée Duquet, ella también era de la congregación Hermanas de las Misiones Extranjeras, estuvo alojada en la sección del Casino de Oficiales conocida como 'Capucha', y su 'traslado' fue arrojarla al mar.

Esto lo corroboró el testimonio de Lisandro Raúl Cubas, Legajo Nº 6974: "(...) a ambas Hermanas se le tomaron fotografías en el propio laboratorio fotográfico de la ESMA, en las que aparecían sentadas delante de una mesa con un cartel del Partido Montonero atrás".

En otro testimonio, Alberto Girondo relató: "(...) Por Silvia Labayrú supimos que entre los secuestrados se encontraba una monja francesa. (...) En el lugar denominado 'Capucha', durante dos días estuvo acostada en el cubículo contiguo al mío la hermana Leonie Duquet. No podía hablar con ella por la proximidad de los guardias (...) pero supe que se trataba de ella por los demás prisionaros que podían hablar ocasionalmente con algunos de los integrantes del grupo de familiares. Además uno de los guardias la llamaba 'hermana' cada vez que se dirigía a ella. Cuando estaba acostada en su cubículo tenía capucha, esposas y grilletes, pero la pude ver 48 horas después de su llegada a la ESMA en el baño de 'Capucha'. Un guardia la llevaba ayudándola a caminar. Cuando la autorizó a quitarse la capucha pude ver las marcas de golpes que llevaba en la cara. Se movía con mucha dificultad, el guardia le recomendó no tomar agua, señal que había sido torturada recientemente. Durante su permanencia en Capucha la hermana Lèonie fue bajada en varias oportundidades al sótano para ser interrogada. (...)"

La suerte de estas monjas fue tema de irritación durante la entrevista que Néstor Kirchner y Jacques Chirac (tal como ya le había ocurrido a Carlos Menem).

Kirchner negocia un nuevo encuentro con Chirac por el tema Aguas Argentinas / Grupo Suez, y podría exhibir este avance.

Desde sus desapariciones, las autoridades francesas realizaron innumerables gestiones ante sucesovos gobiernos argentinos para lograr esclarecer el caso y condenar a los responsables.

Según testimonios de sobrevivientes, un día antes de realizar el 'traslado' del grupo detenido-desaparecido, el 17 de diciembre de 1977, la Junta Militar envio a la prensa un comunicado diciendo: "el Gobierno Nacional condena enérgicamente toda tentativa de perturbar la paz y la tranquilidad de los argentinos".

El grupo de 12 familiares fue objeto de un traslado nocturno a los 10 días de su desaparición forzada. El avión que despegó de Aeroparque a las 21:00 del 18 de diciembre de 1977, puso rumbo al sur y se internó en el mar donde se arrojó los cuerpos.

Sin embargo, los cadáveres aparecieron entre el 20 y el 21 de diciembre de 1977 a la altura de la localidad balnearia de Santa Teresita, Provincia de Buenos Aires.

En la desclasificación de archivos originados en la embajada de USA en la Ciudad de Buenos Aires, se menciona la desaparición de las monjas como responsabilidad de la Armada Argentina, y que incluso tuvieron conocimiento inmediato de que los cuerpos de ambas religiosas habían aparecido en la costa atlántica, cerca de Bahía Blanca. Lo informó el embajador Raúl Castro a sus superiores ado el 30 de marzo de 1978.

La agencia estatal francesa France Press informó en dos despachos de prensa de marzo de 1978 que los cuerpos de las religiosas habían sido descubiertos sobre la costa atlántica, a la altura de Bahía Blanca, de acuerdo a artículos publicados por el diario sueco 'Le Goetenborgs Tidningen', basados en datos proporcionados por un oficial argentino.

Los organismos de derechos humanos esperan que, ahora, el llamado 'caso de la Santa Cruz' tome un nuevo giro.

Desde Francia se afirma que el sobrino de Leonie Duquet, Michel Jeanningros, ya fue notificado del hallazgo.

En marzo de 2004, el abogado Mendez Carreras entregó en mano al jefe de la Armada, almirante Jorge Godoy, una comunicación exigiendo "se haga todo lo que esté a su alcance para que las familias Domon y Duquet, y aquellos que sin haberlas conocido también las amamos, podamos acceder a sus tumbas para dejar una flor".

Pero la queja es que Godoy nunca se interesó en este reclamo.

En verdad las autoridades argentinas no hicieron demasiado por esclarecer el hecho, a pesar de las protestas de las autoridades francesas desde 1978.

Los organismos de derechos humanos afirman que las evidencias fueron ocultadas. Los cuerpos fueron enterrados como NN en el cementerio de General Lavalle, Provincia de Buenos Aires.

En el año 1985, la Cámara Federal condenó a Emilio Eduardo Massera por su responsabilidad en el secuestro y desaparición de ambas monjas. La investigación judicial se extendió a la responsabilidad del Grupo de Tareas y a Alfredo Astiz, pero el expediente quedó inconcluso en 1987, por las leyes y decretos promulgados por Raúl Alfonsín.

En 1989, Massera fue indultado por Carlos Menem.

En 1990, la Cour d´Assises de París condenó en ausencia a Alfredo Astiz a la pena de reclusión perpetua. Sin embargo, el Estado argentino negó su extradición.

La investigación se reabrió en 1995, a pedido del abogado Méndez Carreras.

La investigación se tramitó bajo el número 18967/03 'Acosta, Jorge Eduardo s/ privación ilegal de la libertad'.

El juez Sergio Torres dictó el procesamiento con prisión preventiva de Alfredo Astiz, Jorge E. Acosta, Antonio Pernias y Héctor A. Febres como coautores del delito de tormentos, previsto en el art. 144 del Código Penal.

Desde la declaración de inconstitucionalidad de las leyes de Punto Final y de Obediencia Debida, ya no existen obstáculos legales para resolver las responsabilidades.

Sin embargo, el 26 de enero de 2005, la causa fue elevada a la Sala II de la Cámara Nacional de Casación Penal por un recurso de inconstitucionalidad interpuesto por las defensas, y todavía se encuentra pendiente de resolución.

El tema pone sobre el tapete a Alfredo Astiz y es motivo de profundo debate interno en la Armada Argentina. Se esperan importantes repercusiones.

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