Si todo va bien para 'Arturito', a las 22:00 K en Corrientes

El presidente Néstor Kirchner llegaría a las 22:00 a la provincia de Corrientes, acompañado por la candidata a senadora nacional Cristina Fernández. Participará en el Hotel de Turismo del anuncio oficial de los resultados de la elección a gobernador. Néstor Kirchner apunta a que ello le sirva a la vidriera nacional, a 3 semanas de las elecciones nacionales. Las predicciones dan un triunfo de Arturo Colombi en más de 20 puntos por sobre Carlos Rubín.

Más de 620.000 correntinos se hallan habilitados para elegir hoy al nuevo gobernador de la Provincia, entre 5 candidatos.

Aparece con más chances el Frente de Todos, por el que se postula el radical Arturo Colombi, primo del actual gobernador Ricardo Colombi, seguido por el Frente Unidos por Corrientes, con el peronista Carlos Rubín como líder de la fórmula gubernativa.

La clave de los comicios es la 2da. vuelta, una instancia que el oficialismo intenta evitar para obsequiarle el triunfo al presidente Néstor Kirchner.

Los comicios transcurrirán en un clima tenso por sospechas de fraude.

Sin embargo, poco le costó a la administración Colombi despegarse de las irregularidades en la confección de los padrones. El propio ministro de Gobierno las admitió y optó por tirarle el fardo al controvertido juez federal el juez Federal Carlos Soto Dávila, quien por esas horas estaba en Misiones y prefirió guardar un sugerente silencio mientras crecen las suspicacias.

Los padrones los hace el Juzgado, y el plazo para cuestionarlos ya ha vencido. Los apoderados de la oposición reaccionaron tarde.

El juez Soto Dávila vive en un laberinto de complicado tránsito por acumular denuncias de irregularidades.

Fue el propio ministro de Gobierno, Jorge Barrionuevo quien le lanzó toda la responsabilidad al juez y no rechazó que pueda existir fraude, pero dejó el tema en manos de la Junta Electoral. "Estamos involucrados en la Justicia", planteó el funcionario.

Por ahora Soto parece contar con la buena voluntad de la Cámara Federal, y de un sector del Consejo de la Magistratura donde se sustancian las denuncias realizadas por el fiscal federal Oscar Resoagli.

La elección de hoy tiene una fuerte implicancia nacional por la apuesta que hizo el presidente Néstor Kirchner en Corrientes, donde apadrina a la alianza oficiliasta pese a que los principales candidatos provinciales y municipales son radicales.

El jefe de Estado confía en una victoria que por efecto contagio estimule el resultado electoral que necesita el 23 de octubre para lograr mayoría propia en el Congreso Nacional. Por eso vino al Club de Regatas a abrazarse con los primos Ricardo y Arturo Colombi, quienes se lo permitieron a cambio de obras y recursos.

Si hoy Corrientes hubiera votado cargos ejecutivos y legislativos en simultáneo, el exitismo que embarga a los candidatos oficialistas tendría menos sustento y la batalla entre el Gobierno y las fuerzas que carecen del aparato estatal para hacer campaña habría sido un tanto más equilibrada.

Pero el desdoblamiento de las elecciones provinciales desarmó las estrategias opositoras por varias razones: los candidatos a legisladores con peso propio no podrán apuntalar a sus duplas gubernativas, el presupuesto para propaganda tuvo que dividirse en dos y nadie podrá hacer uso de los fondos que remite el Ministerio del Interior sino hasta la elección del 23 de octubre, cuando se designarán diputados nacionales.

Las elecciones en un principio estaban programas de acuerdo a la usanza tradicional, pero como aquello que la ley no prohibe está permitido, los estrategas del oficialismo hallaron la forma de limar las bases tanto económicas como políticas de los partidos opositores.

Al separar los comicios gubernativos de los parlamentarios sin torcer ningún principio normativo (aunque sí éticos) el gobernador Ricardo Colombi obligó a los adversarios a un doble esfuerzo. Deberían hacer campaña para la elección provincial gubernativa y luego volver a gastar en afiches, parlanteo, boletas, cortos televisivos y radiales durante las tres semanas previas a las parlamentarias del 23 de octubre.

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