K encabeza el acto por la semana de la Policía Federal, mientras la policía pingüina vuelve a protestar

Néstor Kirchner participa del homenaje a la Fuerza que se realiza en la Escuela de cadetes "Coronel Ramón Falcón", donde también se encuentra presente buena parte del Gabinete. Mientras, desde Santa Cruz, la policía de la provincia vuelve a la protesta y exige la respuesta que le prometieron las autoridades pingüinas poco antes de las elecciones del domingo. ¿No hay palabras de Néstor K para sus pingüinos?

Néstor Kirchner participó esta mañana, desde las 11.15, del acto central de la Semana de la Policía Federal en la escuela de cadetes "Ramón Falcón", del barrio porteño de Villa Lugano.

Allí, destacó que bajaron los índices de delitos y también la cantidad de policías caídos. Además, aclaró que "la lucha contra la delincuencia es una de las más importantes cuestiones de Estado".

Junto a Kirchner, también concurrieron a la ceremonia los ministros del Interior, Aníbal Fernández, y de Justicia, Alberto Iribarne, además del vicepresidente Daniel Scioli, el jefe del gobierno proterño, Aníbal Ibarra, y el titular de la Policía Federal, comisario Néstor Valleca, entre otras autoridades.

Pero, mientras K habla en la Capital, en su territorio natal, la policía de Santa Cruz vuelve a elevar el reclamo que quedara latente luego de que las autoridades pingüinas intentaron un cese del conflicto de cara a las elecciones legislativas del pasado domingo.

En la provincia, hay una enorme insatisfacción por la falta de respuesta oficial a la propuesta salarial presentada a la Jefatura. Además, el conflicto se acentúa por la interna que vive la Policía. Sectores de la misma dieron cuenta de que el último conflicto dejó divisiones internas que podrían agravar la relación futura entre cuadros de la policía.

Esto podría gravitar enormemente en el las decisiones que pudieran tomar en el futuro respecto de reivindicaciones institucionales y aceptación o rechazo de los niveles de conducción.

El conflicto no cesa, y de no encontrarse una salida a los pedidos del sector, en noviembre volvería el caos.

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