La tropa bonaerense se suma a las críticas K contra la Iglesia

Funcionarios bonaerenses y legisladores defendieron las críticas formuladas por Néstor Kirchner a los Obispos argentinos, quienes a su vez denostaron la desigualdad social provocada por la política económica actual.

El diputado bonaerense, Luis D´Elía y el ministro de Seguridad, León Arslanián, no tuvieron pruritos a la hora de defender el discurso oficial.

El líder piquetero fustigó esta mañana a la Iglesia, al manifestar que detrás de la crítica carta firmada por obispos "hay una visión mezquina, egoísta, subalternizada por otros temas como la pelea por la educación sexual, despenalización del aborto. Los obispos no hacen más que aportar oscuridad en esto".

El legislador -católico practicante- recordó además que al Estado sigue aportando al funcionamiento de la Iglesia, inclusive con haberes muy altos, destinados a quienes no dudaron en dilapidar al Gobierno.

En ese sentido, D´Elía advirtió en declaraciones radiales que "le sale carísimo" a la Nación pagar los sueldos de los Obispos, los cuales "son equivalentes al de un juez federal". Además, manifestó que "está mal" que "se lleve el 25% de la educación publica. Hay colegios que no sólo cobra subvención sino que también aranceles; somos el único país del MERCOSUR que tiene esto en vigencia. Lo mismo pasa con Cáritas: cobra un 3.5 de gerenciamiento por aplicar un plan o programa social".

En tanto, D´Elía aseguró sentirse "orgulloso" por la "contundencia y la firmeza del presidente" al criticar a los Obispos, "ante tanta hipocresía de la Iglesia".

"Estos obispos fueron los besamanos de Menem y Duhalde y cómplices de la dictadura, salvo raras excepciones como De Nevares, Angelleli, Novak. El resto fue cómplice: para muestra, el último decreto de la dictadura, en 1983, fue regalar un chalé en Olivos a monseñor Aramburu", comentó.

Además, agregó que "nunca se hicieron cargo, multiplicaron sus errores con el menemato", y recordó a Monseñor Aguer, quien "no tuvo problemas en pagar la millonaria fianza a banqueros que dilapidaron a los ahorristas".

Por su parte, León Carlos Arslanián reconoció que "hubo documentos de la Iglesia donde planteaban la preocupación al régimen militar" por violaciones a los derechos humanos.

"Hubo de todo, en ese sentido, hubo curas que confesaban a torturadores pero también conocimos en un momento, aunque no tuvo difusión documentos de la Iglesia donde planteaban la preocupación al régimen militar sobre estas situaciones", sostuvo Arslanián.

No obstante insistió que "hubo de todo y claro que hubo una iglesia complaciente con eso, es indiscutible".

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