River ganó, cambió de actitud, y nos dio la razón

River le ganó 3 a 2 a Corinthians y ahora viajará a Brasil. No interesa en esta oportunidad debatir si fue bueno o malo el resultado conseguido de cara al desquite. Pero sí, para demostrar que las piernas responden si se cambia el "chip" mental

Venimos sosteniendo que River debía dejar de lamentarse y pelear con dientes apretados porque la ilusión del año "copero" terminado en "6" sigue latente.
El "Millo" llegaba al partido de anoche muy complicado. Prácticamente marginado de la lucha del Clausura, y con la inminente visita de un equipo brasileño. El Corinthians de Carlos Tévez.
Un equipo brasileño que fue magnificado, más que por sus propias condiciones, por la actualidad dubitativa de River.
Alguna vez le dije que el campeonato brasileño en sí, no es tan competitivo. Sí lo es el argentino. Pero siempre merecen respeto por eso de que son brasileros. Aunque, sabemos que de visitante no les gusta jugar, y menos con nosotros.
Pero no quiero dispersarme de la idea.
Hace tiempo que el entrenador de River se queja pública e internamente de sus males.
Algunos de ellos concretos, como las lesiones. También quedó demostrado que los entrenadores se quejan por cuestiones, que en otro momento los pueden favorecer. No hay que quejarse tanto de los arbitrajes cuando no se da lo que uno quiere porque todo gira como una rueda. ¿El gol que le anularon a Tévez?
El partido de anoche nos a dado muestras de algo. Justo lo que venimos manifestando. No importa en este caso contar como jugó River, o si el resultado es bueno o malo pensando en Brasil.
River corrió e hizo un desgaste enorme. Ejerció una presión tremenda en campo visitante al punto de no dejarlos pensar siquiera un segundo. Buenísimo...
¿Y el cansancio del que tanto se habló?.
Cuando la actitud mental es positiva todo cambia. Se podrá ganar, perder, o empatar. Pero se nota como se encaran los compromisos.
No se sabe que ocurrirá la semana que viene en Brasil. El resultado no es definitorio pero lo bueno que River ratificó su fortaleza y el espíritu localista, y ahora deberá dar una muestra de visitante en un terreno que le será bastante hostil. Su gran "karma" del momento.
Su gente quedó más  ilusionada. Piensa en el 2006 y sueña con el logro que River debe conseguir.
El Clausura se alejó y no le debe importar más, aunque lo gane Boca. River esta harto de ganar en lo doméstico. Debe ir por la gloria internacional.
Y por esas cosas del destino, a pesar de que Daniel Passarella dijo en un momento que prefería darle prioridad al Clausura antes que a la Libertadores, River se metió mentalmente de lleno en el torneo continental.  Y  esta bien que así sea.
No hay grandes "maravillas" en el mundo para decir que River no puede ganar la Copa con lo que tiene. ¿No ha visto los partidos de Europa?
River se enchufó.
Y más allá del desenlace que tenga, el partido con Corinthians demostró que todo pasa por la actitud.

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