Bolivia dispara la inflación en Brasil y la Argentina

La nacionalización del sector petrolero y gasífero de Bolivia va a golpear dolorosamente en Brasil y Argentina. Ambos estados ya están pensando cómo evitar este golpe.

MOSCÚ (Especial para Urgente24).- Los jefes de Estado de Brasil, Bolivia, Venezuela y la Argentina están hoy reunidos para discutir la nueva política energética de Bolivia y minimizar su incidencia sobre sus propias economías. Recordemos que el 1 de mayo el presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció la nacionalización del sector. De acuerdo con la nueva ley, todas las empresas transnacionales petroleras y gasíferas están obligadas a entregar inmediatamente bajo control de las autoridades bolivianas toda su producción. Además, el estado obtiene el paquete de control en las empresas mixtas, creadas por las compañías extranjeras.
Sin embargo los vecinos de Bolivia, consumidores de su gas (en primer lugar Brasil y Argentina) están más que preocupados por el crecimiento de los impuestos a la exportación de hidrocarburos. Si antes del decreto de Evo Morales Bolivia obtenía de la venta de materia prima energética el 18% de ganancia, ahora el estado recibe el 82% de la misma. Según los cálculos de Giuseppe Bacoccoli, especialista en investigaciones energéticas de la Universidad Federal de Río de Janeiro, la nueva política impositiva de Bolivia provocará un incremento en el precio del gas para Brasil de un 15% como mínimo.
En general, los precios de exportación sobre el petróleo y el gas bolivianos pueden crecer casi en un 60%, afirman inquietos en el gobierno argentino.
La dependencia de Brasil de los suministros de gas boliviano es enorme: Bolivia provee cerca de la mitad de todo el gas que consume el país. Y aunque la participación del gas en el consumo energético brasileño por ahora no es tan grande como en el petróleo y asciende apenas a cerca del 8%, el consumo de gas crece en un 17% por año. Los observadores apuntan que la exportación de gas natural líquido de Nigeria, Libia o Venezuela le saldrá a Brasilia casi dos veces más cara que el gas de Bolivia. Pero además el país tendrá que construir una terminal por un valor de u$s 400 millones para el licuado del gas.
El presidente brasileño Lula da Silva por ahora estima que podrá convencer a Evo Morales de mantener los precios por el gas para Brasil en el nivel anterior. "El valor del gas continuará siendo el mismo. Estoy convencido de ello", anunció Lula a los periodistas.
Pero los expertos no creen en las capacidades de lobby del presidente brasileño. "Los precios van a crecer de todas maneras. Incluso si se alcanza un acuerdo, es muy difícil que Brasil vaya a invertir en el sector gasífero de Bolivia, intentando diversificar los suministros. Pero otras fuentes nos saldrán más caras y para su asimilación se requerirá tiempo", considera Teresa Fernández, director de la consultora económica MB Associados.  Otros expertos señalan que el crecimiento de los precios sobre el gas boliviano conducirá al aumento de las tarifas de transporte, lo que conformará un esencial aporte al crecimiento de los precios al consumidor.
Los directivos de la empresa estatal brasileña Petrobras ya anunciaron que van a revisar su política inversora con respecto a Bolivia. "Evidentemente no corresponde esperar en la actualidad ningún beneficio económico de inversiones complementarias en Bolivia", declaró el director ejecutivo de Petrobras José Sergio Gabriele.
Al día de hoy la quinta parte de las reservas de Petrobras proviene de Bolivia. Además, la empresa es reconocida como el productor más importante de petróleo y gas bolivianos, correspondiéndole más del 57% de la extracción de gas y el 40% del petróleo.
Las autoridades argentinas, como las brasileñas, evaluaron sin admiración la perspectiva del crecimiento del valor del gas boliviano. Sin embargo, por ahora no hay renunciado a la colaboración con Evo Morales. Es más, Argentina planifica invertir en el sector gasífero de Bolivia: en el gobierno calculan que en dos años podrán elevar la exportación de cinco millones de metros cúbicos al día hasta 25 millones, lo que en un 20% cubrirá las necesidades de la Argentina en gas.
"Los suministros de gas de Bolivia para la Argentina son críticos, ya que sus propias reservas se reducen y el consumo de gas crece", dice el titular de la consultora Mezzadri & Asociados, señor Mezzadri.
Sin embargo, el gobierno argentino por todos los medios a su alcance intenta evitar el crecimiento de la inflación, que puede ser provocada por el aumento de los precios sobre el gas. Esto está vinculado con el hecho de que las autoridades monetarias del país recién lograron contener la inflación (hace tras años ella ascendía al 32%, en tanto que ahora el crecimiento de los precios no supera el 11%), y la nueva espiral inflacionaria es totalmente ajena a sus intereses. "El gobierno puede marchar a subsidiar la diferencia en precios. Con ello intentará evitar un abrupto salto inflacionario", afirma el economista Dardo Ferrer, de la Fundación Mercado.

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