Gasoil, armas y alimentos: Garré planifica cómo comprar a Rusia

A los rusos no les basta con Chávez, y buscan a la Argentina como cliente. Ya mandaron un emisario a ofrecerle armamento al gobierno de Néstor Kirchner que prometió reflexionar sobre la propuesta. Tras la necesidad de pagarles US$45 millones para obtener 75.000 metros cúbicos de gasoil, a través de la estatal Enarsa, esta vez, el gobierno K especularía con intercambiar productos alimenticios por las armas rusas.

La reunión fue el miércoles entre el embajador de Rusia en Argentina, Yuri Korchagin, y la ministra de Defensa (antes embajadora argentina en Caracas), Nilda Garré.
El funcionario ruso le manifestó su interés en ofrecer a la Argentina las novedades de su industria militar, ya que nunca hemos sido sus clientes tras más de un siglo de relaciones diplomáticas.
Rusia ya cuenta con clientes acaudalados como Venezuela, seguidos de otros de la región como Perú, Brasil, México, Colombia y Uruguay.
Garré le explicó sus motivos: " Argentina ha mantenido en los últimos años un bajo nivel de compra de armamentos debido, entre otras causas, a la situación económica del país".
Sin embargo, según publicaba el 4 de agosto, el sitio Descifrado.com, prometió estudiar la propuesta rusa, por si acaso.
Lo que quiso decir la ministra es que el país no tiene mucho dinero para gastar en armas. De hecho, la semana pasada U24 publicaba que debido a la falta de gas natural, el Gobierno de Néstor Kirchner, a través de la estatal Enarsa, y Cammesa, compró a los propios rusos cerca de 75.000 metros cúbicos de gasoil, por lo cual el estado debía de desembolsar US$45 millones.
Pero, a palabras de la ministra, la Argentina sí tiene necesidades de reequiparse, por lo que pueden escucharse propuestas.
De ahí que empezó a plantearse la posibilidad de hacer un intercambio de armas por productos alimenticios. Según publica hoy el diario La Nación, esta posibilidad empezó a plantearse en el primer encuentro entre Garré y Korchagin, el 18 de enero pasado.
En aquella reunión, el embajador ruso habló de esa posibilidad, después de hacer una detallada presentación sobre las capacidades de producción militar de su país. Desde entonces, el contacto quedó firme, según el matutino.
El 7 de abril, una delegación rusa de primer nivel llegó al Edificio Libertador para retomar el diálogo. Por entonces, el primer ministro ruso, Mikhall Fradkov visitó el país y se reunió con Néstor Kirchner. En aquella comitiva también participó Alexsander Fomin, viceministro de Cooperación Técnico-Militar, que tuvo un encuentro con Garré.
Según el matutino, en la carpeta que dejó en el despacho de la ministra figuró la posibilidad de producir en la Argentina helicópteros, patrulleras de alta mar y blindados con tecnología rusa, siendo los helicópteros, el punto que más interesó a las autoridades argentinas.
Pero, por la ley de obtención de medios para la defensa, que el Poder Ejecutivo impulsó este año, las próximas compras militares deben hacerse, casi exclusivamente, mediante sistemas de compensaciones que permitan la transferencia de tecnología a la Argentina o de alguna otra utilidad adicional, como puede ser la instalación de talleres que permitan el uso de mano de obra local.
La propuesta acercada al Ministerio de Defensa por el embajador ruso busca cumplir con esos parámetros.
Sin embargo, el Congreso todavía no sancionó esa ley. Es más: la iniciativa tuvo media sanción el año pasado en la Cámara de Diputados, pero al no tratarla el Senado el proyecto caducó el 28 de febrero último.
De hecho, el empantanamiento de la ley obedecería a una puja entre los ministerios de Defensa y de Planificación Federal.

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