Inseguridad: La tragedia de Juan Marcelo en una estación del Metropolitano

Para robarle un teléfono celular lo arrojaron a las vías del tren: un relato espeluznante de la Argentina 2006.

Juan Marcelo tenía 19 años y vivía en la humilde casilla de la calle Carlos Ortiz, entre Fray Luis Beltrán y Marconi, frente a un amplio terreno en el que una plaza le ganó el lugar al basural.
Trabajaba de albañil junto a 1 de sus 4 hermanos y su padre, Juan Carlos. Había terminado el secundario y había estudiado computación. Hacía más de 2 años que estaba de novio con Sheila, a quien casi siempre acompañaba en tren a su casa.
En la noche del domingo, Juan Marcelo caminó junto a su novia Sheila las 15 cuadras que separan a su casa de la estación Libertad, partido de Merlo. Mientras aguardaban el tren a Merlo Gómez, 5 ladrones intentó robarle el celular, la campera y las zapatillas.
Uno de ellos mostró un arma y le exigió el celular. Pero cuando quisieron sacarle las campera y las zapatillas, Juan Marcelo forcejeó con ellos hasta que un malhechor que estaba armado le disparó en una pierna.
Juan Marcelo empujó a su novia y le gritó: "Corré".
Eran las 20:07, los ladrones lo empujaron a las vías y Juan Marcelo murió arrollado por el tren rumbo a Merlo Gómez.
Los ladrones escaparon corriendo con el celular de la víctima ante la mirada evasiva de la gente que estaba en el andén.
Apenas 5 testigos declararon en la causa:
> Sheila,
> el guarda del tren,
> el maquinista y su ayudante, y
> el auxiliar de la estación que fue quien avisó a la Policía.
Ningún pasajero quiso colaborar.
En la estación no había policías.
"La estación Libertad no está considerada como peligrosa, así que sólo hay guardias rotativas", según Fernando Jantus, vocero del Metropolitano, empresa concesionaria de la línea Belgrano Sur,.
Tampoco hay cámaras de vigilancia, ni buena iluminación. Ni siquiera bancos cómodos, el baño es muy sucio y el resto es la pequeña e inexpugnable ventanilla de venta de boletos. El andén de la estación es bajo y mucha gente camina por las vías.
El papá de ella fue el que le dio la terrible noticia a los Cruz. "Primero nos dijo que había sido un accidente, pero después supimos que le habían pegado un tiro y lo tiraron abajo del tren", dijo la mamá de Juan Marcelo.
La fiscal de Morón, Karina Iuzzolino, titular de la UFI 5, cuenta con pocos testimonios y declaraciones no muy descriptivas.
Además de la comisaría 4ª de Merlo, investiga el crimen la DDI de Morón. Y la Policía Científica perita una vaina de calibre 22, del arma con que le dispararon al chico, para ver si de ahí puede surgir algún dato más que los lleve a la banda.
Por ahora sólo se sabe que serían jóvenes de entre 18 y 20 años, según declaró la novia de la víctima.

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