CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) "Cada vez que se limitan privilegios, se afectan intereses. Antes, el correctivo era el golpe militar. Ahora, la Justicia es la prolongación de la política por otros medios; se quiere gobernar con las sentencias. Un ejemplo es la confrontación estratégica contra la Ley de Medios", aseguró el senador Marcelo Fuentes en una entrevista con el diario 'La Nación'.
EL GOLPE DE FUENTES
El senador K confiesa que la Reforma Judicial fue diseñada para ganarle a 'Clarín'
La diputada opositora Elisa Carrió le ganó de mano con el discurso al acusar al gobierno de Cristina Fernández de practicar un "golpismo con la intención de suprimir las instituciones en la misma línea que el golpe de 1976". El kirchnerismo se mostró escandalizado por esa declaración. Pero el senador K Marcelo Fuentes le alteró la intepretación: "antes el correctivo era un golpe militar; ahora quieren gobernar con fallos". ¿De quién habla? Nada menos que de Clarín. Según admitió, la reforma surge por el conflicto por la Ley de Medios.
El legislador kirchnerista defendió el paquete de leyes que envió la Presidente al Congreso para reformar el Poder Judicial y admitió que está estrechamente ligado con la disputa abierta con el Grupo Clarín por la aplicación de la totalidad de la Ley de Medios.
“Articularon alianzas esperando una derrota electoral. Como no se produjo, vino el plan B: prolongar el conflicto judicial a la espera de un mejor escenario. Han desplazado la resolución de los conflictos políticos del Congreso y las elecciones a los tribunales”, argumentó.
Fuentes resaltó que además del caso Clarín, hay medidas cautelares en el fuero previsional y “ amenazas de que con cuatro sentencias se voltea a un gobierno ” que reflejan la idea de que la Justicia quiere gobernar a través de sus decisiones.
El senador trató de explicar el cambio de posición de Cristina Fernández, quien en 2005 defendió como senadora la reducción del Consejo de la Magistratura y hoy como Presidente envió una ley que amplía su composición a través del voto popular. Según dijo, aquella reforma no dio el equilibrio que se esperaba “en contra del sector corporativo de los jueces” y apuntó directamente a la UCR por “no generar una agenda autónoma” a los intereses de algunos grupos económicos.
Tres de los seis proyectos que envió Cristina al Congreso quedaron en condiciones de ser aprobados en el Senado la próxima semana, luego de que el oficialismo firmara los correspondientes dictámenes en soledad por la decisión de los bloques opositores de no dar el debate.
Ayer, la diputada nacional opositoria Elisa Carrió escandalizó al kirchnerismo cristinista con sus dichos: "Técnicamente estamos en presencia de un golpe de Estado. Esta es la verdad, que es es dura. Vamos a hacer denuncias por golpistas, en la sesión, en la Organización de Estados Americanos, la Organización de las Naciones Unidas, y la Justicia argentina", dijo. "El Gobierno lo hace con la intención de suprimir las instituciones en la misma línea que el golpe de 1976".
Dijo que Cristina "tiene miedo a ir presa", por lo tanto, "necesita jueces dependientes para garantizar su impunidad, por todos los delitos cometidos por ella y su ex esposo (Néstor Kirchner)".
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