LEYES CLAVE

Cambiemos hace un arriesgado malabarismo de negociaciones en el Congreso

El Congreso de la Nación entra en una vorágine inédita con varios proyectos de fuerte impacto: reforma tributaria, laboral, previsional, el Presupuesto 2018, la reforma del Ministerio Público Fiscal, etc. Cambiemos se está embarcando en múltiples negociaciones simultáneas y cruzadas a las que se agregan además las disputas por el manejo de las comisiones tras el recambio legislativo. Todo junto, mezclado y en poco tiempo.

El Gobierno nacional embarcó a sus espadas en el Congreso de la Nación en una negociación múltiple y simultánea por varias leyes con fuerte impacto con la disputa por las comisiones en paralelo y el recambio legislativo del 10 de diciembre. A eso se suma que la Administración Macri reclama que las principales reformas anunciadas en materia tributaria y laboral sean sancionadas antes de fin de año, cuando también tiene que estar el Presupuesto 2018. Hay un poco más de margen de tiempo con el llamado a sesiones extraordinarias, pero el ritmo será frenético y riesgoso.

Este lunes (13/11) tiene que ingresar al parlamento la reforma impositiva que Macri espera que se apruebe en el período de extraordinarias que se prolongará hasta fines de febrero de 2018. Eso le daría margen para las negociaciones entre diputados y senadores.

El principal punto de negociación de esa norma será ahora el tributo de 17% sobre las bebidas azucaradas. Allí alzarán la voz los legisladores que representan los intereses de provincias afectadas como Tucumán, Entre Ríos y Corrientes. Pero también hay enojo entre los estados provinciales que tienen embotelladoras como Capital Federal, Buenos Aires, Córdoba, Mendoza y Santa Fe.

Otro sector afectado es e informático por la eliminación del impuesto interno a la importación de celulares, monitores y artículos de computación. Aunque sería gradual, el tema afecta especialmente a Tierra del Fuego.

En cuanto a la Renta Financiera, Cambiemos necesita convencer al Frente Renovador de Sergio Massa un sector clave por su peso parlamentario pero que después del 10 de diciembre perderá gravitación, dependiendo además de cómo se reconfigure el arco peronista.

El Gobierno también enviará a Diputados la nueva Ley de Mercado de Capitales. También tiene órdenes de tratarse rápidamente, por eso se enviará a comisión pasado mañana para tener media sanción el miércoles próximo. Para este caso ya estarían los votos necesarios.

La reforma laboral tiene “fecha límite” para presentarse el lunes 20, según dicen en el Ministerio de Trabajo. Antes, Triaca recibirá a una delegación de la CGT para arribar a un consenso sobre la letra de la norma y resolver los puntos en desacuerdo.

Habría una preocupación conjunta del Gobierno, sindicalistas y legisladores peronistas: que el debate de la reforma laboral ocurre con Cristina Kirchner en su banca del Senado. Los peronistas no quieren que la exmandataria aproveche esa discusión para ponerlos en evidencia.

Triaca se esforzará por convencer a la CGT porque sabe que es la llave para aprobar la reforma después de que el presidente del bloque del PJ, Miguel Pichetto, condicionara la aprobación al visto bueno de la central obrera.

A todo esto se suman varios temas en agenda que quedaron pendientes y que Cambiemos quiere ‘sacar’ antes del 30 de noviembre como los proyectos de alquileres, de Compre Argentino, de Marina Mercante, de Defensa de la Competencia, y de reforma a la Ley de Ministerio Público.

Si bien el gobierno ya anticipó que convocará a sesiones extraordinarias para debatir la movilidad jubilatoria, el presupuesto y las reformas laboral y tributaria, el oficialismo elaboró una nutrida agenda de comisiones para tratar de despachar los proyectos que quedaron sin dictamen, con la intención de habilitarlos para debatir en el recinto.

Esta es la última semana que tiene la cámara baja para emitir dictámenes de comisión, ya que el plazo para la firma de despachos finaliza el 20 de este mes.

Para Cambiemos, uno de los proyectos centrales es la reforma del Ministerio Público -que será aprobado por el Senado el 22 de este mes- y aspira a poder ser votado en la sesión del 29, ya que el plazo para emitir despacho vence el lunes de la semana próxima.

Otra iniciativa central es la modificación de la Ley de Defensa de la Competencia, que el oficialismo quiere acordar con el massismo y el justicialismo en base a una iniciativa del jefe del bloque Mario Negri y de Elisa Carrio, con el fin de emitir este martes dictamen en un plenario conjunto de comisiones.

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