NO APTO PARA CLAUSTROFÓBICOS

Lejos de los films, la incómoda vida dentro de un submarino

"Mucha gente dice que solían tener 'sueños de ataúd' en sus literas", narra el Teniente Comandante Charlie Neve. La vida dentro de un submarino no se parece en nada a lo que pensamos y más si consideramos que esto acarrea un amplio proceso de adaptación, vivir entre incomodidades y compartir hasta el más mínimo metro cuadrado. Lejos de lo que venden los films de ficción, en un submarino pueden vivir hasta 160 personas sumando el amasijo de cables, tuberías, válvulas, motores y otros equipos propios de la nave.

No apto para claustrofóbicos, así es la vida en un submarino, esas metálicas y avanzadas máquinas con la que el hombre desafió los paradigmas físicos de la humanidad, al estar sumergidos hasta por 100 días.

En un submarino pueden llegar a convivir hasta unas 160 personas, además del amasijo de cables, tuberías, válvulas, motores y otros equipos, que a su vez restan espacio.

El submarinista, que vive y además trabaja en estas naves, debe aprender a compartir sus escasos metros cuadrados con mucha más gente que quienes no vivimos bajo el agua.

Normalmente sólo hacen unos tres viajes largos en el mar en un período de dos años, tiempo suficiente para sufrir los efectos de haber vivido durante un gran número de días en espacios muy limitados, como soñar que se está dentro de un ataúd.

Además de lo "ajustado" de dormir en un “ataúd”, algunos submarinistas deben practicar lo que se conoce como "litera-caliente". Que no es más que el calor corporal impregnado en las pequeñas camas, luego de un relevo de turno.

Y como si esa situación no fuera lo suficientemente incómoda, hay otros retos en cuestión de espacio que los submarinistas también deben afrontar. Familiares quizás para quienes comparten un monoambiente.

  • Usos duales: Una de las normas de oro es que, en la medida de lo posible, todo debe tener un uso dual. Por ejemplo: los tubos de misiles cumplen la misión de refrigerador, manteniendo frías las latas de cerveza y los baños pueden utilizarse para almacenar equipos de limpieza.
  • Vivienda y lugar de trabajo: Tan sólo una fina cortina separa a quienes duermen de quienes tienen que trabajar. Las literas de tres alturas se incrustan en las paredes de los corredores y el espacio libre se limita a las áreas principales del submarino y a los equipos técnicos.
  • Ante todo, organización: Los espacios reducidos se vuelven mucho más pequeños cuando se deja todo tirado, el nivel de organización y pulcritud es altamente necesario.


Submarino tipo XXI:

Submarino ara

 

Submarinos Clase Typhoon

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