TENSIÓN CON EL GOBIERNO

El pueblo Pataxo lucha por no desaparecer

La demarcación de tierras indígenas en Brasil ha encendido la polémica y confrontado al Gobierno de Michel Temer.Indígenas de varias etnias hicieron acto de protesta esta mañana 23/11 contra el parecer de la Abogacía General de la Unión (AGU), aprobado por el Presidente Temer, que aplica el marco temporal para demarcación de tierras indígenas.

La medida es criticada por organizaciones que defienden los derechos de los indios, incluyendo integrantes del Ministerio Público Federal (MPF). Temer aprobó la iniciativa en un momento en que buscaba consolidar votos de la bancada ruralista para deshacerse de la denuncia por corrupción pasiva presentada al STF. 
 
Los indígenas argumentan que el 'marco temporal' inviabiliza la demarcación de tierras que aún no han tenido sus procesos finalizados. El dictamen de la AGU extiende la tesis para toda administración pública federal.
 
 
En el sur del Estado de Bahía, en Brasil, existe una reserva de 54.100 hectáreas de selva virgen para la etnia de los indios pataxós, una de las 167 que aún sobreviven en el pais. Sin embargo, el 96,11% de dicha selva aparece vendida a colonos particulares, entre ellos dos funcionarios del Estado. La lucha de este grupo de indigenas empezó en el año 2000. 
Los pataxós llevan años denunciado el hecho de que cientos de colonos viven en su reserva, afirman que ellos compraron aquellas tierras al Estado brasileño.La reserva de los pataxós se hizo famosa internacionalmente cuando, en abril de 1997, el indio Galdino dos Santos, uno de los líderes de la comunidad , fue quemado vivo en plena calle, durante la noche, por un grupo de jóvenes de clase media en Brasilia. 
 
 
De hecho, la Fundación Nacional del Indio (FUNAI) lleva luchando en vano en los tribunales desde 1982 para invalidar los títulos de propiedad de los cientos de colonos que se han adueñado de la reserva indígena. La FUNAI nunca ha conseguido que la causa llegase a ser juzgada por el Tribunal Supremo Federal.
 
Con sus vestimentas típicas, tocados con plumas y algunos armados con arcos y flechas, los indios no encontraron resistencia por parte de la guardia presidencial y se plantaron en la puerta principal de la sede del Gobierno, que mantuvieron bloqueada durante alrededor de seis horas.
 
El proyecto propone que esa responsabilidad, que hasta ahora es de la estatal Fundación Nacional del Indio (Funai), sea transferida al Congreso, en el que existen grupos parlamentarios que representan precisamente los intereses de los empresarios del campo.
 
Por esa razón, los indios afirman que esa modificación les daría más poder a latifundistas y empresas mineras, madereras y de otras áreas que operan sobre todo en la Amazonía, donde se sitúa la mayor parte de las reservas indígenas del país.
 
La población de Brasil incluye 900.000 indígenas, de los cuales 517.000 viven en tierras reconocidas oficialmente como tierras indígenas. Hacia el 13 por ciento del territorio del país está reservado como territorio indígena —98,5 por ciento de ese territorio está en el Amazonas—.
 
 

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