Así lo denunció el Observatorio de la Libertad Religiosa de la Universidad Adventista Del Plata, pertenenciente a la Iglesia Adventista del Séptimo Día:
SEMANA SANTA EN MÉXICO
Teléfono para Francisco: Católicos corruptos destrozan casas de fieles
La corrupción en México no sólo penetra en la esfera política y social sino también en la religiosa. Al menos, eso denuncia la comunidad Adventista del Séptimo Día de San Miguel Chiptip, Chiapas, luego de que 50 personas católicas destrozaran las viviendas de tres familias que se negaran a pagar una cuota elevada para celebrar Semana Santa.
"En San Miguel Chiptip, Chiapas, cerca de 50 personas destrozaron las viviendas de tres familias pertenecientes a la Iglesia Adventista.
El conflicto se salió de control luego de que la comunidad católica de la localidad comenzara a exigir una cuota bastante elevada para la celebración de Semana Santa.
Los agresores usaron mazas y otras herramientas para derribar las paredes de block de las tres viviendas y el material cayó sobre los muebles que no habían retirado las familias.
Las familias adventistas huyeron de sus hogares por temor a las amenazas de muerte de las que fueron objeto en las últimas horas, dejando a la intemperie todas sus pertenencias de valor y lo único con lo que cuentan para subsistir.
Según denunció la Coordinación de Organizaciones Cristianas (COC), las autoridades 'han mantenido en zozobra a los adventistas; han fortalecido las diferencias entre la población durante cuatro años aún con el conocimiento de las autoridades actuales tanto municipales y estatales, así como también de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH)'.
De hecho, el día anterior a la agresión, las familias se presentaron en la alcaldía, con el fin de exponer los problemas, pero ninguna autoridad les dio respuesta y el alcalde Gerardo Moreno Aguilar no quiso instrumentar medidas precautorias para preservar la integridad de los miembros de la minoría religiosa".
Según denuncian vecinos locales, "no son sólo Adventistas los que están bajo persecución religiosa. El año pasado, al menos 850 evangélicos sufrieron persecución religiosa en Chiapas.
Lamentablemente, las constantes violaciones a los derechos humanos de los cristianos evangélicos han pasado desapercibidas durante muchos años por las autoridades locales.
En México hay cuatro Estados con más intolerancia religiosa, con 11 municipios considerados “focos rojos”, con 850 evangélicos afectados.
Los cristianos han sido agredidos y obligados a dar cooperación para las fiestas religiosas católicas, así como se ha llegado al extremo de expulsarlos de la comunidad donde habitan. Los rituales de los festivales a menudo incluyen el uso de licor o de drogas, lo que motiva a los evangélicos a rehusarse a participar, por lo que de ahí se desencadena una serie de agresiones contra el pueblo evangélico como la suspensión de los servicios de agua potable y luz eléctrica".