La cosecha argentina de soja del ciclo 2017/18 será de 37,6 millones de toneladas, muy lejos de los 55 millones obtenidos en la temporada anterior, debido a fuertes pérdidas causadas por una extensa sequía.
PÉRDIDAS ALCANZAN EL 23%
Cosecha de soja caerá a 38 millones de toneladas por la sequía
La cosecha argentina de soja del ciclo 2017/18 será de 37,6 millones de toneladas, muy lejos de los 55 millones obtenidos en la temporada anterior, debido a fuertes pérdidas causadas por una extensa sequía. El ministro Luis Miguel Etchevehere la calificó como la peor sequía en 50 años y la primera estimación oficial del Ministerio de Agroindustria le dio la razón.
19 de abril de 2018 - 21:29
En una conferencia de prensa para difundir las primeras estimaciones oficiales para la temporada 2017/18, el ministro de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, dijo que la cosecha argentina de maíz -que también fue golpeada por meses de sequía- será de 42 millones de toneladas, desde los 49,5 millones recolectados el año pasado. Así las cosas, la cosecha de soja cerró en esta campaña en 37,6 millones de toneladas sufrió una merma de 31,6% respecto al ciclo anterior y de 29% frente a lo proyectado al inicio de la siembra.
En cuanto al maíz, con una cosecha de 42 millones de toneladas, la caída es de 15,2% si se compara con la campaña pasada y 18% por debajo de lo previsto al comienzo de la siembra.
Argentina es el tercer exportador mundial de soja y maíz y el principal proveedor global de harina y aceite de soja.
En divisas por menores exportaciones y gracias a que hubo un alza de los precios internacionales, precisamente por la merma argentina, las pérdidas se estiman entre 3.000 a US$ 3.500 millones.
Etchevehere destacó lo que significan los encadenamientos productivos del campo y cómo repercute esta baja de la cosecha en viajes de camión, acopios y plantas que quedan con capacidad productiva de sobra, De este modo estima que el daño equivale al 1% del PBI, unos US$ 5.500 millones. Es la cifra que también manejan en el ministerio de Hacienda. “Fue una sequía muy fuerte y el período con menos lluvias en cincuenta años”, añadió el subsecretario de Agricultura, Luis Urriza.
La provincia más afectada es Entre Ríos que ya tiene declarada la emergencia agropecuaria. La emergencia le permite diferimientos impositivos y crediticios.