LULA DA SILVA, GRAN ELECTOR

Confirmado: Haddad se acerca a Bolsonaro

El diario Folha de S. Paulo realizó un notable aporte al debate preelectoral brasilero al editorializar acerca de la prédica antidemocrática del candidato a vicepresidente, general Hamilton Mourão, quien acompaña a Jair Bolsonaro, quien "alimenta la paranoia, siembra incredulidad en el proceso democrático y, de más inmediato, abre el camino para que no se aceptar un resultado desfavorable a los comicios". El enfoque es muy importante: ingresando a su tramo final, la campaña electoral brasilera ya no es PT vs. antiPT, ni derecha vs. izquierda sino antidemocráticos vs. democráticos ("señales alarmantes de rechazo por las reglas del juego democrático", encuentra Folha en el proselitismo de Bolsonaro).

Luego de encuestar a 2.506 personas en todo Brasil entre los 12/09 y 18/09, la consultora Ibope confirmó los datos ya anticipados por Urgente24 acerca del escenario de 2da. vuelta entre Jair Bolsonaro y Fernando Haddad en las elecciones de octubre.

Jair Bolsonaro (PSL) mantiene el liderazgo, con 28% (fue muy oportuno el cuchillazo que recibió Bolsonaro porque le permitió mayor visibilidad y crecer algunos puntos). Pero ya aparece claramente como N°2 el candidato del PT, Fernando Haddad, con 20%: Haddad creció 11 puntos en relación a la última encuesta.

Ibope realizó el trabajo por encargo de la Rede Globo y el diario O Estado de São Paulo. El margen de error es de 2 puntos porcentuales y el número de registro en el Tribunal Superior Electoral es BR-09678/2018.

Ciro Gomes (PDT) es quien marcha N°3, con el 11%.

Detrás, Geraldo Alckmin (PSDB), con 7%; y Marina Silva (Red), con 6%, se encuentran empatados en el margen de error.

La encuesta de Ibope confirma que Fernando Haddad gana envergadura presidencial como abanderado del PT, con Luiz Inácio Lula da Silva preso.

Si Haddad mantuviera su velocidad de crecimiento, convenciendo al electorado que duda sobre su preferencia, en la próxima investigación de Ibope se ubicará en un empate técnico con Bolsonaro.

Un dato a favor de Haddad: el rechazo total que genera en el electorado es de 29% pero el de Bolsonaro es 42%.

Haddad es candidato desde hace muchos menos tiempo que Bolsonaro. Y Haddad gana fuerza en un sector dominante cuantitativamente: hombres y mujeres de bajos ingresos, con memoria de cómo vivían en días de Lula da Silva y Dilma Rousseff.

Entre quienes ganan 1 salario mínimo mensual, Haddad ya está venciendo a Bolsonaro 54% a 24%, a escala nacional.

Esta situación está provocando que Bolsonaro cambie su apelación, y afirme que es necesario ganar en 1ra. vuelta, una hipótesis improbable por el elevado rechazo que le pone tope a su candidatura.

Frente fiscal

Más allá de Ibope, muy importante una reflexión del diario Correio Braziliense:

"El desequilibrio de las cuentas públicas, que compromete la capacidad del gobierno de invertir y desalentar proyectos del sector privado, es uno de los principales problemas que tendrá que enfrentarse el próximo gobierno para recuperar la salud de la economía.

Sin embargo, ninguno de los programas presentados por los candidatos a la Presidencia de la República detalla las medidas que deben tomarse para alcanzar el ajuste fiscal, considerado inevitable por la gran mayoría de los economistas.

De acuerdo con analistas, lo que más hay en las propuestas de los candidatos son cuentas que no cierran. Además, el cuadro es tan mal que será imposible poner en cero el déficit primario de la Unión en uno o dos años, como algunos de ellos prometen, incluso con un aumento de tributos.

"No hay un aumento de impuestos para tener en cuenta el ajuste fiscal necesario para equilibrar las cuentas públicas", dijo Marcos Lisboa, presidente de Insper, que clasifica los programas económicos de los candidatos entre "inconsistente y contradictorios".

"La mayoría no toca, de hecho, el problema fiscal. Los candidatos juegan a halagar a la audiencia, presentando medidas de pequeño impacto, como el impuesto sobre grandes fortunas, e ignoran el tamaño del problema, que es grave y, si no se aborda, la crisis va a volver", dijo Lisboa.

Para el economista, serán necesarios amplios recortes de gastos y reformas, como la previsional, para que la economía recupere la capacidad de crecer.

Bráulio Borges, economista de LCA Consultores, también cree que el próximo gobierno tendrá dificultades para un déficit primario 0%, aunque la carga tributaria sea elevada.
"Los candidatos no detallan cómo pretenden hacer el ajuste fiscal para no convertirse en vitrina antes de la 1ra. vuelta. No muestran que van a aumentar impuestos, pero eso será inevitable", subrayó.

Para el economista Samuel Pessoa, investigador del Instituto Brasileño de Economía de la Fundación Getulio Vargas (Ibre-FGV), quien dice que no aumentará impuestos está mintiendo, y quien ignora el problema fiscal cometerá un desastre en caso de victoria.

"Cortar beneficios tributarios, como algunos admiten, equivale a aumentar tributos. Pero, es muy difícil para los candidatos detallar sus propuestas, porque el ajuste fiscal lesiona. Es necesario tener recortes de gasto y aumento de tributación. "No tiene salida", sentenció.

Los expertos observan que, en los programas de los partidos de derecha, de centro y de centro-izquierda, hay consenso sobre la necesidad del ajuste, que pasa inevitablemente por los gastos obligatorios, como Previsión y nómina, las que más pesan en el presupuesto. Sin embargo, faltan detalles sobre cómo hacer el ajuste. Las leyendas de la izquierda, por su parte, ignoran el problema fiscal y adoptan el discurso de que el gobierno necesita gastar más, descartando la necesidad de reformas.

Esto viene generando preocupación en el mercado. Los inversores han reaccionado positivamente al liderazgo de Jair Bolsonaro (PSL) en las encuestas, a pesar de las ideas polémicas del candidato, porque consideran que Fernando Haddad (PT), que viene subiendo en los sondeos, representa un riesgo para la economía. Haddad defiende un programa estatizante e intervencionista, e indica que pretende interferir en la autonomía del Banco Central, entre otras medidas.

La gravedad del desequilibrio de las cuentas públicas puede ser constatada en los datos del balance de la Unión de 2017 levantados por la Institución Fiscal Independiente (IFI), del Senado Federal. (...) En cualquier lugar del planeta, una empresa que presentara números como éste estaría en situación de quiebra. La Unión registra un déficit primario desde 2014 y, por las estimaciones de la IFI, debe continuar en rojo al menos hasta 2022.

No obstante, la deuda pública llegó al 77% del Producto Interior Bruto (PIB) en junio, según datos del Banco Central. Por la metodología utilizada por el Fondo Monetario Internacional (FMI), sin embargo, la proporción es del 85,5% - contra el 48% de la media de los países emergentes.

"Si la deuda alcanza el 90% o el 100% del PIB, el país entrará en una crisis severa y la inflación regresará, debido a que el gobierno tendrá que imprimir dinero para cubrir los roles que están ganando", dijo Marcos Lisboa.

Por las cuentas de Samuel Pessoa, de la FGV, sólo para poner en 0 el déficit primario de la Unión y estabilizar la deuda será necesario un ajuste del 4% del PIB (...). Para él, el ajuste tendría que pasar por congelación de salarios, una nueva regla del salario mínimo y la reducción de las deserciones tributarias.

Los cálculos de Carlos Pedroso, economista senior del Banco MUFG Brasil, son más preocupantes. "Para tener estabilidad de la deuda pública, es necesario producir un superávit primario del 6%, y por lo tanto una diferencia de 8% a 9% del PIB es el tamaño del ajuste que hay que hacer", dijo. (...)".

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