Casino: "Agotadas las negociaciones con un grupo sindical"

CASINO DE BUENOS AIRES NO TOLERARA De acuerdo al comunicado difundido hoy por la empresa Casino de Buenos Aires, de Cirsa, la empresa se considera objeto de "la extosión de un grupo sindical minoritario". El texto:

"La empresa Casino Buenos Aires considera "agotadas" las instancias de negociación que se habían iniciado con un grupo disidente del gremio ALEARA –a las que luego se sumó en el ámbito laboral la cúpula del sindicato- por considerar que "este sector minoritario de trabajadores no busca mejores condiciones laborales, sino que apunta directamente al desprestigio de la empresa, a la extorsión y al ejercicio de prácticas ilegales e ilegítimas".

En consecuencia, la operadora de casino de Puerto Madero advirtió que no le "temblara el pulso" y actuará "mediante el despido justificado de todos aquellos trabajadores que, como han hecho hasta el momento, amenacen a sus compañeros, dañen las instalaciones de la empresa o agredan física o moralmente a alguna de sus autoridades", en nombre de "una supuesta causa justa, que no es más que un conflicto artificial armado con fines políticos".

Asimismo, la compañía ratificó que continuará denunciando ante la Justicia Federal a los autores de hechos vandálicos y aseguró que no permitirá ni admitirá que "se pongan en juego 25 años de trayectoria en el mundo ni la fuente de trabajo de 2500 empleados cuyas familias viven de los ingresos del Casino".

"Adoptaremos todas las medidas legales que correspondan para salvaguardar a la empresa, a los trabajadores honestos y los clientes, ya que no nos prestaremos a los aprietes ni a las prácticas de un grupo que desprecia y no acata las leyes vigentes ", dijo un calificado vocero de Casino de Buenos Aires.

El Casino recordó que el 10 de enero último el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria por el despido de cuatro trabajadores, lo cual fue acatado por la empresa –que reincorporó a los empleados que habían sido cesanteados con justa causa- en virtud de buena convivencia con el personal y por respeto a la legislación vigente.

Finalmente, en este conflicto la empresa considera que "no posible una negociación oficial con un grupo que esconde en la manga una clara intencionalidad política y que tiene atemorizado al resto del personal con prácticas violentas".

Buenos Aires, 11 de febrero de 2006".

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