Busti hace gestiones para que no 'desaparezca' una ciudad que vive de Swift

Al gobernador entrerriano Jorge Busti se le van complicando los días. A la negativa de Tabaré sobre un acuerdo realizado en Chile con Néstor Kirchner, se le suma que la Asamblea Ciudadana Ambiental de Galeguaychú ratificó su decisión de mantener el corte de la ruta 136 que conecta esta ciudad con la uruguaya Fray Bentos, "por tiempo indeterminado" en rechazo a la construcción de dos plantas de producción de celulosa sobre el río Uruguay. Y parece que las gestiones de Kirchner no solo no detienen el desborde en la provincia, sino que además, la hunden. Hoy, Busti tendrá que recibir a Eduardo Jourdán, intendente de una ciudad entrerriana cuya principal actividad económica es la empresa Swift, terriblemente afectada por la decisión K de suspender las exportaciones de la carne. ¿Como decirle a la población de San José que deben esperar un año?

"Si la baja de la carne no se consolidara, podría prorrogarse por otros 180 días la suspensión de las exportaciones", dijo la ministra de Economía, Felisa Miceli, al ser consultada sobre los apenas 2.699 vacunos que ingresaron ayer en Liniers, un 50% menos que la oferta habitual de los días lunes, y casi 21 mil animales por debajo del récord del viernes.

Pero, ¿se puede esperar un año?

La respuesta es no. Por ello, mañana a las 9, el gobernador entrerriano Jorge Busti recibirá al Intendente de San José, doctor Eduardo Jourdán.

El funcionario concurrirá a la casa de Gobierno de la provincia acompañado por miembros del Sindicato de la Carne con el fin de solicitarle al primer mandatario, que interceda ante el Gobierno Nacional por la situación que se está generando en el frigorífico Swift, tras la suspensión de las exportaciones de la carne.

Así lo anunció el secretario del intendente Eduardo Paredes, quien comentó que ayer desde horas muy tempranas, el presidente municipal de la vecina ciudad mantuvo diversas reuniones y se puso rápidamente al frente de la situación que involucra a más de 500 empleados que trabajan en la planta frigorífica que desde el lunes se encuentran bajo el régimen de garantía horaria, según informa el diario La Calle de Concepción del Uruguay, Entre Ríos.

En tanto el responsable de Relaciones con la Comunidad de la empresa, Alejandro Fried, señaló a La Calle que "por el momento es decisión de la empresa no hacer declaraciones a la prensa, hasta tanto no se hagan las evaluaciones pertinentes", pero indicó que "está totalmente claro que esta medida tiene un impacto tremendo para toda la compañía. Swift es una empresa dedicada a la exportación y el 70% de lo que produce se exporta".

Respecto a las consecuencias de la medida tomada por el Gobierno, Fried destacó: "ya se están notando, desde el lunes comenzamos a funcionar bajo el sistema de garantía horaria con casi todo el personal".

Al mismo tiempo que señaló que en la empresa, confían en que el Gobierno evaluará el impacto que genera en la industria frigorífica y revea la medida.

Resulta que la empresa Swift se ha convertido desde hace tiempo en la principal actividad económica que tiene la ciudad y sus alrededores.

Desde el Municipio se indicó que "la comunidad en su mayoría tiene relación directa con el frigorífico. Ante esta situación que hoy se ha dado a partir de la decisión del Gobierno de suspender las exportaciones de carne es que la preocupación ha ganado los diversos sectores sociales que se movilizaron rápidamente para evitar males mayores".

* En el 'campo', no le va nada bien al Gobierno

En 'el campo', parece que al gobierno no le va nada bien. Y era de esperar.

La sensación de malestar del agro con las políticas del Gobierno hacia el sector no parece ser novedosa. Sin embargo, la encuesta realizada por Icasa/Mora y Araujo aporta por primera vez datos muy concretos respecto del estado de malestar del campo con las políticas oficiales.

El trabajo revela que el 76 % de los productores opina que la política del Gobierno hacia el sector agropecuario es desfavorable, mientras que sólo el 11% sostiene que es favorable, según publica AgroDiario.

De las expresiones críticas, el 49% piensa que la gestión oficial es "desfavorable", y el 27% es "muy desfavorable". En las valoraciones positivas apenas el 1% dice que es "muy favorable" y el 10% sostiene que es "favorable".

El principal factor que surge como rechazo a las políticas oficiales son las retenciones a las exportaciones agropecuarias. El 82% de los entrevistados dijo que los derechos de exportación son el principal factor limitante para el crecimiento de sus empresas. A su vez, cuando se les preguntó cuáles eran los aspectos negativos que destacaba del actual gobierno, el 61% mencionó a las retenciones a las exportaciones.

En segundo lugar apareció "la carga tributaria y la presión impositiva", con el 34% y luego la "falta de políticas agropecuarias, con el 18%.

Cuando se reinstauraron las retenciones en 2002 se dijo que se aplicaban en forma transitoria por la emergencia social. Sin embargo, permanecieron y en algunos casos como con los lácteos y la carne se incrementaron y fueron utilizadas como herramientas para intentar frenar el alza de precios en el mercado interno.

Hoy el Estado se queda con unos US$2000 millones anuales en concepto de retenciones al agro y se calcula que representan el 8% de la recaudación impositiva. En la encuesta, los productores no encontraron aspectos positivos sobre la gestión del Gobierno.

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