San Lorenzo le ganó a Quilmes 1-0 y jugará la final del Cuadrangular con Racing

San Lorenzo, al igual que Racing, ganó sólo 1-0 con gol de cabeza luego de un balón detenido y jugará la final del Cuadrangular el próximo sábado con el equipo de Miguel Russo. El gol de los dirigidos por los de Ramón Díaz fue anotado por Cristian Tula en el complemento luego de un centro de Leandro Romagnoli.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24) Lo primero para decir es que la avidez de facturar por parte de los actores que arman este negocio, pone en evidencia aspectos negativos de los jugadores y los equipos debido a la etapa del año que transitan. Lejos de echarles culpas a los jugadores, el encuentro fue un bodrio. Bastante parecido a lo sucedido ayer entre Racing y Bánfield.
Eximimos a los jugadores de esto porque sabemos lo que significa salir a escena y competir ante los ojos de todos en esta altura del año. Los equipos están duros, lentos, les falta con la pelota y juegan mal. Algo normal. Aunque si los exponemos porque la televisión y los clubes quieren facturar, es otro tema. Después se ve lo que se vio.
Sólo aclarar esto para que nadie se las agarre con estos jugadores que armaron un muy mal partido de fútbol y que San Lorenzo lo ganó bien con lo justo, y por la mínima. Horas antes del encuentro entre San Lorenzo y Quilmes, Patricio Toranzo envió un centro al corazón del área de Banfield para que Matías Martínez rompiera el molde de cabeza y le diera la victoria a Racing.

Horas después del triunfo de Racing, Leandro Romagnoli picó la pelota al punto penal para que Cristian Tula apareciera sin marca y pusiera, de palomita, el 1 a 0 que sería el resultado final.

Fue un típico partido de pretemporada. Reinaron las imprecisiones y escasearon las situaciones de peligro. Por eso, la única manera que había para llegar al gol era de pelota parada.

En el primer tiempo, Quilmes dejó muy solo a J.J. Morales en ofensiva. Fue neutralizado fácilmente por los tres defensores del Ciclón. En el medio, Chaco Torres se comió a Raymonda, y López no pesaba. En consecuencia, el equipo de Tocalli no tenía juego. Tampoco el de Ramón, pero Alfaro se mostraba movedizo y los volantes tenían mayor dinamismo.

A los 2 ' del complemento, Botinelli (silbado por su propio público) hizo de cortina y dejó sin marca a Tula (Sebastián Martínez lo perdió), que se tiró de palomita y la mandó al gol.

Quilmes, luego del gol, intentó ser protagonista, pero careció de argumentos. Tenía la pelota, es cierto, pero no lastimaba. La posesión de balón te da más oportunidades de llegar, de pensar, de abrir juego, de dominar a tu rival. Pero si no la utilizás con criterio o no tenés a los intérpretes necesarios, la orquesta pasará inadvertida.

La final del torneo de invierno se jugará el próximo sábado en el Cilindro de Avellaneda a partir de las 16:00. 

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