El doble juego de Paquistán obliga a Obama al plan de retirada de Afganistán

Fuerte condena de la Casa Blanca a la filtración de documentos secretos de la guerra en Afganistán, vía el sitio web 'WikiLeaks', que publicó 91.000 archivos del Ejército estadounidenses recolectados en Afganistán bajo el nombre de 'Diario de guerra afgano', que cubren la guerra desde 2004 a 2010, y abren nuevos interrogantes sobre la estrategia de guerra del presidente Barack Obama.

Funcionarios gubernamentales estadounidenses en Afganistán sospecharon que Paquistán apoyó secretamente a los talibanes al tiempo que recibía asistencia estadounidense, según informes militares del Pentágono 'filtrados' a la opinión pública.
Entre los cerca de 90.000 documentos, hay informes militares estadounidenses en Afganistán sobre operaciones encubiertas o muertes de civiles de las que nunca se informó públicamente.
Uno de los documentos filtrados habla de una reunión del Talibán a la que asistió un ex funcionario de inteligencia paquistaní que parece estar trabajando contra las fuerzas estadounidenses en Afganistán.
El embajador de Paquistán en USA, Husain Haqqani, dijo que la filtración de informes de batalla sin procesar era irresponsable.
"Esos reportes reflejan nada más que los comentarios y rumores de una sola fuente, que abundan a ambos lados de la frontera Paquistán-Afganistán y suele comprobarse que son erróneas", dijo el diplomático en un comunicado.
Bajo el título "Afghan War Diary" ("Diario de guerra afgano"), los 91.000 documentos del Ejército estadounidenses recogidos en Afganistán cubren la guerra desde 2004 a 2010, señaló WikiLeaks en un sumario.
Los documentos fueron facilitados también a las redacciones del diario británico The Guardian y del semanario alemán Der Spiegel.
El diario estadounidense The New York Times, que también tuvo acceso, informó de que los documentos mostraban que Paquistán está colaborando activamente con la insurgencia afgana.
"Los documentos (...) sugieren que Paquistán, un aliado ostensible de Estados Unidos, permite a representantes de sus servicios de espionaje reunirse directamente con los talibanes en sesiones secretas de estrategia para organizar redes de grupos combatientes para que luchen contra soldados estadounidenses en Afganistán, e incluso para tramar asesinatos de líderes afganos", dijo el Times.
Los documentos sobre el supuesto doble juego de Paquistán podrían dar argumentos a los legisladores que quieren que Obama anuncie un plazo de retirada de las tropas para julio próximo, e incrementa la presión sobre el Gobierno para que defina una estrategia al respecto.
La Casa Blanca respondió con una fuerte condena a las 'filtraciones' que volvió a realizar la organización WikiLeaks, afirmando que pueden poner en peligro la seguridad nacional y las vidas de estadounidenses y sus aliados.
El asesor de Seguridad Nacional de Obama, Jim Jones, dijo que la 'filtración' no afectará "nuestro compromiso permanente de profundizar nuestra alianza con Afganistán y Paquistán".
Las revelaciones contenidas en más de 90.000 documentos secretos podrían alimentar las crecientes dudas en el Congreso sobre la estrategia de guerra del Pentágono, a medida que crece la cifra de bajas estadounidenses y disminuye el apoyo público para la guerra que ya lleva 9 años.
Lo que Reuters llama 'la estrategia de guerra de Obama', cabe recordar, consiste en un reclamo de los militares estadounidenses, que desean reforzar la permanencia en Afganistán mientras que Barack Obama llegó a la Casa Blanca pidiendo un cronograma de retiro similar al que se aplica en Iraq.
Ahora, con la difusión de documentos, todo se agitó mucho en Washington DC.
El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, John Kerry, uno de los más cercanos aliados demócratas de Obama, dijo que los documentos filtrados generan "serios interrogantes sobre la realidad de la política estadounidense hacia Paquistán y Afganistán".
Las autoridades estadounidenses dijeron que los documentos se centraban en el período que desembocó en el lanzamiento de la estrategia de Obama para Afganistán en diciembre de 2009, cuando autorizó el despliegue de 30.000 soldados más.
"El presidente Obama anunció una nueva estrategia con un importante aumento de los recursos para Afganistán, e incrementó la atención sobre los refugios de Al Qaeda y los talibanes en Paquistán precisamente por la grave situación que se había desarrollado durante años", dijo Jones.
"Sabemos que tenemos desafíos graves por delante, pero si se permite que Afganistán retroceda, otra vez nos enfrentaremos a una amenaza de violentos grupos extremistas como Al Qaeda, que tendrá más espacio para organizar complots y entrenamientos", agregó.
Funcionarios estadounidenses se quejan desde hace tiempo de que algunos en Paquistán juegan a dos bandas.
A comienzos del mes, London School of Economics publicó un informe que sugiere lazos estables entre los talibanes y la agencia de servicios secretos de Paquistán, algo negado por este país.
WikiLeaks promueve la filtración de información para la lucha contra la corrupción gubernamental y empresarial. A comienzos de año difundió un vídeo confidencial que muestra el ataque de un helicóptero estadounidense a docenas de personas en Irak y mató, entre otros, a dos periodistas de Reuters.
Según 'The New York Times', los documentos apuntan a que los servicios de inteligencia paquistaníes ayudaron secretamente al movimiento talibán en Afganistán, al mismo tiempo que el Gobierno en la capital, Islamabad, recibía más de US$ 1.000 millones anuales de Washington por su ayuda contra los insurgentes.
Los documentos, informes de campo en Afganistán "indican que los soldados estadounidenses sobre el terreno están inundados de informes de una red de agentes y colaboradores paquistaníes que opera desde el anillo tribal paquistaní a lo largo de la frontera con Afganistán, el sur de ese país y llega a Kabul".
El diario indicó en su página digital que mucha de la información no es verificable, pero que "numerosos informes se basan en fuentes que los militares consideran fiables".
Los informes también incluyen relatos de primera mano sobre la falta de voluntad paquistaní a hacer frente a los insurgentes que atacan cerca de los puestos fronterizos paquistaníes, apuntó 'The New York Times'.
Estos documentos señalan que Paquistán, agregó el periódico, "permite a representantes de sus servicios secretos reunirse directamente con los talibanes en sesiones secretas de estrategia para organizar redes de grupos militantes que combaten con los soldados de EE. UU. en Afganistán, e incluso traman planes para asesinar a líderes afganos".
Por su parte, 'The Guardian' indicó que estos informes revelan cómo "una unidad secreta de fuerzas especiales traza a los líderes talibán para matarlos o capturarlos sin juicio".
El diario británico también se refirió a las cifras de civiles afganos muertos y apunta que los registros filtrados indican 144 incidentes de ese tipo. "Algunas de estas bajas se deben a los ataques aéreos que han suscitado protestas del Gobierno afgano en el pasado, pero un gran número de incidentes hasta ahora desconocidos parecen ser el resultado de soldados que abren fuego contra conductores desarmados o motociclistas, a causa de su determinación a protegerse de terroristas suicidas", apunta.
Según 'The Guardian', los documentos admiten la muerte de 195 civiles y las heridas de otros 174. Estas cifras "es probable que estén subestimadas porque muchos incidentes en duda se omiten" de los informes de campo, agrega.
La publicación de los documentos se produce tras la detención del analista de inteligencia Bradley Manning, acusado de la filtración de datos clasificados.
Manning fue detenido después de que un 'pirata informático', Adrian Lamo, denunciara que el analista había presumido de haber descargado 260.000 documentos clasificados y habérselos enviado a "Wikileaks".

Dejá tu comentario