Fútbol 2010: "Lo que viene es la defensa ofensiva"

El Grupo de Estudios Técnicos de la FIFA (GET), recopiló información sobre lo ocurrido en Sudáfrica 2010. Ese informe, junto con un DVD, se pondrá a disposición de las 208 asociaciones que integran la FIFA. Urgente24 acerca un anticipo de ese trabajo, mediante una entrevista de la revista digital de la FIFA al director del GET, Jean Paul Brigger.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). Algunas apostillas antes de la entrevista:
> Jean Paul Brigger trabaja para la Federación Internacional de Fútbol Asociado (es el director del Grupo de Estudios Técnicos de la FIFA), y entonces es inútil pedirle mucha independencia en el análisis.
> Insoportable los redactores de la FIFA con esos latiguillos tipo "el deporte rey" para hablar del fútbol.
> Ni el entrevistador ni el entrevistado hicieron mención a la baja calidad de los arbitrajes, tema central de Sudáfrica 2010.
> El juego en general fue de mediocre hacia tedioso, pero Brigger le concede una brillantez que no tuvo.
No obstante, es interesante conocer cuáles son las tendencias emergentes de la más reciente Copa del Mundo:
-El GET ha estudiado exhaustivamente la Copa Mundial de la FIFA Sudáfrica 2010. ¿Se han detectado nuevas tendencias en el deporte más popular?
-Siempre es difícil hablar de tendencias después de un Mundial. Hemos visto que las 32 selecciones estaban bien o muy bien organizadas. Es evidente que el concepto defensivo ha funcionado. En el partido contra Portugal, la RDP de Corea se quedó sin fuerzas pero, salvo en ese encuentro, también jugó de manera muy ordenada. Fue llamativo que tanto los equipos sudamericanos como España y Holanda pronto empezaban a defender muy arriba, de manera que cuando perdían el balón ante la portería contraria, enseguida se ponían a presionar sin replegarse. Esa defensa ofensiva se impuso también entre las demás potencias. Otra tendencia es el movimiento en bloque entre las dos áreas. El colectivo actúa como una unidad compacta: todos participan, nadie se queda esperando o rezagado.
-¿Se ha impuesto algún sistema en concreto? ¿Ha habido descubrimientos tácticos?
-No necesariamente. La mayoría de los equipos recurrieron al 4-4-2 habitual, o al 4-2-3-1; algunos también desplegaron un 4-3-3. En general, los sistemas se disponen de manera muy variable; el planteamiento táctico básico se altera conforme a la situación del partido y al resultado; los jugadores cambian de posición cada vez con más flexibilidad.
-En los primeros encuentros se produjeron muy pocos goles. ¿A qué piensa que fue debido?
-En el primer partido, nadie quiere perder y la prioridad es jugar a lo seguro, porque una derrota y la subsiguiente presión externa, como por ejemplo la de los medios de comunicación, pueden debilitar al equipo. Sin embargo, algunos combinados jugaron al ataque desde el principio, como por ejemplo Argentina o Alemania. A partir de la segunda ronda, se jugó más ofensivamente, porque había que elegir entre ganar o marcharse. Por eso hubo más goles a partir de entonces.
-Dos selecciones europeas, España y Holanda, volvieron a disputar la final mundialista. ¿Es una señal del poderío de Europa?
-Eso demostró que Europa está fuerte. Después de su conquista del campeonato europeo, España también se ha proclamado campeona del mundo en 2010, lo cual es un éxito enorme. He ahí un equipo que ha crecido y que juega un fútbol fantástico y muy atractivo. Es compacto, combativo, correoso. El centro del campo con Xavi, Iniesta y Xabi Alonso se mueve un montón, al tiempo que fabrica un gran fútbol; da la impresión de que es cuestión de habilidad, pero también es un trabajo enorme. Conforman un entramado muy completo, casi se podría hablar del equipo del siglo. Holanda también hizo un fútbol fantástico hasta la final.
-A juzgar por sus cuatro representantes en cuartos de final, Sudamérica parecía dominar a esas alturas de la competición. No obstante, ninguno de ellos accedió a la final. ¿Por qué?
-La derrota de Brasil ante Holanda fue por un margen muy estrecho. En la primera mitad, los brasileños elaboraron un fútbol absolutamente sublime, pero en la segunda parte no pudieron mantener ese rendimiento y perdieron el encuentro en dos jugadas a balón parado. Ahí se vio que, a este nivel, una pequeña debilidad puede costar el pase a la siguiente ronda. Argentina recibió una lección contra Alemania en cuanto a organización y juego inteligente. Paraguay fue un equipo incómodo: cayó derrotado ante España por un pelo. Iker Casillas tuvo entonces su gran día, y David Villa marcó el gol decisivo poco antes del pitido final. En ese caso, decidió la clase individual. Uruguay demostró que con trabajo duro, un buen espíritu de equipo, una buena colocación sobre el terreno de juego y dos delanteros de primer orden se puede llegar muy lejos. Al final mereció el cuarto puesto que consiguió.
-Alemania se presentó con un equipo muy joven. Thomas Mueller fue máximo goleador y también mejor jugador joven del torneo. ¿Es una prueba del buen trabajo que se está haciendo con los jóvenes en Alemania?
-Alemania me sorprendió muchísimo. Merece mucho respeto la manera en la que se logró integrar a los jóvenes en el conjunto. Ahí Joachim Loew corrió un cierto riesgo, al dar la oportunidad de jugar en un Mundial a tantos jóvenes jugadores. A Thomas Mueller apenas lo conocía nadie hace un año. Los alemanes hicieron un fútbol magnífico, coherente y fuerte en el uno contra uno. Demostraron casi a la perfección cómo se puede defender con inteligencia sin cometer fallos, y luego trenzar rápidos contragolpes, basándose en un fútbol de ataque fresco y fabuloso.
-¿Cómo se explica usted el fracaso precoz de los dos finalistas de 2006, Italia y Francia?
-Eso fue más que una sorpresa para todo el mundo. A Italia es cierto que le faltaron dos jugadores clave, como son Gianluigi Buffon y Andrea Pirlo, a los que es muy difícil reemplazar. Además, siempre es complicado volver a estar a la misma altura después de haber conquistado el campeonato del mundo. Francia, por su parte, necesita ahora una completa reconstrucción, que es lo que está empezando a hacer el nuevo seleccionador, Laurent Blanc.
-Ghana estuvo a punto de convertirse en el primer equipo africano que se clasifica para semifinales de una Copa Mundial. ¿Cuánto ha progresado el fútbol en África?
-Ghana estuvo extraordinariamente organizada, y muy bien dotada para el contragolpe rápido. Cada uno de sus jugadores sabía exactamente lo que tenía que hacer. La selección sub-20 de Ghana se coronó campeona del mundo en 2009 en Egipto, y muchos de los jugadores de ese equipo se incorporaron al combinado nacional absoluto que compitió en Sudáfrica. Ghana contó además con un delantero fuera de serie, Asamoah Gyan, que desgraciadamente se convirtió en el héroe trágico de este Mundial, porque podría haber escrito su nombre en los libros de historia de haber transformado el penal en el choque de cuartos de final contra Uruguay. Fue uno de esos momentos en los que se pudo apreciar lo brusco que puede ser el vuelco de la alegría a la pena.

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