DEBATE

EL CASO DE URUGUAY

La democracia verdadera no le teme a las elecciones internas

La Argentina no vive una democracia representativa sino una transición hacia la democracia representativa: es una conclusión permanente de Urgente24, y cada vez que llegan tiempos de Primarias Abiertas Simultáneas Obligatorias se revalida este concepto. En una democracia consolidada, por ejemplo, las fuerzas político-partidarias pueden competir sin cortapisas ni temor a cismas posteriores a conocerse el resultado. Por ejemplo, en Uruguay acaban de celebrarse los comicios para elegir al candidato presidencial de las 3 fuerzas político-partidarias que irán al comicio y a nadie le pareció fatal que el Frente Amplio tuviera 4 precandidatos, el Partido Nacional 5 y el Partido Colorado otros 5. Por supuesto que había favoritos, pero estos no impidieron la presentación de sus aparentes rivales. Y a ninguno que perdió ahora se le ocurre declarle la 'guerra santa' al ganador. Tampoco nadie planteó la berretada de intentar suspender el comicio un mes antes. En definitiva, Uruguay tiene 3 candidatos presidenciales legítimos, surgidos de una competencia transparente dentro de sus espacios respectivos: así se construye una democracia representativa. Uno de los problemas argentinos es suponer que sus temores, obstáculos e hipocresías son 'males necesarios' de la instalación democrática.

Hay candidatos presidenciales en Uruguay: La votación dominical definió los candidatos de los partidos con mayor participación electoral: 

> Luis Lacalle Pou (Partido Nacional), 
> Daniel Martínez (Frente Amplio), y 
> Ernesto Talvi (Partido Colorado).

No hubo grandes sorpresas en las elecciones internas, si uno se basa en los vaticinios de las encuestadoras, aunque sí algunos resultados más abultados de los esperados.

Por ejemplo, Ernesto Talvi sacando mucha luz de ventaja sobre Julio María Sanguinetti y Luis Lacalle Pou aventajando con holgura a sus competidores. En la interna del Frente Amplio, Oscar Andrade votó por encima de lo esperado.

Lacalle Pou -quien aventajó con gran amplitud a Juan Sartori y relegó al 3er. puesto a Jorge Larrañaga-, aprovechó el festejo para anunciar su binomio presidencial: irá junto a la presidenta del Directorio del Partido Nacional, Beatriz Argimón. 

Sartori, quien fue la gran novedad de la elección de los 'blancos', no tuvo el comportamiento que proyectaban las encuestas. De todos modos prometió que su sector presentará candidatos al Parlamento, a las intendencias y a las alcaldías.

En el Frente Amplio, los 4 precandidatos se mostraron unidos en la sede de la izquierda portando banderas uruguayas y de la coalición. 

Martínez celebró que el FA pudiese concretar sin altercados una renovación sin los líderes históricos, Tabaré Vázquez, José Mujica y Danilo Astori. 

En cambio en el Partido Colorado sí hubo tensiones. Para los Batllistas, del veterano Julio Sanguinetti, fue inesperada la arremetida final de Ciudadanos. Ernesto Talvi, el triunfador, no ocultó su euforia: “En los descuentos, con gol de cabeza y en el área chica”

Sanguinetti, contrariado, dijo que la fórmula no se conocería anoche. Ni tampoco el lunes. Y hubo una tirante discusión telefónica con Talvi acerca de cómo designar al candidato a vicepresidente.

En los días previos, ambos habían aceptado públicamente que quien perdería sería el compañero de fórmula de quien ganase. Pero el resultado fue perturbador, inicialmente.

Talvi obtuvo, según los primeros resultados, más del 50% de los votos partidarios y superó por más de 10 puntos porcentuales a Sanguinetti: no necesita de la convención nacional para proclamar al candidato a vice.

De todos modos, cuando Talvi arribó a la sede partidaria, los ánimos ya se habían calmado bastante y  ambos se mostraron conciliadores.

Talvi dijo públicamente: “No descarto ni confirmo” a Sanguinetti como su vice.

El historiador y politólogo Gerardo Caetano, analizó por Radio Uruguay los resultados de la elección interna.

Según él, si bien no hay que proyectar los resultados de las internas a las elecciones nacionales de octubre, el Partido Nacional fue la fuerza política más votada, y es evidente el liderazgo del herrerista Lacalle Pou.

Él agregó que "Juan Sartori no votó de acuerdo a sus expectativas", y fue "importante" la derrota sufrida por Larrañaga y el grupo de los intendentes, liderado por el fernandino Enrique Antía.

En cuanto al colorado Talvi, sentenció: "Goleó, casi que duplica los votos nada menos que de Sanguinetti".

Y en el Frente Amplio, él destacó que, detrás de Daniel Martínes, Oscar Andrade arrebató el 2do. lugar a Carolina Cosse, precandidata apoyada por el MPP (Movimiento de Participación Popular): "José Mujica no puede transferir votos. Los candidatos que apoya Mujica no ganan".

Sin duda que el descenso en la cantidad de electores del Frente Amplio que fueron a las urnas (46.000 menos) contra un aumento de sus rivales (30.000 más para los 'blancos' y 40.000 más para los colorados), tuvo que ver con la escasa instalación que logra aún la nueva generación. Los veteranos tendrán que salir al rescate en la etapa que viene.

Caetano se refirió a la buena votación conseguida por el debutante Cabildo Abierto, partido liderado por el general Guido Manini Ríos, espacio en el que no hubo disputa interna pero que acumuló más de 50.000 votos.

"Cabildo Abierto vuelve a traer el peso del factor militar", aseveró.

La consultora Factum analizó los números de la elección interna. Su CEO, Eduardo Bottinelli: "vienen básicamente del sanguinettismo", y esto explicaría la sorpresa en la elección doméstica del Partido Colorado.

"Todos los estudios que hicimos previamente indicaban que la mayor parte de la intención de voto provenía del ala colorada sanguinettista, y eso se daba muy fuertemente en el interior que es donde votó mejor" aunque también tuvo un buen desempeño en Montevideo. 

Según Bottinelli, Manini Ríos también captó, pero en forma minoritaria, voluntades de algunos sectores del Frente Amplio y de "votantes que andaban boyando" sin raíces partidarias.

Bottinelli consideró que esta nueva fuerza política podría tener un buen desempeño en las elecciones nacionales, aunque para ellos aplica la misma recomendación que para el resto de los partidos: "Siempre hay que tomar con pinzas estos resultados".

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