OPINIÓN

ELECCIONES 2019

Enorme problema de Macri: El Plan V siempre está (pese a Vidal)

Para Urgente24, más allá del esfuerzo mediático de Mauricio Macri por demostrar que en un balotaje que él gana aunque todavía no puede fundamentar cómo haría para evitar el triunfo en 1ra. vuelta de su rival (quizás Cristina Fernández de Kirchner, un ascenso responsabilidad exclusiva de Macri, Jaime Durán Barba y Marcos Peña), hay 2 obstáculos enormes por delante para el Presidente: por un lado, la certeza de que María Eugenia Vidal es la preferida de casi todos los votantes del propio Macri, situación compleja que obliga a Macri a obtener alguna legitimidad para ser el candidato sin PASO cuando 2019 no es 2015; por otra parte, la economía que tiene un mes de mayo complicadísimo por delante y, entonces, el análisis hay que hacerlo sobre la foto al 31/05 y no al 29/04. Muy interesante es que, sin conversarlo previamente, el periodista y politólogo Claudio Chiaruttini elaboró, para el editorial de su radial Sin Saco y Sin Corbata, un análisis que fundamenta con solidez todas esas cuestiones:

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Sin Saco y Sin Corbata). La crisis se espiraliza. El “Círculo Rojo” ya eligió a María Eugenia Vidal como su candidata a Presidente de la Nación. El mercado pide certezas al Gobierno de Mauricio Macri.

El peronismo huele sangre y corre hacia el kirchnerismo. El kirchnerismo se ilusiona con una candidatura presidencial de Cristina Fernández de Kirchner y un triunfo electoral por el simple lanzamiento de un libro ("Sinceramente").

La Casa Rosada hace todo lo contrario que se necesita para controlar una crisis y se muestra negando lo evidente y no respondiendo las demandas de los mercados y la política. La consecuencia: Asoma un vacío de poder falso, que en realidad, es ausencia o pésima decisión política.
    
En la Ciudad de Buenos Aires 2007/2015, el PRO se caracterizó por ser pragmático. Hacía lo que debía hacer, dejaba la ideología de lado. Jaime Durán Barba entendía como nadie los deseos y necesidades de los porteños, sobre todo, en materia política. Horacio Rodríguez Larreta mantenía un fino equilibrio entre lo que decían las encuestas, los pedidos de la gente y las necesidades políticas de Mauricio Macri. Pese a que subía el endeudamiento de la Ciudad y la tasa del ABL (alumbrado, barrido y limpieza), la gestión financiera y económica fue equilibrada. El paso a la Casa Rosada, fue fruto de esa combinación particular.
    
Pero desde que llegó a la Casa Rosada (10/12/2015), el PRO cada vez fue menos pragmático. Se ató a ciertas metodologías, tales como

** el gradualismo,

** la soberbia en la gestión y

** el desprecio por empresarios, periodistas, el peronismo, los aliados de “Cambiemos” y todo aquello que no fuera “PRO Puro”.

Si bien ganó en 2017 con comodidad, a partir de allí, fue todo barranca abajo.

Las encuestas se convirtieron en un estigma para la gestión, que se hizo lenta y torpe. La economía se despedazó por las pésimas decisiones tomadas; los que sabían, fueron echados para dar lugar a los “confiables”, que en realidad son obsecuentes. Por eso, la reelección está, hoy, en duda.

Está pasando la cuenta la triple decisión de

**  no tener Ministerio de Economía,

**  carecer de ministro de Economía,

**  obviar cualquier Plan Económico.

Nada alcanza hoy día para el mercado, que ya no oculta su desconfianza por aquellas decisiones de Macri, pero que el entorno del Presidente prefiere socializar la pérdida con Marcos Peña, aunque es evidente que Peña sólo existe porque es Macri.

**  Ni el mayor acuerdo del Fondo Monetario Internacional en su historia, con 3 waivers encima;

**  ni un Presupuesto que se supone que tendrá saldo neutral,

**  ni el mayor nivel de Reservas del Banco Central de su historia,

**  ni tener casi cubiertos los vencimientos de deuda pública 2019.

Nada aleja los temores de defaul t. Nada detiene la salida de divisas. Nada frena el desarme de posiciones con activos locales.

Tampoco hay que ser inocentes: En 2 semanas, MSCI, ponderador estadounidense de fondos de capital inversión, deuda, etc., deberá decidir qué hace con la Argentina,

**  si la mantiene en la actual situación,

**  si la vuelve a expulsar del mundo financiero, o

**  si la coloca como un mercado emergente, a pleno.

Hacer correr rumores, para que haya ventas masivas, para comprar barato, esperando un guiño de MSCI, no es una mala jugada. Por eso, muchos la están realizando. Ya lo dice un viejo dicho bursátil: “Se compra con el cañón, se vende cuando suenan las campanas”.

Pero, más allá de las jugadas de unos 'vivos', que siempre existen, hay algo claro: La economía argentina está en pésimas condiciones.

**  Inflación que no baja pese a tasas de interés que parten de un piso de 70%,

**  tarifas que se dice que van a ser congeladas, pero no van a ser congeladas;

**  destrucción de puestos de trabajo, cierre de empresas y comercios;

**  caída del poder de compra del salario.

Una combinación nefasta, que ya la hemos vivido.

¿Y qué hace el Gobierno en este marco?

Desde hace meses asegura que la inflación está bajando y no baja. Al mismo tiempo que prometen que van a congelar las tarifas públicas, se amenaza con una suba de hasta 10% en los combustibles. Las empresas que se comprometieron a los “Precios Esenciales” dudan de poder mantener sus valores, apenas 1 semana después del anuncio oficial.

En vez de dar señales al mercado de bonos, el Presidente de la Nación, en persona, declara que el mercado no los entiende.

El lunes 22/04, en el Hotel Alvear, ante el Consejo Interamericano de Comercio y Producción, María Eugenia Vidal realizó un discurso mesurado, técnico, con un leve tinte electoral. No fue ni combativa, ni hizo anuncios sorpresivos. Sin embargo, los poderosos empresarios presentes la aplaudieron de pie. El entusiasmo era enorme. Varias veces le preguntaron si iba a ser candidata a Presidente de la Nación. En realidad, le estaban diciendo que la querían como candidata a Presidente de la Nación.

El resultado fue Mauricio Macri, Rogelio Frigerio, Marcos Peña, Horacio Rodríguez Larreta, Federico Pinedo, la propia gobernadora de la Provincia de Buenos Aires y algunas otras figuras menores del macrismo, todos negando que María Eugenia Vidal vaya a ser candidata a Presidente de la Nación y ratificando que el elegido es Mauricio Macri.

Curioso, en política, todo aquello que se niega varias veces, a la larga, se confirma. Y debilita al desmentidor.

No es un “Operativo Clamor”, pero se le parece mucho.

¿Por qué el “Círculo Rojo” quiere a María Eugenia Vidal como candidata a Presidente de la Nación?

**  Roberto Lavagna y Sergio Massa, no tienen chances, la intención de voto de ambos está congelada, es decir, llegó a un techo.

**  La intención de voto a Mauricio Macri no deja de caer y

**  CFK se acerca a su techo, pero no la quieren de regreso.
    
María Eugenia Vidal, que no es candidata presidencial, oficialmente; que no tiene más que el equipo que la acompaña en la Provincia de Buenos Aires, en donde hace un gran trabajo, pero lejos de lo que se requiere a nivel nacional; ofrece la confianza que Mauricio Macri ya no presenta, se muestra dialoguista, algo que no son ni Mauricio Macri ni CFK; hace política, cosa que la Casa Rosada dejó de hacer hace mucho.

Pero, sobre todo, es creíble, una característica perdida por el líder del PRO, por la ex Presidente, por Sergio Massa y por Roberto Lavagna.

Hablando de economía,

**  Mauricio Macri promete 4 años más de Marcos Peña y Nicolás Dujovne,

**  CFK es conocida por todos y Axel Kicillof es su mejor opción para el Palacio de Hacienda.

Ambas propuestas son dramáticas para la Argentina.

María Eugenia Vida es promesa de algo nuevo, no se sabe muy bien qué es ese “algo nuevo”; pero no es el pasado, ni el presente. Eso la diferencia de cualquier otro candidato de esta elección. Por eso el “Círculo Rojo” la eligió.

Es curioso, pero el macrismo siempre tuvo una regla para nominar sus candidatos: Quién tenía más intención de voto, era el elegido. Así María Eugenia Vidal se impuso como ViceJefa de Gobierno porteño. Así fue luego candidata a gobernadora bonaerense. Se pueden citar 100 ejemplos. Ahora, en estos momentos, María Eugenia Vidal tiene más intención de voto y más imagen positiva que Mauricio Macri. ¿Cuál es el motivo para no convertirla en candidata a Presidente de la Nación?

Se argumenta que Mauricio Macri es el líder del espacio y queda claro que los líderes argentinos no seleccionan herederos.

Por soberbia, CFK hizo que el kirchnerismo perdiera las elecciones de 2015 y que el peronismo perdiera el control de la Provincia de Buenos Aires, luego de 28 años. ¿Mauricio Macri hará lo mismo?

Hoy, él no sólo corre riesgo su proyecto de retener la Casa Rosada, sino también, el territorio bonaerense. Queda en sus manos, o de Marcos Peña, evitar eso.

El lanzamiento del libro de CFK convirtió en realidad la candidatura de la ex Mandataria. La maniobra de marketing político se diseñó y ejecutó con prolijidad.

**  Primero, se hizo conocer que el 20/06 la ex Presidente de la Nación encabezará un acto en la cancha de Racing Club.

**  Luego, el libro, justo cuando comenzó la Feria del Libro.

**  Después, la ola de gente comprando ejemplares, incluso, de a cajas.

**  Por fin, las principales figuras del kirchnerismo sacándose una foto con un ejemplar, combinando fidelidad, permanencia, equipo, reavivando la mística y creando la sensación de un inevitable regreso al poder.

Es notable. El kirchnerismo hizo todo bien para demostrar vigencia y poder. El Gobierno de Mauricio Macri, hizo todo mal:

**  Anuncian que el Presidente de la Nación canceló su agenda para “seguir la crisis en los mercados”.

**  Filtran un almuerzo de Marcos Peña con los ministros, pero no dicen que esa comida se hace todas las semanas, en forma regular.

**  Luego, anuncian una sorpresiva reunión de Gabinete en la Quinta de Olivos, cuando los viernes nunca ocurren.  

**  Para peor, salen 100 veces a confirmar la candidatura presidencial de Mauricio Macri y niegan la de María Eugenia Vidal.

Sobran las señales de debilidad e incertidumbre.

De esta forma, el kirchnerismo y el macrismo son, comunicacional y políticamente, el agua y el aceite.

La planificación contra la improvisación. La mística y el relato contra la repetición de un discurso vacío. La política contra la antipolítica. Los resultados, están a la vista: Hoy, todo el mundo tiene en claro que CFK será candidata a Presidente y casi todos dudan que Mauricio Macri compita por un 2do. mandato.

Para el 22/06 faltan 56 días. Es un tiempo eterno en el actual clima que existe en la City. Por eso, el Gobierno no puede apostar a tratar de llegar al cierre de listas para lanzar el “Plan V”, si es que lo van a lanzar.

Si quieren llegar a esa fecha manteniendo el misterio, van a tener que dar otras señales: Cambios en el Gabinete, en el Banco Central, en la política macroeconómica, en el campo financiero o cambiario. Algo que “calme”, en serio, a los operadores, al “Círculo Rojo”, a Wall Street.

Las palabras, si son las elegidas, dichas en el momento propicio, pueden generar certidumbre. Pero lo hechos son más contundentes. Repetir que nada cambiará hasta ganar la elección no va a resultar. Ya ahora no está resultando. CFK crece en chances de ganar la elección presidencial sin hacer declaraciones, sin hacer promesas (salvo volver al pasado), sólo con gestos. Cuando hable, su intención de votos, caerá.

El libro “Sinceramente” confirma que CFK no cambió. La “Cristina herbívora” que quiso mostrar Alberto Fernández, no existe. Es la misma que el 10/12/2015 no entregó la banda presidencial porque consideraba que era “una rendición”. Pero Mauricio Macri, tampoco cambió. Sigue atado a los errores que lo llevaron a la crisis actual. Una crisis que tiene más chances de profundizarse, de descarriarse, de espiralizarse.

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